Capítulo cinco

– Guapa ¿Quién es? – La voz de Franco se escucha cerca y por mi parte no sale ninguna palabra – Guapa – Franco sale y se pone enfrente de mí y me toma de la cara sin importarle quien esta en la entrada  –  Hola amigo – Franco voltea y la sonrisa se esfuma 

– ¿Ángel? ¿Qué haces aquí? – Ángel pasa y comienza a mirar la casa con detalle, y con precisión – Vine por un trabajo, creí que viniendo aquí dejaría atrás el pasado – Voltea y me mira poniéndome nerviosa 

– Y ¿Y ya tienes donde quedarte? – Niega y mira mis manos asiéndome recordar que traigo la alianza a lo que rápido la escondo  

– Pues puedes quedarte aquí, hay habitaciones de sobra en  esta casa  

– ¿No le molestará a tu esposa? – Franco me mira y quiero que en estos momentos me trague el piso, Ángel esta mal interpretando todo – No, no creó que le vaya a molestar porque...

– Entonces me quedo – Ángel interrumpe a Franco y decido retirarme a la cocina donde comienzo a respirar lentamente tranquilizándome  

– Lo ha mal interpretado todo – Me doy medía vuelta y veo a Franco – Yo creo que mejor me voy  

– No espera, la cena ya casi esta y se que si te vas tú no comerás nada – Recargo mi cabeza en la pared y salgo de la cocina en dirección al cuarto de Franco donde apenas cruzo la puerta y me voy directo a la cama 

Escucho pasos y no le tomo importancia cierro mis ojos y escucho como abren la puerta – Fran ¿Tienes alguna pastilla para el dolor de cabeza? – No escucho contestación alguna por lo que me levanto de la cama y recargado en la puerta miro a Ángel  

– Pensé que era mi imaginación la que había creado una historia falsa ¿Realmente estas casada con el ex de tu mamá? – Voy a donde Franco tiene los medicamentos y tomo una pastilla, me muevo atreves de la habitación para tomar un poco de agua del jarrón que franco siempre ha tenido y me paso la pastilla  

– No lo puedo creer ¿Tú fuiste la razón por la cuál se separaron? – Empuño mi mano pero no le contesto – Vaya no puedo creerlo  

– ¿Ya terminaste? – Digo señalando la puerta – No puedo creer esto, realmente no puedo – Ángel se mueve un poco quitándose de la puerta y aprovecho para salir de la habitación chocando con Franco  

– ¿Esto es real Franco? ¿Estas con la hija de tú ex? – Miro a Franco y niego – No, no estamos juntos si es lo que te duele – Bajo las escaleras y abro la puerta principal  

– Espera Bell – Escucho los pasos de Franco acercándose a mi – Quien lo diría, el gran Franco Con su ex hijastra  

– Ángel ya por favor – Volteo a ver a Ángel y me mira con coraje, con odio – Te dije que si me compraba un anillo parecido a la alianza nadie se daría cuenta -Volteo a ver a Franco – Cuantos no han pensado que estamos casado – Salgo de la casa y voy a la mía  

En el resto de la noche no salí de mi habitación, Franco me marcó infinidades de veces y ninguna le conteste, volteo a ver mi reloj y marcan las 2 al final decido no salir de casa 

… 

– Señorita Müller retírese de mi clase – Tomo mis cosas y salgo de la clase, esta es la 3er clase de donde me sacan, en todas las clases me quedo dormida  

– Amiga ¿Estas bien? – Lizi se sienta frente a mi y levanto la cabeza para verla – No, no he podido dormir, los exámenes de la otra escuela son pronto y son los más importantes, tengo que viajar a México a realizarlos, sabes, estuve a punto de dejar la escuela para venir a estudiar aquí pero lo bueno es que mis profesores me ayudaron  

– Ay amiga, ¿Entonces tienes que irte? – Asiento – Bueno amiga, tenemos que ir a Alemán – Me levanto a como puedo y nos vamos a esa clase 

Al entrar la directora esta sentada en el escritorio y nos pide que tomemos nuestro asiento – ¿Qué nos dirá? ¿Habrá pasado algo? – Lizi me pregunta en voz baja y alzo mis hombros 

– Algunos ya sabrán el rumor de que la profesora de alemán renunció entonces yo vengo a confirmarles el rumor, antes de que comiencen a estar hablando les vengo a decir que ya tenemos profesor, sabemos que ya están avanzados y no pueden perder este curso, por lo tanto – Comienza a caminar con dirección hacia la puerta y yo me recargo en el mesabanco  

– ¿Quiero presentarles a su nuevo profesor Ángel Schüler – Digo tratando de arremedar la voz de la directora acertando en el nombre, no me molesto en levantar la mirada simplemente cierro mis ojos  

– Él será  su nuevo profesor de alemán – Todos comienzan aplaudir y yo no hago el mínimo intento – Bueno los dejo con su profesor para que se presenten y Bell no te duermas en esta clase por favor – Levanto mi cabeza y me encuentro con la mirada de Ángel  

– Señora directora necesito hablar con usted – Me hace una seña para que salga con ella y me levanto rápido saliendo del salón  

– ¿Qué pasa Isabell? Sabes que si el director se entera te regañara – Recargo mi cabeza en la pared y dejo salir un bufido  

– Mañana tengo que ir a México a presentar exámenes, como son los últimos son los mas importantes, ya hable con mis profesores y me dijeron que no podían ser virtuales por lo tanto tengo que ir

– ¿Y no sabes como hacerle con esta carrera? – Asiento – Exacto – Ella me mira y me sonríe - Te doy el permiso, solo que en el tiempo que no estés se hará virtual ¿Te parece? – Asiento feliz y la abrazo  
– No sabe que tan feliz me hace – Me separo de ella y entro feliz a la clase 

~La directora ya me dio permiso, solo que tendré clases  virtuales en lo que hago los exámenes ~ 

-Me parece magnífico amiga- 

~¿Qué hacen?~ 

-Poniendo en línea al profesor, por cierto esta muy guapo-  

Sonrió ante el comentario y ya no contesto, pongo atención mirando cuaderno evitando así las miradas de Ángel