Esa tarde iba corriendo a toda prisa por el parque, huyendo de ellos, mi familia. ¡Querían comprometerme!; ¡Con la hija del cura!. Todavía me pregunto, ¿Qué fue lo qué no entendieron cuando dije que soy gay?, ¡¿Es este su regalo de navidad?!, Pues maldita sea, no lo quiero, primero muerto antes de hacerlo, no estoy dispuesto a pasar el resto de mi vida con una persona que no amo, ¡Es que ni me llama la atención!.
Iba tan concentrado en mi huida que no te vi. Sí, tropezamos, decir que no me dolió sería mentir, me raspé el codo y la rodilla. Fue mí culpa, eso lo sé, pero no pude evitar enojarme contigo, iba a reclamarte, insultarte y posiblemente golpearte, pero no pude, eso me detuvo, ese hermoso brillo de inocencia en tus ojos, eso.... En tu mirada
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