En tres palabras o menos

Capítulo VII Copa sin vino

Henry junto a Anna escogieron una hermosa casa donde vivirían los recién comprometidos. Damian les dejo ese asunto alegando que tenía mucho trabajo, André sabía bien que no era el caso ya que rara vez deja trabajo acumulado y Stephen miraba como espectador lo que ocurriría a continuación.

Para los hermanos Crovetto era evidente que una copa vacía era lo mismo que una copa de veneno y lo habían aprendido de mala manera. Particularmente porque ellos dirigían la empresa de su padre y al ser demasiado jóvenes e inexpertos no estaban excentos de ser blancos de burlas o envidias que con el tiempo fueron desapareciendo.

No obstante, fue un trabajo duro. Principalmente para Stephen quien idolatraba a su hermano mayor y era su ejemplo a seguir. Cuando lo vio derrumbado a causa de una maldita acepto el rol de controlar todo lo que estaba a su alcance. André no quería que hiciera eso pero no tenía ninguna otra opción que le sirviera y finalmente se convirtió en el malo.

Para André, no fue lo peor que pudo suceder. Su visión iba más allá de que al evitar que sufriera, lo haría temeroso del mundo y por el contrario no podría tomar decisiones propias. Era algo confuso. Sin embargo, el chico mas reservado de los cuatro era Norman. Él los envidiaba desde el fondo de su corazón pero jamás quiso hacerles daño. No entendía como ellos podrían considerarse líderes si su propia vida era un desastre.

Con la aparición de Evelyn y posteriormente la llegada de Lilith, él se dio cuenta que una mujer podía romper su fabulosa hermandad. No sabía la historia detrás pero Evelyn salía con Damián y lo dejo por Stephen después Damián estaba encaprichado con Lilith solo para dejar a André solo. Hubo disputas pero ponían en jaque su relación de hermandad como laboral. Así de frágil era su lazo como hermanos.

— André, ¿crees que él está de acuerdo con casarse con esa mujer? ¿No crees que igual en este sociedad llegara un día en que se quieran casar por amor?

— Eres idealista pero me agrada. — contesto sirviéndose vino — Damián puede declinar pero no lo hace. Puede romper el compromiso pero no lo dice. Solo es cuestión de tiempo.

— ¿Porque? ¿Es estúpido?

— No, es porque todo puede cambiar. Él ya no es un niño pero frente a otros adultos es un bebé. Para ellos lo mejor es un matrimonio sin amor que no interfiera en los negocios. — contesto — no es fusión de empresas no nada similar. Solo son beneficios para cada individuo.

En la casa que suelen habitar, siempre está vacía. No les falta nada pero desde el punto de vista de Norman, era solitario. Después de charlar con André, se dio cuenta que estaba lejos de comprender algo que ellos aprendieron toda su vida. Su vida como hijo menor no tenía objetivos fijos pues sus hermanos ya se habían encargado de lograr todo y tener todos los premios para si mismos, él ya no debía hacer eso.

¿Y si quería resaltar? ¿Cómo lo haria? André solo tenía 27 y era un completo jugador pero nadie negaría que hace excelente su trabajo, tienes buenas ideas y sus seguidores han dicho que es un buen modelo a seguir al menos en lo empresarial. Stephen solo tiene 26 y es uno de los empleados más valiosos al sugerir personal de alto nivel para la empresa, además tenía buen ojo para sugerir ascensos así como revisar las mejoras de cada departamento. El CEO evidentemente era Damián y era un puesto que jamás podría alcanzar... ¿porque?

Porque no sentía que fuera para él. Es una meta que se trazo pero jamás podría competir con Damián. Ex soldado pero con una personalidad juguetona y carismática, trabajador de buena memoria, muy hábil y nunca ha vacilado a la hora de atraer inversores que de repente no saben ni lo que ofrecen, los ayudo aunque sean enemigos comerciales y lentamente los atrae para si. ¿Entonces?

— ¿Hermano? ¿Que haces?

— Nada — contesto guardando sobras en el refrigerador. — últimamente me siento más cansado de lo habitual. — contesto Damián.

— ¿No tienes miedo de que te quite el puesto de CEO?

— Puedes tenerlo si quieres. — contesto como si nada

— ¿No represento amenaza para ti? — pregunto molesto

— No es eso. Si quieres un puesto que sea porque de verdad lo quieres y no solo para presumirlo. — y le mostró su celular. — está es mi agenda de cada día...

Norman solo echo un vistazo y eso iba en contra de su estilo de vida, en realidad solo quería estar a cargo de un complejo turístico en construcción. Entendía que no debía compararse pero ¿porque sentía que su vida está vacía?

— ¿Tiene novia? Hueles a perfume de mujer... específicamente Woman 7. — le dijo.

— ¿Se nota? emmm estoy viendo con alguien pero es secreto. — contesto sonriendo de oreja a oreja. — shhh

— ¿Y porque me lo dices? ¿Eso no pondrá en peligro tu compromiso?

— Si lo hace, seré feliz además tú no dirás nada... por eso. — y camino hacia el pasillo.

Podría tener razón. No diría nada, de momento.

...

— Papá, ¿sabes dónde vive Lilith?

— No, ¿necesitas algo Anna? — pregunto

— Más que necesitar, quiero que sea mi dama. La necesito ¡Ya!

— Falta más de un mes para la boda. — le recordó




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