Mi cuerpo se encontraba tirado en el cesper verde y puntiagudo, mirando asi, el cielo azul repleto de nubes gigantescas, trayendo a mi memoria todas las lagrimas que habian sobresalido de mis ojos, aquellos momentos en donde aprendi a vivir sin un padre a mi lado, lo cual fue un verdadero reto para mi, sintiendome tan vacia e infeliz y con ganas de agotar mi existencia, toda mi vida fue llena de dolor y completa soledad, ademas, meditaba en aquellos momento en donde apreciaba de todo corazon un individuo con quien reir y pasar el rato, sin embargo, todo este plazo de tiempo estuve condenada a vivir EN FRENTE DE UNA VIDA SOLITARIA. Mis pensamientos fueron interrumpidos por una muchacha de pelo rubio.
¡hola tu debes ser Hadasa! tu madre te espera en la sala de estar
la mire con cara de confundida y sin responder palabras obedeci su voz, al llegar al dicho lugar, observe a mi madre junto con mi tio Hilton, el cual era un poco mandon y testarudo aveces, mi madre Hildegart extendio su brazo invitandome a sentarme en el comedor, por lo que, la voz del silencio reino en ese momento,sin embargo, ashley la sirvienta fue la responsabe en exterminar con aquel silencio.
El aperitivo esta listo dijo colocando los platos en la mesa, al salir ashley de la sala de estar el silencio tomo posicion nuevamente del salon, asique, no mucho despues me levante de la mesa y camine en direccion a mi cuarto, me acomode encima de mi cama respire onde, mire a mi alrededor y justo ahi, se encontraba mi hermana la soledad, aquella hermaba que me vio crecer en todas las etapas de mi adsurda vida, tome mi amado violin, iniciando asi, una triste melodia que iba perfectamente con mi persona, cerre lentamente mis ojos,por lo que, al abrirlos se encontraba presente la extraña chica de pelo rubio,¿que hace esta chica aqui?dije para mis adentro,por lo que, al teminar de tocar, ella muy amable inundo mi habitacion con una lluvia de aplausos.
¿oye te perdiste de direccion? pregunte
no, claro que no, dijo con voz de inocencia
¿ y que quieres?
es que, me caes bien, acercandose a mi,
¿ y quien rayos eres que te caigo bien? dije levantandome de la cama
soy Amelia hija de ashley la sirvienta
oye, no le caigo bien a nadie, ni siquiera a tu madre, cruzando mis brazos
bueno a mi si, y me encantaria hacer un coro sano contigo,
Amelia era de mi misma estatura, solo que un poco mas divertida y juvenil,
¡mira, solo no te enojes cuando me ria de la malda!
creo que nos llevaremos muy bien.