-¡Thomas! ¿¡Que estás haciendo!?- le gritó Airon entrando a la azotea con rápidez dandole un gran empujón, provocando que se alejara de la pobre chica.
Thomas me observa al igual que a la chica que comenzaba a levantarse del suelo sosteniéndose el cuello entre gemidos.
-No podemos dejar que salgan de aquí, esto no debió de ser visto, los humanos no deben saber de nuestra existencia- dijo Thomas levantándose.
La chica sale corriendo hacia mí con miedo- No diremos nada, solo déjanos ir- le pidió la chica con voz temblorosa.
Me doy la vuelta rápidamente hacia la puerta. Veo como este se escapa de las manos de Airon y agarra la perilla de la puerta para cerrarla, cuestión, la azotea no se puede abrir desde afuera, si la puerta se cierra te quedarás varado ahí hasta que alguien venga.
Me muevo con rápidez y pongo mi pie entre la puerta evitando que la cerrará, pero a costo de un dolor punzante en el pie por una semana seguramente, puesto que ya estaba comenzando a dolerme con tan solo el impacto.
-Deja de decir estupideces- lo mire con el ceño fruncido empujando la puerta hacia atras- Si cierras la puerta de todos modos estarás jodido, si tú y Airon quedan aquí junto a dos cuerpos serán acusados de homicidio de todos modos... No podrán salir de aquí hasta que alguien habrá la puerta- le sonrió burlona- No creo que seas tal idiota de hacerlo ahora que lo sabes, ¿O si? Tu única opción ahora es dejarnos ir, este es tu problema, no el nuestro, así que si esto te mete en problemas lo hubieras pensado dos veces antes de hacerlo.
-Aun así, no puedo dejarlas ir tan fácilmente- dijo Thomas serio.
-¡Thomas! ¡Basta!- le gritó Airon haciendo que él soltara la puerta al instante girandose hacia él.
-Airon, por favor, Si la reina se entera de esto estamos jodidos- dijo Thomas nervioso- Tenemos que hacer algo.
-Ya es tarde, ellas ya lo saben y Judy tiene razón en lo que dijo, si nos encerramos aquí estaremos jodidos, aparte de eso, tu cometiste el error en hacer esto, déjalas fuera- dijo Airon acercándose a nosotras.
-¿Enterarme de qué?- dijo una chica posandose detrás de nosotros.
-Reina- dijeron los dos tensandose casi al instante.
-¿Que hace aquí?- pregunto Airon algo asustado.
-Vuelvo a repetir, ¿Enterarme de que?- la tal reina nos mira- ¿Paso algo?- preguntó al darse cuenta que los chicos no tenían pensado hablar.
Agarro a la chica de la muñeca haciendo que soltara todo el aire que había agarrado para hablar- En lo absoluto, solo nos encontramos aquí por casualidad- le dije rápidamente haciendo que la tención de los cuerpos de ambos chicos disminuyera.
-¿Eso es verdad, Airon?- preguntó más serio haciendo que esté se tensara de nuevo.
-Es verdad- dijo rápidamente él algo nervioso.
Me acerco un poco a él y le doy una patada suave en la pierna haciendo que esté me mirara, lo miro y le hago una seña disimulada con la mano para que se tranquilizara.
-Bueno, tenemos que irnos ya- dije y la tal reina nos mira fijamente.
Agarro a la chica suavemente de la muñeca y comienzo a caminar hacia la puerta para poder entrar al instituto.
-Solo una cosa mas- me agarra del brazo, haciéndome voltear junto con la chica- ¿Pueden mostrarme sus cuellos, por favor?
Esta vez mi mirada fue penetrante, mi paciencia se había agotado hace mucho y ya no podía ocultarlo- ¿No crees que ya es suficiente?- pregunté completamente sacada de quicio, sentía claramente las venas de mi cuello marcarse por la ira que estaba sintiendo- Todos aquí comienzan a colmar mi paciencia, asi que déjenme en paz por un rato- la miro fijamente a los ojos y me acerco más a ella- Principalmente tú con tu insistencia, ya te dijimos que no paso nada, déjanos en paz- me safo de su agarre con brusquedad, provocando que sus uñas rasgaran mi piel ocasionando un leve sangrado y un pequeño dolor, sin embargo, fue en lo último que me fije- Gracias.
Al pronunciar esas palabras rápidamente, me llevo a arrastras a la chica dentro del instituto donde por fin la suelto.
-Tienes que ir a la enfermería, en las leyendas dicen que las uñas de los vampiros son muy venenosas- dijo rápidamente al ver mi brazo sangrando.
-Aaaah si, esas cosas son vampiros- suelto un suspiro pesado- Esto tiene que quedar entre nosotras, nadie puede saberlo- la miró fijamente- Si se enteran de que lo sabemos nos mataran, ya los escuchaste... Manten la boca cerrada, es por tu bien y el mío- miro su cuello- Y por desgracia, no deberias ir a la enfermería, ¿Estarás bien?
La chica se cubre el cuello con una mano y sonríe- Supongo que si, ya no está sangrando como antes.
-Bien, me voy entonces- le sonrió- Si digo que me corté con vidrios, me curarán sin preguntas- hago una mueca- Al menos que la enfermera sea una de ellos y este jodida porque sabe que no fue un vidrio.
-Ni lo menciones- me señaló con un dedo y se fue.
Airon baja rápidamente las escaleras que llevan a la azotea y observa a mi brazo con los ojos abiertos en par en par.
Veo como este toma aire para hablar pero yo me adelanto- Ya sé, ya voy- me doy media vuelta y comienzo a caminar hacia la enfermería.
-Dime algo, ¿Es cierto que las uñas de un vampiro son venenosas?- lo mire haciendo contacto visual al instante.
-¿Te asusta?- me mira fijamente y yo asiento- Si, es cierto, pero no te asustes. La enfermera es una de nosotros, y sabe perfectamente como es el carácter de la reina, así que sacará el veneno y te curar- pasa su brazo por mis hombros y me apega a él- Todo estará bien.
~~~~~~~~~~~~~
-Erica- dijo Airon entrenado rápidamente a la enfermera.
-Ay por Dios- dijo está acercándose sobresaltada- Otra vez la reina- nos miró a ambos y sonríe al verme- Todo estará bien pequeña, siéntate- señala una camilla con la mano y se va en busca de algunas cosas.
Se acerca rápidamente con unas vendas, agujas y una, ¿Intra fusión?
-Esa mujer- la enfermera me mira sorprendida- Ella no hizo nada esta vez, fui yo la que perdió la cabeza... