En qué estrella estará

CAPÍTULO 15

AÑO 2020

Por creer
Por confiarme
Por seguirte voy sin dirección
Sé que nuestro camino hoy
Se parte en dos

Efecto Mariposa

 

Francesco me miró en silencio. Sé que se debatía entre si responder o no a mi pregunta.

-Creo que no estás en condiciones para que tengamos esta conversación, Trini. Todavía estás muy débil-, dijo, saliéndose por la tangente.

-Pues yo quiero que hablemos ahora. Es importante. ¿Me dejaste por lo que pasó con Estrella?-

-Shhh. Hablaremos más tarde. Estás muy cansada, necesitas dormir y aprovechar que te ha bajado la fiebre-.

Intenté protestar, pero casi no pude. No tenía fuerzas para hacerlo. En menos de cinco minutos, estaba dormida nuevamente.

Dormí todo el resto del día. Apenas me desperté para beber un vaso de agua y volví a dormir. Estaba reponiendo fuerzas sin lugar a dudas.

Al otro día me levanté cuando despuntaba el sol. Abrí los ojos y ví a Francesco sentado en una silla junto a mi cama. Dormía plácidamente a pesar de su visiblemente incómoda postura. Mi corazón se llenó de ternura y me acerqué, sigilosa, y le planté un beso en la frente. Él se removió en la silla y me miró.

-¿Cómo te sientes, preciosa?-

-Como si me hubiera pasado un camión por encima, pero voy a estar bien-, sonreí.

-Mejor así. ¿Quieres desayunar?-

-Pues la verdad es que estoy famélica.-

-Ven, te prepararé algo,- dijo mientras me tomaba de la mano y me conducía a la cocina. Cuando llegamos, me sentó en un taburete de la isla de la cocina, pero no me soltó las manos.

-Trini, me tenías muy preocupado. Creí que no te iba a bajar más la fiebre. Estabas alucinando. Me asusté mucho. No podría soportar que te pasara algo,- dijo, con semblante triste.

-Ya me pasó algo, Fran. Ya nos pasó. Y tú te fuiste. Creo que necesitamos hablar.




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