-este- dice Gise entusiasmada. Yo niego con la cabeza. Mi amiga intenta escoger un vestido para esta noche, llevamos recorriendo tres tiendas y no encontramos algo que llame nuestra atención y nos quede bien. Después de probarnos varias prendas decicimos comprar vestidos cortos.
-¿tu amiga ira?- pregunta la castaña
-¡Brigitte! Voy a llamarla- respondo- busco mi móvil entre las bolsas hasta encontrarlo, le marco rápidamente y ella contesta al segundo tono. Le pregunto si asistira y ella responde que no, me comenta que no suele salir ni usar vestidos mucho menos tacones. A Gise y a mi se nos ocurre llevarle ropa y asi no tendrá excusa para negarse.
Ella nos invita a pasar la tarde en su casa, me envia la dirección por texto. Amelia le presto su coche a mi amiga por lo que llegamos en minutos.
Su vivienda es de una planta, es color blanca y las aberturas en color negras, es muy acojedora. Toco la puerta y Brigitte abre de inmediato
-¡hola!- saluda alegre, me da un corto abrazo, luego le presento a Gise. Nos invita a entrar y asi lo hacemos; todo esta perfectamente ordenado y se siente la calidez de un verdadero hogar. Nos dirigimos a su habitación
-tenemos algo para ti- digo. Ella mira asombrada
-¿que?- pregunta. Gise le entrega la bolsa y Brigitte mira en su interior luego coge el vestido -¡es hermoso!-
-ya no tienes excusa- habla mi amiga.
-no yo no puedo aceptarlo- habla apenada- no puedo pagarlo-
-es un regalo- responde. Ella niega con la cabeza
-se los agradezco pero no es solo eso, yo jamas sali a un lugar asi no se llevar tacones. Ni siquiera se maquillarme- dice tímidamente
-eso no es problema- interfiere Gise- yo se maquillar, Loa peinar y ya tienes ropa incluso calzado-
-tampoco se bailar- agrega
-tenemos toda la tarde para prepararte- respondo.
Empezamos a probar maquillajes y peinados que combinen con su vestuario. Al decidirnos por uno nos sentamos en el suelo a conversar. Alguien toca la puerta, Brigitte se pone de pie y abre
-hola papá-saluda, el señor se asoma y nos observa serio. Luego nos saluda y sin mas se retira. Ella se sienta en donde estaba antes
-èl es algo antiguo- dice - y a veces se le olvida que ya no soy una niña-
-es lindo que lo haga- respondo
-yo no tengo papá- comenta Gise -en realidad tengo pero no lo conozco. Èl me abandonó y a veces me pregunto ¿como seria tener uno que se preocupe por mi?- habla apenada. Tomo su mano y la presiono
-tampoco tengo papá, èl fallecio cuando era pequeña y casi no lo recuerdo.
-no tenia idea, lo siento. Es solo que las demas chicas se burlan- susurra.
-son unas idiotas- dice Gise, dejamos de hablar temas tristes y nos centramos en la fiesta. Tenemos un mismo objetivo pasarlo genial.
Mi amiga y yo nos despedimos y me llevo de regreso a casa; antes de preocupar a mamá.
Después de darme una larga y relajante ducha decido alistarme para la ocasión, si bien Gise es la especialista en el maquillaje me enseño a hacerlo. Me hago una trenza en un lado del cabello y lo dejo suelto del otro, me miro en el espejo de cuerpo completo y me agrada como me veo. El color negro me asienta bastante; bajo las escaleras y veo a mamá sentada en el sofa leyendo un libro
-¿como me veo?- pregunto dando una vueltita
-¡preciosa mi amor!- exclama orgullosa.
-gracias mamá- aunque exagera demasiado. Sonrio dulcemente. Ella se pone de pie y me da un corto abrazo
-vamos por las chicas- dice. Salimos y caminamos hacia su camioneta para ir a buscar las chicas; primero Brigitte y luego Gise. Luego de recogerlas mamá nos deja en el restaurante en el que reservó Sam. Antes de marcharse me da su bendición y me dice que me cuide, que no este sola y si necesito que me busque que solo la llame sin importar la hora; me apena verla tan preocupada por mi, siente miedo de que me pase algo y yo siento que exagera un poco pero deseo que este tranquila poreso le obedezco.
