Enamorada de mi hermano

capitulo 17 carta para Dipper

Después de un nuevo día, el sol se había colocado el lo alto del cielo iluminando con su luz la habitación de los gemelos Dipper y Mabel pines. 

Dipper fue el primero en despertar, en su mente recordó todo lo que había pasado a noche anterior. 

Recordó todo lo que le había dicho a su hermana « en verdad dije todo eso » se dijo en su mente reflexionando sus acciones, lo más probable es que Mabel se allá sentido incómoda. 

Al meditarlo Dipper trato de no darle importancia, como el día había empezado era hora de salir de la cama, Dipper volteo a la dirección donde se encontraba su hermana, al verla su corazón se llenó de alegría, al ver a su hermana hay acostada tan linda y tranquila hizo que su cuerpo se llenará de paz y tranquilidad. 

A pesar de que ellos eran gemelos que habían nacido el mismo día, Dipper sentía que era el hermano más adulto y responsable, comenzó a sentirse como si el fuera el hermano mayor y Mabel fuera su hermana menor. 

Era debido a esa razón que Dipper sentía el impulso natural de cuidar a Mabel de todo mal y peligro, de seguro la palabra celos salió de sus labios, sin saberlo,  el hablaba de sus celos como hermano mayor. 

Dejando esas ideas de lado Dipper se fue directo al baño, después de tomar una ducha se vistió con su típico pantalón corto, camisa roja y chaqueta azul y no menos importante su gorra. 

Dipper tomo la decisión de salir de la cabaña solo, después de tanto tiempo quería pasear por el pueblo, revivir viejos recuerdos y saludar viejos amigos. 

Al bajar las escaleras pudo oír sonidos de golpes, parecía que alguien estaba tocando la puerta, al darse cuenta que su tío Stan todavía no había despertado Dipper fue de prisa hacia la puerta. 

Al abrirla Dipper quedo desconcertado pues la persona que tocaba la puerta no estaba, no había ni una sola persona en los alrededores «acaso un fantasma tocó la puerta» pensó Dipper. 

Finalmente se disponía a cerrar la puerta cuando sus ojos notaron algo, en el suelo se encontraba un pedazo de papel. 

Dipper lo levantó, al verlo más de cerca pudo notar que se trataba de una carta. En perfecta caligrafía estaba anotado «Para Dipper» está carta estaba escrita para el. 

Dipper se preguntas quién le podría dejar una carta, reviso el sobre por los dos extremos pero no había ningún nombre, ahora Dipper entendía bien que está carta era para el, lo que todavía no sabía era quien la había escrito y para que. 

Sin darle importancia Dipper abrió la carta, a dentro se encontraba un pedazo de papel entonces comenzó a leer. 

Querido Dipper está carta es para ti, quería disculparme con Tigo, no tengo ninguna escusa para mí vergonzoso comportamiento. Si estás de acuerdo estoy dispuesta a compensarte, búscame en el lago Gravity Falls, te esperaré en el muelle, espero verte pronto. 

Al parecer la persona misteriosa que escribió la carta quería encontrarse con el, el día de hoy en el lago Gravity Falls. No parecía haber nada extraño, el lago Gravity Falls era un lugar que Dipper conocía. 

La única duda dentro de él es que si estaba dispuesto a ir, Dipper pensó un poco más, mirando un poco más los papeles en sus manos, la palabra Dipper estaba escrita en hermosas letras doradas, también la caligrafía era limpia, elegante y hermosa. 

Que persona era capas de escribir una carta como está, solo una persona por día ser. 

Dipper pensó que se podría tratar de Pacifica noroeste, el no tenía ningún otro conocido que fuera capas de escribir un carta tan elegante. 

Lo único que tendría que hacer es ir al lugar que indicaba la carta y así podría aclarar sus dudas, y qué tal si se trataba de una mentira, a pesar de ese beso que había recibido de Pacifica, Dipper tenía el corazón lleno de dudas. 

El castaño comenzó a meditarlo en su mente, al ir al muelle no perdería nada. 

Sin más que hacer se armó de valor para ir, entrando en lo profundo del bosque, busco un sendero que el recordaba lo llevaría al lago. 

No era una aventura nada fácil, a pesar de ser de día habían partes del bosque donde la luz del sol no penetraba, si no tenía cuidado podría llegar a perderse entre los inmenso árboles de pino. 

Mientras caminaba solo iba pensado, si la carta que había recibido era real o solo una broma, si se trataba de un simple engaño lo único que Dipper tendría que hacer era dar media vuelta y volver por donde vino. 

Saber que hacer si era falsa era lo más fácil. No obstante si la carta era real la historia cambiaría. 

Si las palabras escritas en ese papel era reales y Pacifica se encontraba en el muelle esperándolo, ¿como reaccionaria? 

El último roce que tuvieron no fue exactamente una saludo de amigos, ni siquiera se acercó a ser una confección apropiada pues los sucesos eran todavía confusos. 

Dipper todavía no sabía bien si Pacifica sentía algo por el, si llegaba a tener la oportunidad de encontrarla de nuevo esa sería su oportunidad de aclarar las cosas, aquel roce fue simplemente confuso y sin sentido. 




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.