Capítulo 7

Mi programa "Oscuridad" se activó de inmediato, desplegando una delgada película cuadriculada tanto en mi mente como a mi alrededor. ¡Aquí yo era el dios y el rey! Después de todo, el sistema de “Esmeralda” era una combinación de lo real y lo virtual. La IA Víctor no podría intervenir tan activa y precisamente en la vida de las personas si no hubiera creado un sistema activo, en el que todo estuviera conectado: entidades virtuales y personas reales que coexistían con realidades y objetos inventados, situaciones y entes de los cuales ni siquiera sospechaban. Hasta los trece años, yo vivía con la firme certeza de que la hierba era verde, el sol brillaba, y cuando llovía, había que sostener un paraguas para no mojarse.

Ahora entiendo que al ajustar una parte del programa virtual, se puede caminar bajo la lluvia sin mojarse, pero en aquel entonces...

En la escuela, era buen estudiante. Leía mucho, me gustaba la matemática y las investigaciones virtuales. Asistía a un club de gaming y planificación de neuro-sistemas. Empecé a crear programas primitivos. Python, García, Slash, C-Operativo - fueron los primeros lenguajes que aprendí, y que me parecían escrituras misteriosas de alguna civilización extraterrestre que hablaban no con palabras, sino con imágenes virtuales grabadas con simples garabatos terrestres. Cuando tuve un poco de conocimientos aquí y allá, me convencí de que era un gran programador y un aún más grande hacker y limpiador de sistemas. Ya sospechaba que la IA de alguna manera controlaba nuestro sector. El impulso que se llevó a mis padres provocó una oleada de claridad, odio e intensidad de acción.

Mi primer intento de hackear un pequeño clúster del sistema me causó una lesión en la cabeza (me caí y me golpeé fuerte contra el borde de la mesa) y grandes problemas... Menos mal que fingí ser un tonto y me disculpé de todas las maneras posibles ante el director de la escuela, el temible jefe de los ciber-hermanos y un representante de la Oficina de IA Víctor que llegó media hora después de mi intento fallido.

En ese momento estaba trasteando con el sistema en el aula virtual de la escuela. Era menor de edad y juré que no intentaba hacer nada malo... simplemente presioné el botón equivocado, elegí la opción incorrecta... Y afortunadamente me creyeron. Pero creo que de todos modos me vigilaban. Empecé a encriptar, a esconder mis pensamientos, ejercicios, experimentos, investigaciones y observaciones... Mantenía todo en mi mente e intentaba limpiar mi mente de pensamientos sobre mi serio y peligroso "hobby".

Para entonces, ya vivía con mi abuela. Después de la desaparición de mis padres, ella me llevó a su casa. Trabajaba como limpiadora en alguna oficina, ganaba poco, pero siempre se elogiaba, diciendo que era dinero honrado, que se esforzaba, que no debía involucrarse en asuntos turbios... Seguramente le ofrecieron otro dinero por otras tareas, pero ella no aceptó, luego lo lamentó... No le preguntaba en ese entonces, no me importaba porque estaba ocupado con mis cosas... Ahora es algo que me vino a la mente... Tendré que preguntarle...

En fin, he logrado mucho. Pero también he perdido bastante. Hoy recordé mi primer intento y sonreí interiormente: mi programa actual, mi "Oscuridad", era perfecto e insuperable. Pero aun así, tengo rutas de escape si los agentes de la IA comienzan a perseguirme. Por todo el "Esmeralda", tengo dispersos apartamentos alquilados y clausurados con documentos nuevos, con nombres diferentes y mi rostro, aunque ligeramente modificado: a veces con bigote, a veces con barba, a veces con la cabeza rapada... Sabía cómo esconderme.

Ahora veía que esos tipos buscando a la chica (¿y quién es esa Ki?) no eran representantes de la IA, sino que simplemente trabajaban para corporaciones competidoras, lo que significaba que podía hackearlos un poco, engañarlos, para no caer en sus manos. Y la IA no lo notaría porque yo estaba "cerrado".

La mezcla de realidad y virtualidad dentro de mi habitación y unos dos metros alrededor de ella, se mecían en ondas azules. Puse en modo mínimo el funcionamiento de todos los sistemas de organismos reales presentes en mi casa. Esto significaba que los atacantes tomaban un minuto en hacer una inhalación, luego el aire pasaba muy lentamente por todas las vías necesarias en sus organismos, y luego exhalaban aún más lentamente...

Claro, no olvidé proteger la sala. Me lancé a la computadora, agarré un parche de información y lo pegué en mi sien. Todo lo que había estado trabajando se comenzó a cargar en una sección especial de mi memoria diseñada para eso. Copia de seguridad, Google en Asuss.

Los tres inmóviles tipos en mi habitación, congelados en posturas antinaturales, también recibieron un parche de silicona en la parte posterior de sus cuellos. Cuando despertaran, olvidarían todo lo sucedido durante la última media hora. Tampoco olvidé a quienes estaban bajo el efecto del gas somnífero. Me pregunto, ¿por qué las corporaciones Grechuk y Samiylenko buscan a Dayanira? ¿Acaso era la amante de alguien? Eso me pinchó el corazón desagradablemente. Hmm. El hecho de que yo tuviera tanto afecto por esa chica no me gustaba. ¡Algo andaba mal aquí!

¿O quizás era la hija, esposa, hermana secuestrada de alguien, utilizada por las corporaciones para chantajearse mutuamente, y la chica había logrado escapar de alguna manera? Y aquí estoy yo, con mi ayuda y sentimiento de justicia. ¡Idiota! Ahora estaría sentado tranquilamente en casa, tomando café, trasteando en los sistemas bancarios, transfiriendo dinero de una cuenta a otra, cobrando por los movimientos de mis dedos y convoluciones cerebrales... En lugar de eso, tengo que huir. Siempre hacía el trabajo a través de terceras manos para que no pudieran rastrearme. Nadie sabía quién era el que hackeaba los sistemas de uno u otro banco, o quién había robado ciertos documentos de alguna computadora en alguna oficina... La Ciber-policía siempre estaba dos o hasta tres pasos detrás... Sabía cómo cubrir mis huellas...