10. Shinigami

La verdadera competencia debe ser con uno mismo…

El hombre encapuchado desciende del cielo hacia nosotros. Yune le gruñe y mi primera reacción es retroceder dos pasos.

-¡La familia Romo! ¿Cómo están? –Sonríe aún más y noto que todos sus dientes son puntiagudos.

Nadie dice nada, todos están callados viendo al tipo que nos salvó. Mama y el tío Zayn lo miran confundidos mientras que el abuelo parece estar molesto.

-¿Que eres? –Digo al ver que nadie habla.

-Dices “Que” y no “Quien” Chica lista –Ríe. –Yo soy un Shinigami. No uno que los viene a llevar al otro mundo, debería ser así pero lastimosamente no -ríe.

-Es amigo se la familia -Dice mama de repente.

-¡Oh Juanjo! ¡Qué viejo te ves! –Ríe y le da una palmada en la espalda.

-¡Este viejo pero aún puedo patearte el trasero! –Lo fulmina con la mirada y el Shinigami suelta una carcajada.

-¡Eso dices! –De repente se queda viendo a Takemikazuchi fijamente –Quienes son estas almas en pena? –Se esfuma en el aire y aparece frente a Evan y lo examina con cuidado.

-Ella es Loraine mi hija y él es Evan su Kitsune protector –Dice mama y el Shinigami nos mira curioso a ambos.

-Mi nombre es Wolf… ¿Oigan podemos luchar? –Sonríe un poco siniestro.

-Emmm está bien –Dice Evan y despliega sus colas, yo me aparto junto con mama y el abuelo.

-¿Eh? Yo me refería a que los dos peleen contra mí. Ven aquí Loraine –Dice y se ríe.

-Ella no va a pelear –Dice Evan con el ceño fruncido.

-No te estoy preguntando zorro –Dice y Evan lo fulmina con la mirada.

Tome mi espada y me acerque a Evan, Wolf fue el primero en atacar, ambos esquivamos el ataque, Evan lanzo esferas negras de sus colas y yo lance rayos con mi espada.

El no esquivo el ataque de los dos, ambos le dieron de frente y me asuste, una nube de humo me impedía verlo. Cuando el humo se disipo un poco, logre ver la sonrisa siniestra de Wolf y para mi sorpresa no tenía ni un solo rasguño.

De repente entre el humo sus ojos morados brillaron produciéndome escalofríos. Tomo su guadaña, me puse en defensa y en menos de lo que canta un gallo lo tenía en frente de mí con su guadaña en mi garganta, mirándome como un desquiciado.

Evan se acerca tratando de detenerlo pero él es más rápido, una sombra gigante aparece y cubre su cuerpo haciendo que no pueda moverse.

Wolf aprieta más su guadaña en mi cuello y hace que una gota de sangre salga de esta, en sus ojos morados para un brillo de asombro, Evan al ver la sangre se alteró y sus ojos se volvieron de color rojo y aparecen de nuevo las marcas en su cuerpo.

Se deshace fácilmente de la sombra y va a por Wolf. Se aleja de mí y empieza a luchar con Evan, para sorpresa de todos Evan le está haciendo frente a Wolf.

Wolf sonríe siniestramente, levanta un poco su guadaña y en segundos Evan está en el suelo inconsciente.

-Está bien, ya terminamos –Dice Wolf, corro hacia a Evan preocupada.

-¡Evan! ¿Estás bien? –Digo y lo tomo entre mis brazos.

-Tranquila…!Ugh!...Estoy bien Lorrein –Sonrió calmada y lo ayudo a ponerse de pie. Wolf nos ve de una manera interrogativa, como si sospechara algo.

-El hilo del destino los ata. –Dice viendo nuestras manos.

-¿por qué lo dices? –Dice mamá.

-Por nada –Sonríe y de la nada se desvanece en el aire.

¿De que hablara? Ya que, lo importante ahora es Evan, lo llevo a su habitación y lo recuesto en la cama, curo sus heridas y al rato se queda dormido.

Al día siguiente Wolf seguía en la casa cosa que me pareció raro, pensé que no estaría aquí después de lo de ayer.

Evan y yo seguimos con los entrenamientos, luego de eso Mama y Evan arreglaron el templo DE NUEVO

Esta vez  me quede viendo como arreglaban el templo, las heridas de Evan no se han curado aun, normalmente sus heridas se curan en segundos pero estas no han sanado casi nada desde ayer y me preocupa que se abra alguna en un mal movimiento.

Además Evan no trae camisa, tiene un cuerpo de infarto, me encantaría pasar mi lengua por su abdomen y dejar marcas en él. Evan se reía solo y murmuraba algunas cosas que no logre escuchar a distancia, solo sé que se ve muy tierno cuando sonríe. El deja lo que estaba haciendo y se acerca a mí,  su rostro quedo a pocos centímetros del mío.

-Sé que me quieres violar pero espera a que seamos pareja por los menos –ríe y me deja con la palabra en la boca de nuevo.

Así que pareja eh, ¿podría ser que él tenga sentimientos por mí? Claro que no Loraine él te dejo claro que no quiere nada contigo…idiota.

Entramos al templo y vimos a Jean quien hablaba muy cómoda con Wolf, nos saludamos y el resto de la tarde Jean y Wolf estuvieron hablando y jugando. Por mi parte me fui a jugar con Yune y la mascota de Wolf el cual también es un Bakeneko.

Me aburrí de jugar con ellos así que me dirigí a mi cuarto a dormir un poco. En el camino no paraba de pensar en Evan.