¿Significaria algo? Claro que sí. Pero las palabras no serían suficientes para dejarlo claro, la única respuesta la tienen nuestros propios labios, ambos lo sabemos y de una forma lo deseamos.
La única verdad es que todos estos días me enamoraba más, incluso cuando un chico más apareció en mi vida, en mi mente siempre está Kendall.
—¿Realmente quieres saber si tendría significado?
«Obtén tu respuesta»
Sería, una respuesta clara, silenciosa pero preciada, un instante corto pero eterno.
No cabe ninguna duda, después de posar mis labios encima de los suyos, sentir ese impacto que conlleva el choque de su piel con la mía,sentir su respiración y el sabor dulce y adictivo de sus labios, confirme que él «Kendall» siempre fue el inicio de mi caos, uno hermoso. Porque aunque ahora me falte aire este es un momento único, aun así todo tiene un final. Yo misma me aleje de él, lo observé tímida incluso sonrojada, Kendall aun esta confundido y yo estoy a punto de creer que puedo morir de un infarto. —Kendall, Me gustas. Lo dijo por si aún no te queda claro.
Quizá es la confecion más tonta, pero solo eso fue suficiente para que le devolviera las palabras «También me gustas»
Un acto para sanar un corazón, no, en realidad dos.
—Emmy, no sabes cuanto espere este momento.
Kendall se acerco nuevamente a Emmy, esta vez para abrazarla y nunca dejarla ir.
—No eres el único
. «Correspondi el abrazo» Uno que era muy cálido.
—Pero no olvides que aún me debes una explicación.
—¡Ja, ja! Tenías que ser tú, ojos de gato.
¿Que pasó después? Bueno en realidad no había tanto que contarle, solo el pequeño gran malentendido. Lo importante esque ahora estamos juntos, por fin.
Para mi Kendall siempre ha sido una excelente persona. Si, nos peleamos una infinidad de veces en el pasado, ¿Que si hubo celos? Sí, muchas veces, me enoje, llore, pero también me reí gracias a él. Sin duda alguna nuestra relación de ahora en adelante será una gran aventura.
...
Claro aún sigo trabajando para Kered, pero solo es la relación de empleada y jefe. Por supuesto no faltan los mensajes de Kendall durante el trabajo y aun él cree que no sé que me espía de vez en cuándo.
Lo dejo pasar porque se me hace un acto muy tierno.
—Emmy, Emmy... Eso de sentir que eres rechazado no es algo desconocido para mí ¿Pero de ti? Sabes eso duele un poco más.
—Deja de quejarte, sabes que no era amor.
—Tu que sabes.
—Se que eres un hombre caprichoso, y eso lo dice todo.
—¿Caprichoso?
«Sigue creyendo lo que quieras» Pero esta vez estoy seguro que ella no era un capricho. Por primera vez algo es inalcanzable para mi, porque el amor debe ser mutuo. Ella es el «ojalá» de mi vida.
Ahora hago cosas para ella, no es para que me amé, es para que ella amé. Porqué cuando valoras alguien dejas que este en su lugar seguro y quieres que sea feliz.
—Bien, Señor Daft, con todo respeto le entrego esta presente. «Extendí mis manos»
—¿Qué es? ¿Una carta de amor?
«Le di una sonrisa ladina»
—¡Ja! Solo acepta mi renuncia.
—Aceptó tu matrimonio con Wals. Pero ¿Renuncia?
—Por favor, seré una mujer casada. Ya no necesito ganarme la vida.
—Claro que nesecitaras dinero, porque le reducire el salario a tu esposo.
«Pronuncio Kered serio» Después de todo me quito a mi único amor.
—Me queda más claro, la renuncia es lo mejor. «Le di una sonrisa fingida y burlona» Kered solo no llegues tarde a la boda.
Una vez dije las palabras anteriores salí de aquella oficina, feliz. Porque un nuevo lienzo estaba por comenzar.
—¡VOY A PERDER LOS ANILLOS DE BODA!
Si claro, si lo hace yo misma lo mato. Incluso es bromista en estos momentos, la verdad fuera de juego lo creo capaz de hacerlo. Kered sigue siendo inmaduro pero es una buena persona, lo es.
…
En la vida conocerás a muchas personas, pero solo hay una que le dará verdadero sentido. «Eso es la magia de conectar y la suerte de coincidir»
Encontré unos hermosos ojos de gato.
—Emmy, solo que voy a amarte. Mi corazón ya te elegió.
—Kendall, te amo y aunque pasemos momentos difíciles prometo amarte aun más.
Porque en este mundo todos deseamos un amor sempiterno, uno que tiene un inicio pero nunca un final.