En lo mas profundo del bosque

Capitulo 11: Esclavitud.

*hoy será un largo día.

Ya ha pasado un mes y lo único que se de mi " sonambulismo"  es... NADA.
Solo me levanto a media noche, camino hasta el mismo punto del bosque, diciendo "niña ven aquí, niña quien eres, niña esto, niña lo otro" y honestamente pienso que Aren ya se canso de ser mi niñero. 
Respecto a su historia sigo investigando, no me voy a rendir con el fantasmita. 
El trabajo me tiene muy agotada. 
No soporto a ningún ser vivo.
Me preguntó si Aren cuenta como ser vivo. 
Mi madre está muy enamorada de nuestro vecino, es insoportable. Lo peor es que, se que algo oculta, algo de el no me termina de convencer de sus "buenas intenciones". 
O quizás sea mi paranoia.
No lo sé.
Llego a mi trabajo y hoy me toca trabajar con Alexander. 
En todo este tiempo evite lo más que pude ser su ayudante.
Pero hoy, hoy ya no tuve alternativa.
Me va a esclavizar lo sé.
Y lo gozará. 
– Hola a todos — levanto mi mano derecha para saludar a la multitud.
Me giro y detrás mío se encuentra Alexander.
– Hola, tu. — me mira con cara de disgusto.
No entiendo el por qué, si soy lo más hermoso que hayan vistos sus ojos.. 
Esos ojos que reflejan la oscuridad de su alma.
Mentira, exagero.
– Vamos al punto ¿Que vamos hacer hoy? 
– Básicamente tu serás mi esclava y yo disfrutaré tu esclavitud.
Yo lo sabía.
– No entiendo por qué tanto odio sobre una persona tan hermosa, amable y agradable como yo.  — sarcasmo por doquier.
– Estoy seguro que eres la única que piensa eso de ti. 
Ahora que lo pienso el nunca me dijo cuál era su responsabilidad aquí, tampoco nunca me interesó saberlo. 
– Y cuantame persona desagradable ¿Que se supone que haces? Además de desgraciar mi vida, claro. — Agarro mi cabello de rizos color miel y lo recojo en un moño.
– Yo me encargo de que no falte nada en esta institución.
–Cuentame más. 
– Básicamente les doy todo lo que necesiten. Y mantengo la cuenta de todo. Nada se me tiene que escapar.
– Que aburrido.
– Cómo tu vida. — remata. 
– No puedes insinuar nada de mi por qué no me conoces, te puedo asegurar que tengo una vida bastante entretenida.
– Tienes razón. Pero, estoy seguro de que eres una niña malcriada, acostumbrada a que le den todo lo que quiere.
– No voy a perder del tiempo en convencer a gente que no me interesa.
No entiendo por qué el tiene esa impresión de mi, sé cuál fue mi primer actitud y justifica en parte su punto de vista sobre mi.
Pero, nos conocemos hace tiempo y creo que he demostrado que soy una buena persona.
La única razón por la que el me cae mal es por qué yo le caigo mal.
En cierta parte me gustaría demostrarle que no soy como el piensa , pero una parte de mi intenta convencerme que no vivo de los pensamientos de los demás y que no debería importarme.
Luego de terminar mi jornada de trabajo me dirijo a mi casa a investigar más sobre Aren.
Voy a mi habitación y continuo con la lectura de Edevane  
 

"19 de Septiembre del año 1858

Observarte ya se hizo rutinario, desearte nunca será  ordinario.

Estoy detrás de cada paso de ti y de tu hermoso hijo Aren, lastima que no sea mío, sino de mi hermano.

Los protejere hasta el final, por qué el no es digno de su amor, pero yo me lo merezco.

Y haré lo que sea necesario para que tú lo vea, mientras tanto amada mía, te veré desde lejos, pero sé que pronto estaré tan cerca que seremos uno."


 


QUEEEEEEEEE 
ESSSS
LOOO
QUEEEE
ACABO
DEEEE 
LEEEEER
Estoy muy impactada, entonces el diario nunca se trató de Aren, si no de tu tío acosador.
Es que no lo entiendo.
Lo peor es que el no sabe nada de esto, no me he animado a contarle nada, no sé cómo vaya a reaccionar.
Y no quiero ir con los cabos sueltos.
Pero estoy a un milímetro más cerca de descubrir algo.

He visto muchas fotos de el y su infancia, hasta podría decir que lo conozco más de lo que el se conoce a si mismo. 

 




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.