Capitulo 23: Una nueva amenaza

El amanecer trajo consigo un aire de tensión en la mansión. Draco había regresado, pero en lugar de buscar consuelo en Harry, había decidido mantener su distancia. La sugerencia de Luna había resonado en la mente de Harry: "Quizás Draco necesita espacio". Aunque le dolía, sabía que debía respetar los deseos de Draco, al menos por ahora.

Draco caminó silenciosamente por la mansión, evitando el contacto visual con Harry. Se había refugiado en su habitación, dejando claro que no estaba listo para hablar. Mientras tanto, Harry también se mantenía ocupado, ayudando a los demás con las tareas diarias, pero siempre con la mente en Draco.

Luna: (mirando a Harry con preocupación) "Harry, deberíamos salir a buscar más suministros. El almacén se está agotando y necesitamos alimentos frescos."

Harry: (asintiendo) "Sí, tienes razón. ¿Quién irá esta vez?"

Luna: "Astoria, Daphne, Cho, Regulus y Ron. Nosotros podemos manejarlo."

Harry: (mirando a Draco de reojo) "Bien. Tengan cuidado."

El grupo se preparó y salió de la mansión, dejando a Harry y Draco en un incómodo silencio. Luna, Astoria, Daphne, Cho, Regulus y Ron se adentraron en el bosque cercano, en busca de un supermercado abandonado que habían visto en sus exploraciones anteriores.

Mientras caminaban, el grupo se mantenía alerta, sabiendo que el peligro acechaba en cada esquina. Los zombies eran una amenaza constante, pero hasta ahora, habían logrado evitarlos o enfrentarlos con éxito.

Llegaron al supermercado y comenzaron a llenar sus mochilas con todo lo que podían encontrar: latas de comida, botellas de agua, medicinas y otros suministros esenciales. La atmósfera era tensa, pero el trabajo en equipo los mantenía enfocados.

De repente, un sonido extraño se oyó a lo lejos. Era un gruñido, pero no el típico de los zombies que conocían. Era más agudo, más feroz.

Regulus: (frunciendo el ceño) "¿Escucharon eso?"

Cho: (asintiendo, preocupada) "Sí, parece diferente."

Astoria: (mirando alrededor, nerviosa) "¿Deberíamos irnos? Esto no se siente bien."

Ron: (preparando su arma) "Manténganse juntos. No sabemos qué es, pero no quiero averiguarlo por las malas."

El grupo continuó llenando sus mochilas, pero el ruido se hizo más fuerte, y entonces los vieron. Aparecieron de la nada, corriendo a una velocidad alarmante. Estos zombies no eran como los que habían enfrentado antes. Eran más rápidos, más fuertes, y parecían atraídos por el más mínimo sonido.

Luna: (susurrando) "¡Cuidado! No hagan ruido."

Pero era demasiado tarde. Los zombies los habían detectado y corrían hacia ellos con una ferocidad aterradora. El grupo se dispersó, tratando de evadir el ataque. Ron y Regulus abrieron fuego, tratando de detener la oleada, mientras Astoria y Daphne intentaban encontrar una salida.

Astoria: (gritando) "¡Por aquí! ¡Rápido!"

El grupo logró llegar a una salida trasera y se adentró en el bosque, pero los zombies los seguían de cerca. Corrían sin descanso, sabiendo que no podían detenerse. Los gruñidos y pasos frenéticos de los zombies resonaban a sus espaldas.

Cho: (jadeando) "No podemos seguir así. ¡Nos alcanzarán!"

Regulus: "Tenemos que encontrar un lugar donde escondernos."

Finalmente, encontraron una cabaña abandonada y se refugiaron en su interior. Bloquearon las puertas y ventanas, esperando que los zombies no pudieran entrar. El silencio se hizo pesado, interrumpido solo por los jadeos de sus respiraciones.

Luna: (suspirando) "¿Todos están bien?"

Ron: (asintiendo) "Sí, pero apenas. ¿Qué eran esos zombies?"

Regulus: (mirando por una rendija) "No lo sé, pero son diferentes. Más peligrosos."

Astoria: (temblando) "Tenemos que advertir a los demás. Esto cambia todo."

Después de un rato, cuando el peligro inmediato pareció haber pasado, el grupo decidió regresar a la mansión. Sabían que debían informar a los demás sobre la nueva amenaza que habían descubierto.

Mientras tanto, en la mansión, Harry se preocupaba por la demora del grupo. El silencio de Draco solo aumentaba su inquietud, pero sabía que debía darle tiempo.

Draco estaba en el baño, terminando de bañarse. El vapor del agua caliente llenaba el pequeño espacio, empañando el espejo y creando una atmósfera de intimidad y calma. Mientras se secaba, su mente vagaba por los recientes eventos, intentando encontrar un momento de paz en medio del caos.

Harry, por otro lado, había estado buscando algo de calma también. Su mente estaba llena de preocupaciones y culpa. Decidió ir al baño para refrescarse un poco, sin saber que Draco estaba allí.

Al abrir la puerta, Harry quedó congelado al lado de la puerta. Draco estaba de espaldas, completamente desnudo, secándose. El calor subió rápidamente a su rostro y sintió un fuerte sonrojo.

Harry: "Oh, lo siento, no sabía que estabas aquí..." (dijo rápidamente, cerrando la puerta con un golpe y corriendo hacia la cocina).

Draco, sorprendido, apenas tuvo tiempo de reaccionar. Se puso una toalla alrededor de la cintura y salió del baño, bajando las escaleras hacia la cocina. Encontró a Harry bebiendo agua, claramente intentando calmarse.

Draco: (con una sonrisa burlona) "¿Por qué me espiabas, Potter?"

Harry: (mirando a cualquier lugar menos a Draco) "No te espiaba, fue un accidente. No sabía que estabas allí."

Draco: (cruzando los brazos, aún con la toalla) "¿Un accidente? Vaya forma de encontrarme."

El ambiente era tenso, pero había una ligera chispa de humor en los ojos de Draco. Harry, aún sonrojado, decidió enfrentarlo.

Harry: "En serio, lo siento. No fue mi intención."