Capitulo 34

Perdonar.

Es difícil ¿cierto? Una de las cosas más dificiles para la raza humana. Las personas tienden a quedarse con rencor y solo se hacen daño a sí mismos pensando en esa persona que les lastimó y ninguna de esas personas vale la pena. Así que sí, perdonar es difícil pero algo necesario si quieres ser libre y poder seguir con tu vida. 

-Si, estas perdonado- Exclamo sin más con una sonrisa

Él me devuelve la sonrisa y me abraza.

-Lo siento, no fue mi intención hacerte daño- Murmuró 

Nos separamos y yo asentí a su disculpa.

-Te voy a extrañar, Brown- Sus ojos tenían un brillo de tristeza a pesar de que sonreía al decir esto

-Bueno yo no tanto, Wilson- El sarcasmo era evidente en mi voz a lo que ambos sonreimos.

El silencio reinó por unos segundos hasta que la voz de su padre interrumpió diciendo que tenían que irse. Cole se levanto de mi lado.

-Supongo que... hasta luego?-Balbuceó poco seguro a lo que yo le dí una sonrisa

-Adiós- Agrege

Él asintió con una sonrisa pero el dolor siendo evidente en sus ojos.

-Adiós- Musitó de manera casi inaudible - Ah y feliz año nuevo, Miranda-

Después de esto se dio la vuelta y se subio en el auto para irse. El doctor Wilson se despidió de mi y yo respondí con una sonrisa para a continuación ver el auto alejarse lejos. 

Pero creo que estan perdidos, así que los pondre al día con la situación.

Después de estar en el hospital en navidad regrese a mi casa con mis padres más sobreprotectores que nunca. Estaban al tanto de todo lo que hacía y si comía bien, claro ahora tengo una dieta más alta en hierro. Noah y Josh se pasaban los días llegando a mi casa para ver si estaba bien y mi amigas me llamaban todos los días. Entiendo su preocupación pero ¡No me estoy muriendo! ¡Por Dios!

 Así hasta que llego el ultimo día del año, osea hoy.

Mi día comenzó con una mañana normal. Desperté, tomé una ducha y baje a desayunar, mi madre como siempre vigilandome mientras comía. También estaba un poco ocupada con todos los preparativos para esa noche, ya que como saben mi familia es aficionada a las festividades. Esta vez no vendrían Noah y Josh pero claro que nos veriamos al día siguiente para festejar el nuevo año. 

Mi padre entró a la cocina donde yo desayunaba en la barra y nos dió los buenos días.

-Hoy se van los vecinos de a lado- Le comentó a mi madre mientras se preparaba un café

Mi atención se centro en su conversación.

''Cole es mi vecino de a lado."

-Los Wilson ¿cierto? Nunca pudimos darles la bienvenida- Expresó mi madre apenada 

-Al parecer el Dr. Wilson es el vecino y creo se van porque tiene una propuesta nueva de trabajo- 

-Oh esa si que es una sorpresa pero bueno, sabiamos que no se quedarían mucho tiempo- Agregó mi madre

Yo ya ni siquiera prestaba atención a la comida delante de mi y mi madre se dió cuenta. -Come Miranda- Reprendió

Yo volví a la comida y la terminé ya que mis padres no volvieron a hablar sobre los vecinos y su mudanza.

Entonces Cole Wilson se iba a ir de la ciudad. No me lo esperaba. No es que Cole hubiera sido muy importante para mi, pero fue mi amigo por un tiempo...

<<Solo por una semana, Miranda>>  Me recordó mi subconciente.

Cierto, solo fue una semana pero en mi defensa la semana se sintió muy larga y no muchas personas tratan de entablar una amistad conmigo así que Cole por ese y otros motivos es difícil de olvidar.

Regrese a mi habitación a leer algun libro ya que no había nada más que hacer, pero la verdad la curiosidad me carcomía por dentro. Quería ver si los vecinos en verdad se iban. 

                                  º          º          º

Decidí hacer otra cosa hasta la tarde. Mis amigas llamaron como todos los días y les conte sobre la mudanza de Cole.

-Pues que bien que se van, ese hijo de...-

-¡Denis!- La reprendí

-Lo siento- Dijó con una risilla -Pero él te hizo daño, así que...-

-Si, así que, que bueno que se van- Agregó Ale 

-Debería perdonarlo- Exclamé en forma de susurro

-No no no y no. Yo no lo hubiera perdonado nunca, le habría dado con la silla al verlo con la mesera esa- Espetó Denis a lo que yo reí incomoda

-Bueno es tu desición- Me comunicó Ale 

Después de hablar un rato me despedí de ellas y corte.

Bueno esa conversación si que desperto mi curiosidad por salir a ver aún mas. 

"La curiosidad mato al gato"

Suerte que no soy un gato, sino ya estaría bien muerta.

Salí de la casa y me sente en los pequeños escalones de mi puerta, mientras cubría mi cara con un libro. No podía evitar levantar la mirada de vez en cuando para ver a los Wilson preparandose para irse.

Así que en verdad se van. Interesante, muy interesante.

El Doctor Wilson me vió y se acercó a saludarme.

-Wow Miranda, no sabía que eras nuestra vecina, que agradable sorpresa- Exclamó alegre

-Si, una agradable sorpresa- Comenté sin saber que más decir

Él siguió hablando y me dijo algo sobre que me cuidara y otras cosas pero deje de escucharlo en el momento en que vi a el chico rubio saliendo de la casa a mi lado cargando algunas cosas. La sensación de nervios me invadió. Hace mucho que no lo veía. Había intentado contactarme pero al pedirle que no lo hiciera respeto mi petición.

Estaba igual que siempre. Su cabello rubio algo despeinado, una camisa negra y unos vaqueros con sus tenis converse iguales a los míos, mordía su labio inferior debido al esfuerzo de cargar lo que sea que tuviera en los brazos.

Cole no me vió, dejó lo que llevaba en brazos y volvió a entrar a su casa.