Ashly
Levanto la copa hacia el hombre que Adrik dejó para que me cuidara y este ni siquiera niega, simplemente sigue sin moverse mirando hacia el frente y bufo tomando de un golpe el contenido de la copa, hace una hora que salió y hace una hora que bebo, ¿por qué me molesto tanto? Y lo peor, ¿por qué estoy aquí esperando a ver cuando llega? Sin ánimos de responder esas preguntas me pongo de pie, debería estar feliz, volveré a la ciudad antes del tiempo que creía y podré ver a mi hija, camino hacia mi cuarto y entro en este, la cama me invita a ir hacia ella y eso hago, justo cuando me acuesto escucho la puerta y cierro mis ojos, es imposible que sea él, es demasiado temprano aunque quizás.
—¿Ya no sigue en pie la propuesta que me hiciste antes de salir? —sin saber por qué sonrío y abro los ojos para toparme con su intensa mirada, reclamarle sería de estúpidos, Adrik ha demostrado ser todo un caballero, un verdadero hombre en todo el sentido de la palabra, alguien incapaz de romper un compromiso y no puedo reclamarle por ello.
—¿Estaba mala la cena que volviste temprano? —comienza a quitar su camisa
—Digamos que solo fui a cenar Ashly y si te soy sincero —respira hondo viniendo hacia la cama, hacia mí —no he dejado un puto segundo de pensar en ti —él me besa y eso es todo lo que quería.
En el jet voy escribiéndome con Sergio y sonrío al ver una foto de mi pequeña, mi padre está unos asientos más atrás sonriendo y bebiendo, está feliz porque sabe que sacaré un buen trato aunque su idea de que siga trabajando con Alaric no se ha ido, en la empresa tendré que trabajar mano a mano con este y eso me provoca desde ya dolor de cabeza, levanto la mirada cuando el pie de Adrik toca el mío y le miro.
—Le sonríes mucho al teléfono —dice con algo de celos haciendo que sonría
—El tuyo tampoco deja de sonar —señalo este con la cabeza y Adrik ríe
—Es Gema —su respuesta me hace tensarme —quiere tomarse vacaciones para visitarme
—¿Ya le dijiste que prácticamente vives conmigo?
—Lo sabe —alzo una ceja
—¿También sabe que te acuestas con tu jefa? —Adrik ríe
—No eres mi jefa Ashly —bufo volviendo la mirada al teléfono —haz la pregunta que quieres hacer —sonrío, me conoce bien.
—¿Eran novios o solo amigos? —miro sus ojos
—Solo hemos sido amigos —responde y asiento —aunque sé que ella quiere algo más —sigo mirando sus ojos —pero le he dejado claro las cosas siempre.
—Todo un caballero —murmuro y miro mi teléfono al recibir otra foto de mi pequeña, deseo tanto llegar y verla, pero ¿cómo me quito de encima a Adrik? Miro a este que se entretiene con su teléfono y suspiro, debo pensar en algo.
Lanzo mi bolso a un lado en cuanto paso por la puerta de mi apartamento, estoy exhausta, pero mi cabeza no ha dejado de pensar en cómo dejar a Adrik aquí, camino hacia la cocina dejándole a él en la sala y comienzo a preparar algo de comer, luego de servir los jugos echo en uno de los vasos unas gotas que sé que harán dormir a Adrik como nunca en su vida ha dormido, lo que hago está mal, lo sé de sobra, me estoy aprovechando de su confianza, pero debo ver a mi hija.
—¿Qué haces? —me tenso un poco cuando habla y me giro hacia él.
—Algo para merendar, ¿no tienes hambre? —viene hacia mí y sonrío tomando uno de los vasos de jugo que preparé.
—Y también hiciste algo para mí —sonríe mientras asiento, sus ojos están fijos en los míos y le extiendo el vaso que preparé para él.
—Quiero estar a solas contigo esta noche Adrik —me mira luego de probar el jugo
—Estamos solos —él se acerca más a mí
—Sé que ese tal Thor está en la puerta —ríe —dile que se aleje de la puerta —voy a su oído —por favor —susurro dejando un beso ahí.
—¿Qué planes tienes?
—Nada que contenga silencio —miro sus ojos —veremos una película, comeremos algo juntos y luego —me callo, sus ojos brillan
—Le diré que espere abajo —sonrío, él se aleja rápido de mí y suelto el aire que retenía, eso ha sido demasiado fácil.
Observo a Adrik y luego hacia el televisor, la película sigue, pero como sabía, él se ha quedado profundamente dormido, lo muevo un poco y suspiro, no me siento nada bien por esto, pero debía hacerlo y sin pensarlo mucho voy hacia la puerta.
—Gracias por venir Marcia —digo sentándome frente a esta en el parque en el cual hemos quedado de vernos.
—Me llamaste Ashly, dijiste que era importante.
—Estoy aquí para pedirte disculpas —digo mirando sus ojos —no debí hablarte como lo hice Marcia, quiero que vuelvas a la casa —ella sonríe
—¿Para qué? —se encoge de hombros y frunzo el ceño —¿para seguir haciendo tu papel de madre?
—Kristin fuera más feliz si tú fueras su madre, eso lo sé —aunque duela lo admito —también sé que has sido mejor que yo en todos estos años, no medí mis palabras, tenía miedo, nadie puede saber que tengo una hija o correría peligro
—No voy a volver Ashly —bufo
—No lo estoy pidiendo por mi Marcia, mi hija te quiere
—Ya lo dijiste —ella se inclina un poco hacia mí —es tu hija Ashly, ¿por qué no olvidas tus deseos de venganza y te vas a vivir con ella?
—Marcia
—Yo perdí a mi bebé hace años y lo sabes —me señala —me recordaste que no soy madre y que no sé lo que sientes
—Me equivoqué —ella ríe —¿qué tengo que hacer para que me perdones?, Marcia no solo eres la mujer que más me ha ayudado en este mundo —tomo sus manos —eres mi mejor amiga, así te veo, como mi familia, mi hermana —sonrío
—Nuestros mundos siempre fueron diferentes —murmura soltando mis manos —Ashly, si fueras un poco agradecida verías el daño que le haces a Sergio estando a su lado —la miro confundida
—¿De qué hablas?
—Mi hermano está enamorado de ti, o eres tonta o ingenua si no te das cuenta —me tenso un poco
—Él nunca
—Él no quiere perder tu amistad, pero muere por ser algo más que tu amigo —Marcia sonríe —¿quieres que vuelva a la casa y te perdone? Invitalo a cenar —se pone de pie