Epílogo (Parte dos)

Mi final feliz. 

P.O.V. LANA COLTER.

—- ¡Son tan hermosos! —- dice Joseline que carga a Alexa.

Layla y Ethan tiene el mismo color de cabello como el mio, rubio. En cambio, Alexa es pelinegra como Chris. Los tres tienen ojos de color negro.

Layla es quien se parece mas a Chris, en cambio, Alexa y Ethan son la combinación perfecta de los dos, ellos si parece gemelos, Layla es la unica que tiene rasgo difetente a ellos y es la ultima.

—- Son Scott, obvio que lo son —- dice Nethan y Joseline rueda los ojos.

—- ¿Y cómo se llaman? —- pregunta ella.

Mire a Chris que esta a mi lado y asiento con la cabeza para que él lo diga.

—- Él se llama Ethan —- de inmediato Nethan deja de mirar a mi hijo para ver a Chris —- Ellas se llaman Alexa y Layla.

—- ¿Alexa…?

—- Alexandra, pero a mamá no me gustaba su nombre, asi es Alexa.

Nethan sonrie y vuelve a ver a sus sobrinos —- Sin duda ellos estaria locos por sus nietos.

En lo que queda de la mañana ellos se quedan conmigo pero al medidia deben irse ya que Nethan se esta haciendo cargo de las cosas de la manada para que Chris la pasara conmigo.

Nosotros estamos por salir del hospital, ya nos dieron el alta. Chris dijo que no se separará de nosotros a no ser que surja un problema que requiera de su atención con urgencia

—- Te traje algo —- me dice Chris cuando ve que me iba a levantar de la camilla. 

—- ¿Que cosa? —- pregunto curiosa miemtras sigo sentada en la orrilla de la camilla.

Él deja caer al suelo un par de pantuflas peludas de unicornio, dejo salir un pqueño grito emocionada, bajo de la camilla y me las pongo.

—- Cuando empezabamos a conocernos me dijiste que te gusta los uniconios y la semana pasada vi estan pantuflas, sin duda alguna tuve que comprar para ti —- sonrio feliz y lo abrazó con fuerza mientra él rie.

—- Desde ya te digo que no me las quitare nunca —- él vuelve a reir.

—- Entonces hay que comprarle a nuestros hijos también —- paso mi manos por su cuello y hago que quede a mi altura para besarlo.

—- Debes irnos —- dice pero no se aparta, soy yo quien lo empuja un poco y río —- ¿Y mi beso de gracias? —- reclama y yo río.

Estira su brazo y vuelve a tomar de la cintura, mis mejillas se tornan rojas y Chris sonríe. Siempre tendrá ese efecto en mí y dudo que le moleste porque sonríe cada vez que pasa.

***

Dejo a Ethan en la cuna que está a lado de la cama, le dije a Chris que al menos por los primero meses que duerman con nosotros, no quiero que le pase algo y yo no poder oirlos.

He hecho mi propia promesa en silencio, yo no critare a mis hijos, sere lo mejor que pueda para ellos pero no hare que tengas inseguridades y se que Chris hara de todo por ellos tambien, aun que él si tiene un ckaro ejemplo de como ser un buen padre.

—- Por favor tarden en crecer —- digo mientras me alejo de las cunas y me siento en la cama.

La puerta se abre cuando estaba por comenzar a leer nuevamente. 

—- Se durmieron —- le cuento y él se acerca a ellos —- pense que seria dificil pero son tan traquilos.

—- Bueno… si tú me despertabas a la una de la madrugada por fruta…

—- Oye, eso no es mi culpa.

Él ríe y se acuesta a mi lado, escondiendo su rostro entre mi pierna y el colchón. Paso mi mano entre su cabello.

—- Extraño ver mi vientre grande —- él ríe. 

—- Bueno, amor, la última semana me dijiste que te sentías como una vaca.

—- Y tú dijiste que era una vaca bonita y eso no se le dice a una embarazada —- él ríe y se acomoda mejor en la cama, quedando acostado y con una mano bajo su cabeza.

—- Pero te di chocolates. Eso cuenta mucho —- rio.

***

Siento entre mis piernas a Layla, ella mueve el juguete de un lado a otro con una sonrisa grande, mientras que Ethan y Alexa miran fijamente las muecas que les hace Chris.

A pasado un mes, Chris volvió a su puesto solo que siempre buscan la manera para pasar el fin de semana con nosotros. Nethan se fue hace unos días.

Chris ayuda a levantar a Alexa mientras que Ethan se entretiene con su oso de peluche.

—- Oh, vamos, cariño, quiero que comience a caminar.

—- Todavía es temprano para eso, Chris.

—- Pero lo harán pronto.

Ruedo los ojos y él sólo ríe mientras deja un beso en la mejilla de Alexa. Ethan mueve su peluche para buscar atención y mira seriamente a Chris.

—- Oh, mi niño —- deja sentada entre sus piernas a Alexa y toma a Ethan que ahora ya sonríe.

Alexa no tarda en gatear hasta donde Layla y ambas se ponen a jugar entre ellas.

Chris para poner más feliz a nuestro hijo comienza a besarle todo el rostro y Ethan no deja de reír y poner su pequeñas manos en el rostro de su padre.

¿Quién lo diría? Después de años de vivir encerrada con mi madre, vivir en una mentira y todo cambió cuando conocí a Chris, cuándo choque con él.

Tuve miedo al principio pero ahora no me arrepiento de nada. Por él tengo muchas cosas. Chris me dio lo que tanto me hacía falta en mi vida, me hizo confiar y amarlo. Gracias a ello ahora tenemos tres hijos.

Por fin soy feliz.