Gise se ve hermosa con su vestido color turquesa, Brigitte viste uno color fucsia se ve presiosa es la primera vez que la veo maquillada. Entramos y vemos nuestros amigos sentados en una mesa esperandonos.
-¡feliz cumple!- gritamos al unísono. Sam se pone de pie y nos damos un abrazo grupal al cual se suma Sele tambien. Al separarnos tomamos asiento, los mozos traen nuestra comida y bebida.
Fredd mira a Brigitte y yo sonrío feliz, es lo que quiero que descubra lo hermosa que es pero no solo por fuera sino por dentro también.
Hablamos sobre la universidad, tambien contamos anécdotas graciosas de cada uno, la hora pasó muy rápido. Salimos del restaurante
-¿como iremos?- pregunta Fredd
-yo vine en mi coche- dice Nathan
-Nathan, Loa, Oliver y yo iremos en el auto y Fredd llevas a las chicas- dice Gise
-que suerte tengo- responde Fredd a las risas. Caminamos hacia los vehiculos. Mi amiga y su novio se sientan atras, yo frunzo el ceño pero sin decir nada me siento en el asiento de copiloto.
-pasaremos una noche increíble- habla la castaña
-asi es amor- responde Oliver
-¿bailaremos juntos cierto?- cuestiona Nathan mirándome y me sonrojo al instante. Solo asiento, al llegar vemos muchismos autos por suerte encontramos espacio para los dos vehículos teniendo en cuenta que la camioneta del papá de Fredd es algo grande. Bajamos y encaminamos hacia la entrada de la discoteca, Brigitte se acerca a mi
-Loa yo nunca he bebido alcohol- susurra cerca de mi oido
-no te preocupes, debes hacerlo poco a poco al principio solo moja tus labios si das un trago quemara tu guarganta pero ya luego sentirás que no es tan malo- hablo bajo. Ella sonríe, después de hacer una fila y esperar unos minutos logramos pasar; los chicos se dirigen a la barra en busca de algo para tomar nosotras comenzamos a bailar en ronda.
-asi que bailaras con Nathan- dice Gise golpendo mi brazo con su codo.
-si, de hecho bailaremos entre todos ¿no?-
-claro- dice sonriente. Nathan, Fredd y Oliver regresan con vasos de vodka con speed, se unen a la ronda y empezamos a pasar la bebida después de darle un trago cada uno, asi lo hacemos hasta terminarlos. Luego Sele y Sam se dirigen a comprar más
-voy al baño- le anuncio a Gise y Brigitte.
-¿quieres que vaya contigo?- pregunta mi mejor amiga
-no, no hace falta. Me alejo de ellos, mientras camino por el pasillo que da a los sanitarios alguien me toma de la cintura volteo rápidamente y me encuentro con nada mas y nada menos que Adrien.
-estas hermosa- dice lleva sus manos a mi rostro queriendome besar, intento zafarme pero es mas fuerte que yo. Giro mi rostro para que no pueda hacerlo
-¿que carajo te pasa?- espeta
-te metiste con la persona equivocada- hablo cabreada
-a mi no me bajas el tonito- dice serio
-no me jodas Adrien, amenazaste a mamá y eso no te lo perdono-
-no me hables asi- me jala el cabello
-¡suéltame!- grito. Siento su mano pesada en mi mejilla y ante el impacto volteo, inconscientemente llevo una de mis manos hasta el lugar donde acaba de golpearme.
-tu lo provocaste, es tu culpa Loana- dice mas calmado. Yo solo corro hasta el baño y cierro la puerta con el pasador e intento tranquilizarme un poco, las lagrimas empapan mis rostro aunque las limpio en cuestion de segundos vuelven a hacerse presentes. Mas calmada salgo, me miro en el espejo y mojo mi rostro, arreglo mi cabello necesito verme normal no quiero arruinar otro cumpleaños. Salgo y veo a Gise
-¿estas bien? Creimos que te habias ido por el retrete- bromea. Yo sonrio actuando como si nada ha pasado
-me estaba retocando el maquillaje- miento.
