La verdad (Capítulo 20)

LA VERDAD (CAPÍTULO 20)

Gabriel estaba yendo más lento de lo que pensaba la batalla contra Klaus le había hecho gastar mucha energía .

-¡Parece que ese maldito híbrido nos ha hecho más daño de lo que pensábamos!- exclamaba la voz de una mujer.

- ¡Ya lo creo!, realmente es fuerte.

-¡Pero no te preocupes ya estamos llegando a Hope!.

-¿Qué harás cuando la encuentres?.- preguntó el joven

-Me apoderaré de su cuerpo, acabaré con los originales y con quien se interponga en mí camino, resucitaré a tu amada y te volveré al lugar que perteneces .

-¿Y a ella que le ocurrirá?.

-¡Drenaré toda su energía y cuando ya no haya más morirá!. ¿Algún problema con ello?.

- ¡Ninguno!

Al mismo tiempo Marcel acababa de llegar a una vieja casa deshabitada a 100 km de Nueva Orleans, gracias a su enorme olfato podía notar el perfume que solía llevar Rebekah era inconfundible.

Sintió la presencia de un vampiro que se acercaba detrás de él y con gran rapidez se movió y con su mano cogió el cuello del hombre que no era otro que Enzo.

-¿Quién eres?- preguntó el rey de Nueva Orleans

-¡Soy Enzo!- apenas podía hablar ya que Marcel le estaba estrangulando.

En ese instante Shelly apareció en escena mientras se reía sarcásticamente y aplaudía sin parar, exclamando que era muy divertido.

-¡Hola Enzo, hola Marcel!

- ¡He venido a por Rebekah!. ¡Hice lo que dijiste!.

-¡Pobre Marcel!. ¡Has sido engañado!. ¿De verdad pensabas que te la entregaría?. ¡Después de que tu querida ciudad fuera destruida ahora le toca a la zorra Mikaelson!- gritó poseída.

El hijo adoptivo de Klaus se dio cuenta de que el amor de su vida estaba atada a una especie de cruz encima de una pequeña montaña próxima y está estaba bañada en verbena. La chica gritaba de dolor, mientras Marcel rechinaba con los dientes.

De repente aparecieron tres hombres dos de ellos eran vampiros y el otro hombre lobo. Los tres se abalanzaron sobre el super vampiro que empezó a luchar contra ellos, tiempo que aprovechó Shelly con su velocidad para ponerse detrás de la pequeña Mikaelson.

Sacó una estaca y explicó que estaba hecha por el árbol del roble blanco capaz de acabar con un original, había creado ella misma un árbol idéntico al que los puso en peligro hacia siglos cuando Esther la matriarca convirtió a sus hijos en seres inmortales.

Primero acabaría con Rebekah, Marcel y luego con Klaus, ella se proclamaría la reina de Nueva Orleans, ese era su objetivo.

-¿Qué te ha pasado?- apareció Enzo delante de ellas.

- ¡Nada!- gritó enloquecida.

- ¿Qué es de esa mujer que me convirtió?, esa mujer que me dio su sangre cuando estaba a punto de morir de tuberculosis.

-¡Siento decirlo!. ¿Enzo te llamas?, la verdad es que te convertí para poder manipularte y tener un soldado que luchara por mí. Lamentablemente los cazadores de vampiros vinieron y tuve que huir.

-¿Qué?. ¿Me estás diciendo que solo era eso?.

-¡De hecho me olvidé de ti!. ¡Hasta ahora!

Enzo enfadado salió disparado contra la vampiresa pero está con un solo golpe noqueó a Lorenzo . Marcel acabó con la vida de los tres hombres rápidamente y se movió donde Shelly se encontraba, la malvada miembro del Manto oscuro acercó la estaca de la madera al corazón de Rebekah Mikaelson para clavársela y acabar con su vida, pero el vampiro que ella había creado se abalanzó sobre ella y cayeron los dos.

Tiempo que Marcel aprovechó para destruir la cruz de un puñetazo y salvar a Rebekah que estaba mal herida y cansada debido al sufrimiento que le habían infringido. Enzo y Shelly forcejaron hasta que la vampiresa intentó quitarse de encima al joven, este se había apoderado de la estaca y antes que lo expulsara con su fuerza se la clavó en el corazón.

La mujer empezó a gritar mientras su vida se consumía y moría, ante las lágrimas del joven que no podía creer que la mujer tan amable que le convirtió, era un ser tan despreciable y había sido engañado toda su vida vampírica. Marcel interrumpió las lágrimas del vampiro y le dio las gracias por haberlos ayudado.

En esos instantes Klaus se reunió con Alaric y Caroline en un punto intermedio entre Mystic Falls y Nueva Orleans. La joven profesora y directora del centro para alumnos de habilidades especiales, estaba siendo sermoneada por el híbrido que estaba totalmente enfurecido.

Alaric intentó meterse en la conversación, pero Klaus le gritó y le explicó que también era culpa suya y que a Caroline no le podía hacer ningún daño pero que a él sí que le pensaba castigar.