Ella es mía (trilogía Trillizos, Libro #3)

Capítulo 25

Visita médica.

P.O.V. LANA COLTER. 

 

Chris se disculpa una vez más pero eso no para mi llanto. Yo había dejado mi rompecabezas en la mesa de noche armado y Chris tiró café sobre el, y desde que lo vi me puse a llorar, ni se si lloro por esto o por otra cosa pero estoy llorando.

—- Perdón, te compraré uno nuevo.

—- ¿De u-una ci-ciudad?

—- La que tu quieras —- pongo un puchero y él limpia mi rostro con un pañuelo.

Para más molestar cuando me desperté me puse a llorar sin razón alguna y Chris se levantó alarmado.

Nos quedamos dos días más en Inglaterra, Chris me llevó a muchos lugares y comí mucho. Y hoy es el día que regresamos.

—- ¿Mejor? —- pregunta con una sonrisa nerviosa y yo sólo asiento con la cabeza —- Bien. Ya será hora de irnos, también tengo que sacar una cita con un doctor para que te revise tu estado y el del bebé —- al decir lo último sonríe.

—- ¿Te emociona mucho tener un hijo? —- pregunto.

Sonríe — Claro que sí. Tengo pensado un futuro tu y yo, aunque el bebé se adelantó a mis planes —- rio.

—- ¿Cómo es ese futuro?

—- Bueno… para comenzar tú y yo…

—- Eso ya está hecho —- le digo con una sonrisa y él ríe.

—- Disfrutar un poco, además, quiero dos hijos, ya sean niños o niñas, o uno de cada uno.

Me acerco a él para poder abrazarlo, ya que él estaba arrodillado en el suelo cerca del sillón donde estoy yo. Recargo mi cabeza en su hombro y paso mi mano por la parte de atrás de su cabeza.

—- Yo nunca he planeado un futuro —- digo —- siempre era mi madre quien decidía todo, no sabía ni que estudiar. Creo que si no me hubieras seguido hasta aquel callejón yo estuviera casada con alguien.

Chris me aprieta más a él. 

—- No. Tu eres mia. Además yo te estaba buscando desde en la mañana antes del festival.

Me separó de él y lo miro confundida —- ¿Como?

—- Cuando llegue a la manada, me esperaba con la cena y yo comí rápido y me fui a la habitación, a la mañana siguiente Dick me dijo que saliera a caminar, algo muy raro de él pero le hice caso, camine sin sentido hasta que encontré tu aroma… una pequeña dosis y ya me estaba enloqueciendo —- besa mi mejilla que ya está roja —- Te busqué por todas lados pero no te encontré hasta en la noche.

—- ¿Pero en el festival no fue más difícil?

—- No, fue más fácil, porque ya sabía cómo era el aroma. Pero tú sólo saliste corriendo —- sonríe divertido.

—- No es como que alguien se acerca así a mi, yo corro, no algo que pase Todo a los días —- él ríe.

—- Pero mira, ya estás aquí conmigo esperando mi primer hijo y es la mejor sensación del mundo —- dice con orgullo y yo sonrió.

***

—- Baja ya del carro, Lana. El hospital no es nada malo —- dice nuevamente Chris.

Estamos enfrente del hospital y no he querido salir, estoy muy nerviosa. Ayer llegamos a la manada y Chris de inmediato hizo una cita para ver al bebé.

Suspiro y salgo del carro con las manos temblando, Chris me sonríe y yo sólo me sostengo con fuerza de su brazo y él no parece afectado por ello.

Él está muy emocionado creo que hasta más que yo, desde que lo supo anda con delicadeza a mi lado, cuando subimos las escaleras de la mansión me sostuvo hasta que llegue a la habitación, cuando fue la hora de dormir me puso una almohada al otro lado, donde no estaba él.

Suspiro y sólo sigo a Chris aún agarrada de su brazo, pasamos por unos pasillos y muchas personas nos sonríen. Al llegar estamos enfrente de una puerta color marrón con una placa que dice Dr. Díaz.

—- ¿Lista? —- pregunta.

—- S-si.

Él abre la puerta y ambos pasamos, la doctora que está detrás del escritorio levanta su cabeza y nos sonríe. Una mujer rubia y de nariz pequeña pero se nota mucho su sonrisa.

—- Buenos días Alpha y Luna, tome asiento por favor —- pide.

—- Hola —- saludó en voz baja, Chris y yo nos sentamos en las sillas frente a su escritorio.

—- Bueno, ya que este es su primer embarazo será difícil, yo les guiaré a cada paso, cualquier duda que tenga me la puede decir. Como es de sangre pura es muy probable que el bebé también lo sea. Le recetare unas vitaminas para su primer trimestre de embarazo.

—- ¿Es el primer embarazo de sangre pura que lleva? —- pregunto.

—- No, ya he llevado muchos, soy de confianza. ¿Cuánto tiempo lleva de embarazo?

—- No lo tengo muy claro.

—- No hay problemas, sólo te sacaré un poco de sangre?

—- ¿Es muy necesario? —- pregunta Chris.

—- Lamentablemente sí, alpha —- ella se levanta.

Me explica más o menos y se acerca a mi con la aguja, una aguja grande, de inmediato tomó el brazo de Chris con fuerza que incluso le clavó las uñas.  La doctora termina y yo estoy a nada de llorar, esto sólo me trae recuerdos, recuerdos muy malos.

Ya me quiero ir.

La doctora sale de la sala y Chris se acerca más a mi para abrazarme y no puedo más, lloro.

—- Lo hiciste bien y no hay que nada que temer —- deja un beso en mi cabeza.

—- Es… es que —- digo entre el llanto.

—- Todo está bien, créeme que si hay otra manera la hubiera elegido. Ya debes de tener por eso, mi omega.

Sólo asiento con la cabeza y me limpió el rostro, seguros después la doctora regresa a la sala, Chris sólo se separa un poco de mí. 

—- Les dejaré la cita para dentro de dos semanas, ahora, el embarazo de un sangre pura puede llegar a ser más complicado, por decirlo así. Tiene más apetito y cansancio, por ser una omega debes de reposar mucho, te recomiendo comer muchas frutas y verduras. ¿De acuerdo? —- asiento con la cabeza —- Bien, estas son las vitaminas y detrás de dos semanas veremos a tu bebé.

—- Gracias —- agradece Chris mientras toma las vitaminas.

Ambos nos despedimos y sólo tomó la mano de Chris para salir del hospital, al llegar al carro, no se por que pero me pongo a llorar y mi alpha parece asustado por esto.




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