-estas preciosa- dice ella. Miro en todas las direcciones y afortunadamente Adrien se ha marchado-¿que tienes en tu mejilla?-
-nada, solo una chica me empujó en la entrada y choque la puerta- vuelvo a mentir. Mi amiga me mira preocupada pero solo me toma de la mano y regresamos con los demás, seguimos bailando. Tomo unos tragos y ese mal rato se esfuma de mi mente; doy una vuelta bailando en mi lugar y quedo inmovil al ver a unos pocos metros a Adrien besarse con una chica rubia
-¿estas bien?- pregunta Brigitte. Yo asiento distraída. Me gustaría decir que no me afecta pero mentiría si lo dijera, me duele pero y a la vez me molesta haber creido en èl, en su amor. Gise me toma del brazo haciéndome girar
-Loa estamos festejando el cumpleaños de Sam por favor ignoralo- pide en suplica
-no te preocupes- respondo. Continuamos bailando, de vez en cuando miro en esa dirección pero recuerdo que no debo amargarme. Miro a Fredd y èl no aparta la vista de Brigitte; solo espero que se atreva a hablarle.
Observo a Nathan y noto que esta serio y no estaba asi al llegar. A su espalda veo nuevamente a mi ex pero esta vez besando a una chica de cabello negro. Nathan voltea y ve lo mismo que yo, sin decir una palabra solo se aleja de nosotros. No tengo idea de porque lo hago pero decido seguirlo.
-¡Nathan!- grito. Èl se detiene -¿a donde vas?- pregunto deteniendome justo al frente
-afuera- responde sin mirarme.
-¿no te sientes bien?- cuestiono preocupada. Sin responder continua caminando, yo lo imito. Se aleja demasiado de la discoteca, a lo mejor no hago bien en ir tras èl, me detengo y lo veo sentarse en el césped. Realmente no se porque actuo asi pero me acerco y me siento a su lado, corre una leve brisa y me abrazo a mi misma
-¿que te ocurre? ¿Por que saliste asi?- pregunto
-nada- responde mirando a lo lejos- esta es la parte en donde me pongo de pie y regreso con los demas. Hace demasiado frio para estar aqui con alguien que ni siquiera me quiere cerca. Todo ocurre en mi mente porque no soy capaz de moverme de donde estoy.
-entonces quieres estar solo, alejados de todo porque no te pasa nada- digo acercandome un poco mas a èl, hasta acurrucarme junto a su pecho. Nathan no se mueve, siento los latidos de su corazón acelerados. Levanto la cabeza
-puedes confiar en mi- insisto
-¿sigues enamorada de Adrien?- cuestiona serio
-no lo se- respondo y no miento, estoy molesta y no quiero volver a verlo pero a la vez me duele saber que no signifìco nada para èl. -¿estas asi por èl?- me alejo un poco y el frio vuelve a golpearme. Se sentia bonito estar tan cerca;
Se encoge de hombros -si lo estas dejame decirte que a Andrien busca justamente eso y disfruta provocar odio en las personas.
-y tu ¿por que no puedes odiarlo Loana?- inquiere mirandome molesto. No soy capaz de contestar eso, ni yo misma tengo una respuesta clara. -necesitas dejarlo atras- dice sacándome de mis pensamientos. Yo lo miro, Nathan se acerca a mi lentamente mientras observa mis labios, instintivamente cierro los ojos creyendo que va a besarme, pero sus labios no tocan los mios,los abro y èl solo esta frente a mi mirandome. Me siento realmente una idiota, me pongo de pie
-voy adentro- anuncio
-Loa espera- dice. La verdad no se como volvere a mirarlo después de lo que acabo de hacer, quisiera golpearme
-te veo adentro- digo caminando hacia el interior de la discoteca. Al entrar alguien me toma de la cintura y me gira
-dijiste que bailariamos- dice. Yo asiento, empezamos a movernos al compás de la música aunque evito mirarlo a los ojos me siento avergonzada. -Loa lo de alla afuera- comienza a hablar cuando alguien lo empuja
-¡alejate de ella imbecil!- grita Adrien, empuña su mano, Nathan le hace frente y es alli cuando reacciono y decido interferir. Me paro en el medio de los dos pero miro a mi ex
-vete de aqui- le digo. Èl desafia con la mirada a Nathan -¡vete!- grito pero continua ignorandome. Siento las manos del castaño en mi cintura mientras me lleva a un lado
-este es entre èl y yo- me dice.
