Enamorada de un zorro 2 | Saga: Kitsune

CHP 14

 

 

Evan

—¿Y qué paso después? –Pregunto Jin totalmente interesado por la historia de Sans.

—Ambos murieron a manos del supremo y unos años después reencarnaron y se volvieron a conocer, ella como un hada y el cómo un elfo. La última reencarnación que recuerdo de ellos es de el cómo un demonio y ella como un ángel –Dice Sans.

—¿Y dónde están ellos ahora? ¿En qué reencarnaron esta vez? –Dice Jin y me empiezo a poner nervioso, no conocía ese lado de la historia. Me muevo incómodo y Phoebe lo nota, ella sabe lo que estoy pensando.

—Ellos aún no han reencarnado –Digo y todos voltean a verme.

—¿Sabías la historia? –Dice Jin –¿Y cómo sabes que no han reencarnado?

—La historia esta inconclusa –Interfiere Phoebe –Samael y Micaela reencarnaron miles de veces hasta que nací yo, me encomendaron detener su reencarnación y eso hice, pero no quería desperdiciar la sangre de dos leyendas como ellos así que los enfrasque y los guarde en lo profundo de mi bodega. –Todos se quedan mirándola intrigantes —Creo que es tiempo de que les digas la verdad –Me dice y me tenso enseguida. Lorrein me mira confundida y se acerca cautelosa a mí.

—¿Que verdad Evan? –Trago en seco al ver su rostro enojado.

—Hace años me contaron que lo que contenían esos frascos me haría más poderoso así que le robe esos frascos a Phoebe y termine maldito.

—¿Maldito por qué? –Dijo Lorrein mientras aun me miraba enojada, estaba que lloraba.

—Bebí ambos frascos y ahora tengo en mi interior la esencia de ambos ángeles. Cuando pierdo el control es Samael el que toma posesión de mi cuerpo –Dije cabizbajo.

—En pocas palabras Evan es un Titán –Dijo Juanjo, Lorrein se tapó la boca del asombro y empezó a llorar, me alarme enseguida y la abrace con fuerza impidiendo que se aleje de mí.

—Evan… —Trato de alejarse de mí, pero la apreté aún más.

—Nena, he estado casi toda mi vida solo, perdí a mi familia y a mi mejor amigo, no te quiero perder a ti también –Ella se relajó en mi pecho y enrollo sus brazos en mi cintura –¿Recuerdas aquella vez en el lago que te conté que estoy maldito?

Ella asintió y se separó un poco para mirarme a los ojos

—Te juro que quería decírtelo todo, pero pensé que pasaría esto mismo, no quería que te alejaras de mi…Te amo Loraine, eres la única mujer que he amado en mi vida y que siempre amare.

Ella me mira unos segundos, hasta que pone sus manos en mi pecho como si estuviera escuchando los latidos de mi corazón.

—Yo también te amo con locura, te dije que lucharíamos juntos contra tu maldición y eso haremos –La tome del rostro y la bese como nunca antes lo había hecho, disfrute sus dulces labios sobre los míos, pero nos separamos por el gruñido de alguien a mis espaldas.

Volteé aun con Lorrein en mis brazos y vi a Sans mirándome mal. Lorrein y yo reímos por la reacción de él, ya se está comportando como todo un papa sobreprotector.

—Todo bien suegro? –Le apareció un tic en el ojo y todos reímos a carcajadas.

—Te mataría, pero amo a mi hija y a mi nieto –Dijo luego de que todos cesáramos las risas.

—Venga ya, yo sé que me amás suegrito.

—Basta ya –Refunfuño y me eche a reír a carcajadas.

—En conclusión, a todo eso, Evanora es una de los demonios que escapo del inframundo hace billones de años, no sabemos cómo, pero vino al futuro a destruir a Samael, en este caso Evan –Dijo Phoebe.

—¿Y qué podemos hacer? –Dijo el abuelo

—Tendremos que encargarnos de este problema nosotros, si le comunicamos la situación a los arcángeles lo más seguro es que vengan por ustedes –Nos señala a Lorrein y a mí –Y los maten. La verdad es que no me importa que pase con Evan, pero Loraine es mi hija y la protegeré hasta la muerte.

—Voy a hacer como que no dijiste eso –Dije y todos rieron.

—Y a todo esto ¿Dónde está Evanora y Leiko? –Dijo Jin.

—Escaparon antes de que las matara, no pueden huir nosotros tenemos lo que ellas necesitan y vendrán por el de alguna manera—Dice Sans.

—¿A qué te refieres papa?

—Evanora quiere a Daiki…

—¡¿Qué?! –Gritamos todos al mismo tiempo

—¿Por qué habrá de querer a mi hijo? –Dije confuso

—Como les dije, su hijo no es humano, pero tampoco es un ser sobrenatural, tengo una idea loca de lo que podría ser, pero no me atrevo a creerlo aún.

—Phoebe… ¿Que es Daiki? –Dijo Lorrein suplicándole con la mirada.

—Creo que Daiki es…un Shinigami…

 

 

 

Loraine

—Solo es una teoría, no estoy segura aun –Dice Phoebe.

—Maldición, no puedes soltar algo así y no dar explicaciones –Dice Evan preocupado.

—Phoebe por favor dinos más –Le pido y ella me mira indecisa.

—Está bien –Suelta un suspiro— Pienso que es un Shinigami por que la sangre de Samael corre por sus venas, Samael fue el primer rey del inframundo, tuvo muchos nombres y uno de ellos era Shinigami. Puede ser solo una estupidez de mi parte, pero creo que pudo ser eso —Gruñe—Quiere los poderes de Daiki para abrir un portal al inframundo y traer de vuelta a los primeros demonios que trajo Samael a la tierra…

—No debemos preocuparnos por eso ahora –Dice mi padre. –Los poderes del niño llevan sellados desde que nació, así que no tendremos problema con eso ahora.

—No lo creo… —Dice Devon –El niño tiene un aura fuerte, lo note en cuanto lo vi, solo digo que puede que sea cierto lo que dice la bruja.

—No importa, más tarde reforzare la barrera, ahora vamos a descansar, mañana pensaremos en una forma de atraer a Evanora.

Todos asentimos y el ángel de antes regresa con Daiki y el viene corriendo hacia mi

—¡Mami! –Lo alzo y lo abrazo fuertemente.

—Mi niño como te extrañe ¿Estas bien cierto? –Pregunto mientras acaricio su cabeza.

—Si madre, de no ser por mi ángel guardián no sé qué hubiese pasado –Dice y miro a Evan con complicidad.




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