Después que salí del baño, Roderick vino a mi diciéndome que aceptaba que yo lo adoptará. Me quede pasmada, que bicho le habrá picado. Pero no le pregunté, lo que hice fue abrazarlo dándome cuenta que él no había correspondido mi abrazo, en su lugar tenía su mirada puesta en Rodrigo.
Después de haber dejado a Roderick en el orfanato, y diciéndole a la directora que pusiera en marcha los papeles para que él se venga conmigo. Le sugerí a Rodrigo comprarle cosas que el talvez necesité. No le gustó la idea. Se negó y prácticamente se fue corriendo a penas se lo dije.
Me extrañe muchísimo. Rodrigo jamás se había negado y ha estado actuando extraño desde que salimos de la cafetería.
Llego a casa y subo a la habitación dónde Roderick se quedará. Es muy bonita. Si no le llega a gustar dejare que la cambie a su gusto.
Mientras recojo lo que estaba desordenado y tirado por la habitación oigo mi teléfono sonar, camino hacia la sala y miró quien es.
Victoria.
Mi hermana
Contesto la llamada.
—Hola
—Hola hermanita, ¿Cómo te fue en él almuerzo con el niño?
—De maravilla, al final aceptó, creí que tendría que usar la fuerza bruta.
—Vaya, te felicito Ángela —rio— ya sabes si necesitas ayuda para cuidarlo, puedes contar conmigo.
—Lo sé Victoria. Gracias por eso.
Nos despedimos y colgamos. Ahora que lo pienso es todo merece una celebración. Como una bienvenida a Roderick. Sonriendo marcó al número de mi secretaria.
—¿Hola?
—Hola Linda. Haré una fiesta el viernes la cual será la bienvenida de Roderick. Quiero pedirte un favor, llama a los organizados de fiestas y diles que ellos se encarguen.
—No te preocupes, yo me encargo. El viernes estará todo listo.
—Gracias Linda. —Cuelgo la llamada.
Jueves, 5 de julio de 2018
Había estado pensando en los últimos cinco días si lo que estaba haciendo era lo correcto, claro está que ya no podía retractarme, los papeles ya estaban listos. Solo faltaba la firma mía y la de Roderick para poner todo en marcha. Y hoy era el día.
Seré madre primeriza por lo que tengo que darme lo mejor de mí, para que Roderick se sienta a gusto conmigo y pueda confiar en mí, que me vea como una madre y también como una amiga.
Aparqué mi coche en un lugar justo en frente de la entrada del Orfanato Electrico SI. Apagué el motor y salí del coche, cerré la puerta detrás de mí. Tan pronto como crucé la puerta, la directora me estaba esperando.
—¡Qué gusto verla aquí Srta. Rivera! Sígame por favor —la señora emprendió camino para su oficina, la seguí —No sabe lo contenta que me puse cuando Roderick me dijo que aceptaba irse con usted.
Toma asiento y me hace una seña para que también lo haga.
—Al parecer está todo en orden —le sonreí a la mujer—. Una vez que Roderick se instale en su casa, hablaremos con él para ver como lo está llevando —me miró—. Es usted una persona con un expediente intachable Srta. Rivera. No tengo ninguna duda que Roderick encontrará en usted la mamá que el necesita.
—Perfecto —susurre cuando la puerta fue abierta.
Por ella entro Roderick el cual me dedico una pequeña sonrisa. Se sentó a lado mío y tanto como la directora y yo lo miramos.
—Ummm ¿buenos días?
—Buenos días Roderick, ya tengo todo preparado. Solo necesito las firmas de los dos y así procederemos con el resto. Roderick podrá irse con usted Srta. Rivera.
—Sí —lo escuche reírse nervioso—. Todo saldrá perfecto.
—¿Y eso? —alce mis cejas.
—No es nada, solo que me acostumbre a estar aquí. Además, extrañare ver a los demás niños.
—No te preocupes Roderick estoy segura de que en la casa de Ángela serás bien atendido. —Fruncí el ceño por lo que dijo— Y los demás niños seguro encontrarán pronto alguien, así como lo has hecho tú.
Después que ambos hayamos firmado los papeles la directora nos ofreció que tengamos un excelente día. Espere que Roderick se despidiera de sus amigos, prometiéndoles que los iba a visitar. Sin duda no dejare que vuelva a este lugar.
Salimos del edificio en silencio. Mientras nos acercábamos a mi coche, le di una rápida pasada a Roderick dándome cuenta que solo llevaba su ropa, no traía nada más. Supongo que sus padres no tuvieron la molestia de dejarle algo para que los recordara cuando era un bebe. Mejor para mí. Así no tendré problemas con Roderick de querer conocer a sus padres, aunque no hemos hablado de eso me gustaría saber si alguna vez tuvo curiosidad por saber quiénes eran sus padres o si se puso a investigarlos.
—Sabes una vez vi una película en donde un hombre multimillonario tenía su chofer profesional, así que eso pensé que tenías, pero debo decirte que me sorprendí que manejaras tú mismo.
El problema de Roderick era que tenía una mala imagen sobre las personas millonarias, está claro que algunas pueden abusar del dinero que tienen, pero yo no soy así. Luche mucho por tener todo lo que tengo, puede que a veces si me pasa gastando mi dinero a lo loca pero también tengo guardado por alguna emergencia. Así que le mostrare a Roderick que la imagen que tiene sobre mi cambie.