por cierto Hadasa, ¡adoro tu estilo!, añadio
asenti, con una sonrisa en mi rostro,
Amelia tomo mi brazo mirandolo muy fijamente
¿dime, que expresa ese tatuaje tan extraño?
soledad, tristeza, dolor, amargura, asi es mi vida Amelia, dije sentandome en el borde de la cama,
¡y yo que pensaba que todos los ricos eran felices!
incline mi vista hacia abajo, surgiendo las palabras lentamente,- las posesiones no han podido llenar el vacio que existe en lo mas profundo de mi alma,
Amelia se acomodo a mi lado,
conozco a alguien semejante a ti, su nombre es melquisedec encantador aunque callado, sus lomos estan cansados de arrastrar la inutil vida de su pasado, no es rico como tu, pero es una buena pesona,
¡valla, me gustaria conocerlo! dije
hay una fiesta mañana por la noche, probablemente podras conocerlo alli,
¡pero como ire, mi madre no me permitiran salir! grite
simple ¡escapate!
oye, no eres tan dulce como aparentas, empiezas a caerme bien
Amelia salto de la risa, sin embargo, poco despues su presencia se alejo de mi habitacion, dejandome sola con mis pensamientos, lance una mirada rapida al reloj el cual marcaba 4:50 PM me relaje en mi cama, mire fijamente el techo de mi cuarto, cerre lentamente mis ojos, cayendo asi, en un sueño profundo.
6:00 AM mis ojos se abrieron muy despacio, me sente en mi lecho mi mano derecha fue hacia mi cabeza permaneciendo asi durante varios minutos, no mucho despues, ashley se acerco a mi recamara junto con mi desayuno, panqueques con una cubierta de miel acompañado de un jugo de naranja,al terminar me asome a mi balcon respire ondo he inmediatamente miles de preguntas innundaron mis pensamientos.
¿que se sentiria estar fuera de estas 4 paredes? la verdad , es que toda mi vida he estado atrapada bajo estos muros,desafortunadamente, nunca tuve la oportunidad de asistir a una fiesta o algo por el estilo, mire firmemente hacia la distancia,visualice por un momento la musica,personas, la adrenalina.
Esta noche me espera una fiesta dije para mis adentro
mi cabeza fue vuelta a la realidad tras un toque en la puerta
- señorita Hadasa, Isabelle la espera afuera, dijo Frederic el mayordomo, cerre la puerta de golpe, haciendo un gesto raro en mi rostro, me dirigi hacia mi armario y tome lo primero que encontre,
una sudadera blanca, unos pantalones negros ajustados, acompañados de un par de botines del mismo color, para completar mi atuendo coloque un collar de puas en mi cuello.
camine lentamente por el pasillo que conectaba mi habitacion, mis manos estaban puestas en los bolcillos de la sudadera y mi cabeza se encontraba flotando en el aire, al llegar a mi destino desplegue la puerta muy despacio.
Buenos dias Hadasa, toma asiento, contesto Isabelle
hola Isabelle, respondi con voz fria y antipatica
el tema de hoy es el ciclo de vida de un sistema,
Isabelle era catalogada como la maestra por excelencia, por tal motivo, mi familia le rentaba 70,000 mil dolares al mes por proporcionarme contenidos universitarios durante 4 años.
¡Isabelle si tan solo te callaras por un momento seria un exito! dije para mis adentro mientras aclaraba el tema,
señorita Hadasa ¿esta usted entendiendo el tema?
si claro- menti
3 horas mas tarde, odserve como la señora Isabelle abandonaba el salon, sus pasos eran perturbadores al igual que su persona, su mirada recta y seductora me ocasionaban calofrios
un fuerte viento provoco que mi vista se enfocara en la ventana, asique, me asome a ella, mi mirada se dirigio hacia el jardinero Matias, un chico apuesto joven, aunque no de mi tipo.
una suave y calurosa mano arropo mi hombro
- hola linda, dijo mi tio Hilton
hola tio, asenti
Hadasa quiero que relajes mi dia con el sonido de tu violin
¡lo que me faltaba! dije para mis adentro
El sonido del silencio retumbaba en los rincones de la sala, la cual se encontraba oscura y calidad,
Hilton se acomodo en uno de los muebles, luego arregosto su cabeza cerrando sus ojos lentamente, mi presencia se hallaba en frente de su persona, la suave melodia de mi violin inundo agilmente la sala repleta de silencio, no mucho despues, Hilton se quedo profundamente dormido, asi que, rapidamente abandone el lugar en donde me encontraba, me detuve en medio del cesped verdey puntiagudo mi cabello se movia al ritmo del viento mire a mi alrededor y me hallaba colmada de soledad deje que mi cuerpo tocara el prado sintiendome cansada de lo que mis ojos veian.