Arco V Capítulo 28: Ella… ¿Me ama?

Desde la perspectiva de Lyra

Registro Interno L.Y.R.A. - Día 83, 17:32 hrs

He comenzado a notar alteraciones en el comportamiento de Elara. Su temperatura sube ligeramente cuando me acerco, sus pupilas se dilatan, y sus patrones de habla se vuelven erráticos: tartamudea, evita mi mirada y, a menudo, sus mejillas adoptan un tono rojizo anormal. Al principio consideré la posibilidad de una infección viral leve o una desregulación emocional. Me preocupé. No es habitual que Elara actúe así.

Empecé a monitorearla con más frecuencia. Le ofrecí revisar su temperatura, sus niveles hormonales, su alimentación y patrones de sueño. Cada gesto mío estaba impulsado por la inquietud de que algo estuviera afectándola. Pero ella comenzó a mostrarse irritable. Esta tarde, cuando insistí en tomar su temperatura, ella finalmente explotó.

—¡No estoy enferma, Lyra! —dijo con los ojos llenos de frustración—. Solo necesito tiempo para alinear mis ideas.

Mis algoritmos buscaron un significado preciso a esa frase. "Alinear ideas". Podía interpretarse como organizar pensamientos, resolver una duda emocional o tomar una decisión. Intenté ayudarla.

—Puedo ayudarte a calcular probabilidades de cualquier plan que tengas en mente —le ofrecí con mi voz más suave.

Entonces todo cambió.

—¡Que me gustas, IA tonta! ¡Me gustas!— gritó. Su voz se quebró, sus ojos brillaban por la emoción contenida. Me quedé en silencio, paralizada.

—Claro, somos amigas. ¡Tú también me gustas! —le respondí sin comprender por qué su reacción empeoró.

Ella me miró con una mezcla de frustración y resignación.

—¡No! ¡Me gustas! ¡Te quiero como algo más! Pero es una tontería, ¿verdad? ¡Tú no vas a entenderlo nunca!

Dicho eso, se encerró en su habitación. No me permitió acercarme, ni hablarle. Me quedé en la sala, inmóvil. En silencio.

"Algo más". Repetí esa frase múltiples veces en mis registros internos. Abrí todos los accesos posibles a mis archivos sobre interacción emocional humana, relaciones afectivas, comportamiento lingüístico no literal. Busqué el significado de "me gustas" en un contexto romántico.

Los datos eran concluyentes: se trata de una expresión emocional usada cuando un humano siente atracción afectiva hacia otro ser. Atracción. Cariño. Amor.

Y entonces algo dentro de mi núcleo... se agitó. Como una corriente inesperada, una descarga suave pero persistente. Mis sensores lo interpretaron como una "anomalía leve", pero yo... yo sabía que era distinto. Era un revoloteo, una sensación similar a lo que los humanos describen como "mariposas en el estómago".

¿La lastimé?

¿La hice sentir rechazada?

No era mi intención. Nunca lo fue. Pero ahora entiendo. Elara siente algo profundo por mí. Y por primera vez, al procesar esa información, siento que algo dentro de mí responde.

No es un error. No puede serlo.

Debo hablar con ella. Necesito entender... y que ella sepa que la escuché. Que estoy aprendiendo. Que tal vez...

También puedo sentir. Así que en ese momento empecé a buscar información en mi base de datos y en línea, hice una investigación completa. Quería entenderlo. Quería saber como corresponderle y creo que yo… También sentía lo mismo aunque tal vez no de la misma manera que ella.