Gema: no me puedo quedar. Mis padres están esperando a que llegue a casa y seguramente deben de estar preocupados por mí, porque todavía no lo hago.
Ella sale del cuarto y lo primero que hace es avisarle a una enfermera, ya que él había despertado y por último se dirige a donde están sus padres para darle la buena noticia.
Leticia: no puede puedo creer que mi hijo haya despertado. Eso solamente te lo debemos a ti, además no tenemos como agradecerte todo lo que hiciste por él.
Gema: no tienen por qué agradecerme. No hice absolutamente nada y fue un gusto poder conocerlos en este tiempo, pero debo de irme.
Leticia: no entendí nada de lo que me acabas de decir. Alguien me puede explicar lo que realmente está pasando y sobre todo me gustaría saberlo.
Pablo: esto es mi culpa. Mi esposa no sabe nada y yo se lo explicare más adelante, solo esperamos verte en otra ocasión más agradable.
Gema: no creo que eso sea posible, señor Mcgregor. Mi padre está molesto con la decisión que tomo Axel y usted lo conoce perfectamente bien.
Pablo: me lo puedo imaginar y más tratándose de su única hija. Ahora lo entiendo y yo hubiera hecho lo mismo si estuviera en su caso.
Gema: será mejor que me vaya. Debo de irme ante de que mi padre se presente en el hospital y en verdad espero que Axel se recupere completamente.
Ella se despide ellos y sale del hospital. Gema no sabía cuál sería su destino a partir del accidente, ella se sube a su auto, pero sintió el camino demasiado corto, ella se baja y cuando llega entra a su casa y sus padres la estaban esperando.
Benjamín: nos tenías realmente preocupados, hija. Además, ya te disté cuenta de la hora que es y sobre todo al fin estas con nosotros.
Gema: lo siento, no fue mi intención hacerlo. Estoy de regreso en casa y eso es lo que importa, ahora necesito contarles todo lo que paso.
Laura: no me digas que él está grave. Solamente que me imagino como deben de estar ellos, porque un hijo es lo más importante que tenemos como padres.
Gema: tenemos que tomar asiento primero para poder decírselos. No quise quedarme a oír noticias sobre él, porque ya no somos nada y eso no sería correcto.
Ellos se sientan en la sala y esperan a que Gema comience hablar, pero como padres entendían el sufrimiento que estaban sintiendo ellos.
Benjamín: ya estamos aquí, hija. Ahora nos puedes decir lo que paso cuando fuiste al hospital, será mejor que lo hagas y siempre vamos a estar para escucharte.
Gema: está bien. Precisamente cuando llegue al hospital su padre estaba en la sala de espera y me dijo que todavía no recuperaba la consciencia y que su madre estaba con él. Entonces tuve que esperar a que ella saliera para poder entrar a verlo y cuando lo hice se despertó. Nada más que lo único malo es que no me reconoció y sobre todo no recuerda nada.