-no quiero que peleen- hablo asustada
-¿necesitas que esta zorra te defienda?- lo provoca Adrien. Nathan camina hacia èl pero en ese momento Fredd y Oliver llegan a detenerlo entre los dos logran evitar que se golpeen. Llevan afuera a Nathan; Gise y Brigitte me toman de los brazos y nos reunimos.
-si, a lo mejor me mataba a golpes pero yo me quitaba las malditas ganas de golpearlo tambien. Se defenderme y merece que alguien le enseñe a respetar a Loana- habla molesto. Nunca antes lo habia visto en ese estado, me acerco a èl
-asi no se arreglan las cosas- digo-¿ tienes idea del susto que me has dado?- Nathan me mira perplejo unos segundos
-¿susto?- pregunta confundido
-si, en verdad crei que se iban a golpear como salvajes y temi por ti- digo. Èl niega molesto y empieza a caminar hasta su coche
-¡¿olvidan que es mi cumpleaños?!- grita Sam. Todos la miramos
-lo siento- digo- todo es mi culpa, yo no debí...
-claro que no es tu culpa, vamos a seguir festejando, pero no aqui- habla Gise.
-¿en donde?- pregunta Nathan
-en la playa- responde sonriente y todos aceptan. Se dirigen a la camioneta de Fredd, Nathan me toma de la mano yo lo miro desconcertada
-vamos en mi auto- anuncia. Al subirnos el me mira -a lo mejor èl se muestra fuerte pero ante las personas débiles, necesita que alguien le enseñe a respetar a las mujeres y no levantarle la mano jamas- dice. Ante esas palabras yo abro los ojos como plato. Enciende el vehiculo y nos dirigimos hacia nuestro destino, evito mirarlo ya son dos veces en las que me siento apenada. ¿por que dijo eso? Estaciona el auto al lado de la camioneta de Fredd y bajamos.
Nathan enciende el estéreo y sube el volumen comenzamos a bailar, ellos compraron bebida, seguimos tomando hasta el amanecer. Dejamos atras el mal rato que vivimos horas antes, y nos dedicamos a reir, cantar y tomar. Sobre todo hacerle pasar el mejor cumpleaños a nuestra amiga.
-es hora de irnos- dice Nathan. Yo frunzo el ceño.
-aun no me quiero ir- digo. Los demas comienzan a subirse al coche de Fredd, saludan con su mano. Vuelvo la vista al castaño- bien tu ganas- enciende el vehiculo y encaminamos a casa.
Se detiene en un semáforo
-Loana lo que ocurrio afuera de la discoteca- comienza a hablar y me sonrojo al instante. La bocina del carro de atras lo hace callar, sigue conduciendo yo me dedico a mirar por la ventana. Estaciona frente a mi hogar volteo a verlo
-gracias por traerme.
-no quise hacerte sentir mal, se que arruine el momento pero nunca antes estuve tan cerca de ti y estoy seguro de que si lo hacia te arrepentirias después- habla apenado.
-que bueno que no lo hiciste- digo. La verdad me siento desilusionada porque no me haya besado pero no tiene porque saberlo. Abro la puerta para bajar pero èl me detiene;
-a la mierda si nos arrepentimos, quiero hacerlo- tras decir esas palabras se inclina hacia mi y me besa lentamente, yo cierro los ojos y me dejo llevar, siento algo extraño en mi interior como un hormigueo que recorre todo mi cuerpo. Sus labios acarician los mios con suavidad, y puedo asegurar de que nunca antes senti algo igual.
Editado: 03.01.2020