Esa noche, el Detective Hamilton fué a la casa de Camilo, primero tocó la puerta por si había alguien, la puerta estaba semi cerrada, entró lentamente mirando por todos lados, subió por las escaleras hacia arriba pasando por el pasillo yendo hacia la habitación de José y el Padre. Al acercarse un poco más, vé todas las cosas tiradas tal y como le contó José durante la interrogación varios minutos antes, al ver eso se acordó de que José le había dicho que el cuerpo del Padre había quedado en la habitación de Kristeena.
Rápidamente caminó hacia esa habitación y entró, al entrar la luz estaba apagada, no se veía casi nada, de repente la prende y vé el cuerpo del Padre en la cama todo ensangrentado. Se sorprende un poco, sale de ese lugar rápidamente mientras empezaba a llamar a sus compañeros de trabajo para que vinieran a cubrir la escena del Crimen.
Al salir de ese lugar fué directamente hacia la casa de los Khan, treinta minutos después llega a dicha casa. Se acerca con su arma reglamentaria en manos, la puerta también estaba abierta, entró lentamente apuntando por todos lados, las luces estaban prendidas.
Se acercó hacia la habitación de la izquierda, abrió la puerta de ese lugar, se veía todo oscuro, prendió la luz y vió los dos cuerpos en el piso que eran el del hermano y el Primo de Kristeena. Al ver eso, salió de esa habitación y subió por las escaleras hacia arriba, al subir se encuentra con el cuerpo de la mamá de Kristeena, se le acerca lentamente y se agacha a mirar un rato el cuerpo.
Al día siguiente, lo despiertan a José a las seis y cuarto de la mañana, lo llevan otra vez hacia la habitación de interrogación, y luego de esperar varios minutos entra el detective Hamilton a hablar con él. Tenía los ojos cansados, algo de ojeras con un vaso de café en la mano izquierda, primero se sentó, pensó y le contó...
-Anoche.. luego de que los interrogara a ustedes tres, fuí a las dos casas que me mencionaste y me encontré con todos los cuerpos, tal y como me los contaste. Ahora, no sé si creer toda la historia que me contaste, pero algo de eso te creeré..- José empezó a soltar una sonrisa al oír eso- Aún no te creo lo del Demonio y que una está poseída y todo eso, creo un poco ya que provengo de una familia muy religiosa pero igual, para eso debo verlo con mis propios ojos...
Logramos rastrear el auto del señor Camilo por la patente.. Y gracias a las cámaras de seguridad logramos encontrarla, la señora Kristeena está en una casa abandonada cerca del puente de Dharavi-...
-¿Dharavi?-...
-Sí, ahora tendrá la oportunidad de demostrarme que es cierto lo que me contó anoche. Y deberá acompañarme para poder atraparla-...
-Ok-....
El Detective lo llevó a José con él luego de hablar en ese interrogatorio, lo subió en su auto aún él con las esposas puestas. Justo en ese momento llega el compañero del Detective Hamilton y los ve...
-Detective Hamilton, where is he taking that prisoner?- [Detective Hamilton, adónde lleva a ese preso?]...
-At the crime scene, I want him to show me something that only he knows..- [A la escena del crimen, quiero que me muestre algo que sólo él sabe]. Le responde mientras vá caminando medio rápido a subir al auto. El Compañero se quedó parado pensativo mirándolo irse de ese lugar, José mientras iban le pregunta al Detective...
-¿No nos acompañará ningún oficial? No creo que podamos atraparla nosotros sólos- El Detective le responde luego de unos segundos...
-La atraparémos, no se preocupe-...
Varios minutos después pasan por debajo del puente de Dharavi, llegan en frente de la casa abandonada donde supuestamente estaría Kristeena. La casa era de dos pisos, todo hecho de madera, como se veía, parecía antigua, todo oscuro desde afuera, tenía dos ventanas en frente pero sin vidrio ni nada que la cerrara.
La puerta estaba destruída gran parte, arriba se veían otras dos ventanas, esas sí tenían vidrios pero cada uno estaba en gran parte destruídas. El Detective le quitó las esposas de las manos a José, luego le dijo...
-Bien.. vamos a entrar los dos, entraré yo primero mientras tu me sígues, ¿ok?-...
-Sí-...
-Tráta de no hacer tanto ruído-...
-Bien-...
Se bajan del auto, se acercan lento mirando por todos lados, el Detective, yá con su arma en manos se acercó primero hacia la puerta, trata de abrirla pero estaba trabada, empuja un poco fuerte con el brazo, luego de varios segundos logra abrirla. Entra primero él apuntando con su arma mientras caminaban lento por el pasillo oscuro que rodeaba la entrada, al caminar por ese lugar entran por la izquierda, ahí se encontraba el living, ahí se veía también todo oscuro con una chimenea en el medio de la pared, un sofá chico y viejo en una esquina pero la mitad de ese sofá estaba quemada, algunas sillas y cosas rotas tiradas en el piso.
La iluminación sólo se veía por la luz del día desde la ventana, al entrar ven a alguien sentado de espaldas en medio de la oscuridad en una esquina en el piso. Se quedan parados mirándolo por unos segundos mientras el Detective seguía apuntando, luego José se le quiso acercar, por la oscuridad sólo se le podía ver la forma, se le acercó lentamente mirándolo sin parpadear ni un segundo.
Luego de acercarse unos dos metros la forma se empezó a mover de una manera medio rara, José se quedó parado en su lugar, primero levantó el codo del brazo derecho con la mano sosteniendose con el piso. Luego de la misma manera con el codo izquierdo, con cada movimiento que hacía se escuchaba cómo sonaban sus huesos, después se vió que eso era para levantarse y ponerse de pie, al levantarse se dieron cuenta de que era Kristeena, todavía seguía de espaldas cuando empezó a hablar...