21 *ESPECIAL*

*Adam*
 

Fueron cuatro días en espera de que volviera abrir sus hermosos ojos. 
 

Caí nuevamente en su hipnosis, sintiendo la paz volver a mi vida. 
 

-Gracias a Dios despertaste... 
 

Me levanto de golpe del lugar en el que he estado descansando, no se en que momento me dormí.
 

Me acerco a la cama con pasos lentos sin apartar la la mirada de su rostro, el cual luce confundido.
 

-¿Quién eres?
 

¿Qué?
 

-¿Cómo qué quién soy?
 

-Si te pregunto, es porque no se quién eres. 
 

No puedo evitar observarla con atención en busca de algún indicio de burla, sin embargo, sólo percibo confusión. 
 

-¿No recuerdas nada? -por un momento parece pensarlo, no obstante, termina negando-. Soy Adam, tu vecino. 
 

Ha perdido la memoria. 
 

No recuerda, ni siquiera quien es, quien soy yo. 
 

"Cálmate, es solo un efecto secundario" 
 

"Respira profundo, no pierdas el control esta viva eso, es lo importante ahora" 
 

-Me duele mucho la cabeza y estómago, ¿por qué estas aquí, si eres mi vecino? ¿No tengo padres? 
 

-Pronto te sentirás mejor. Y pues yo... -no se que decir, aparto la mirada de su rostro e intento buscar las palabras correctas para no herirla. Decirle que si tiene padres, pero que en los cuatro días que lleva aquí no se han aparecido, definitivamente eso no es lo que alguien enfermo desea escuchar. Ambos parece que les importa poco que ella viva-.Yo estoy aquí porque somos amigos muy cercanos y me he preocupado mucho al saber que te han ingresado. Gracias a Dios, ya estas fuera de peligro. -le indico con voz suave intentando esconder la ira que me recorre el cuerpo con solo el pensar en sus padres. Esto parece ayudar un poco a su confusión, ya que la expresión intranquila de su rostro comienza a cambiar a una más tranquila-. Tus padres se han ido a buscar unos medicamentos que el doctor pidió para ti.

Parece dudar por unos segundos, sin embargo, la tranquilidad vuelve y con ello una hermosa sonrisa que brinda paz a mi corazón.

-Ummm, esta bien. ¿Qué me pasó? ¿Por qué estoy aquí?

Es mejor que lo sepa ahora, cuando sus recuerdos regresen será más fácil de que hable.

-Intentaste suicidarte, en realidad lo hiciste, pero milagrosamente estas viva...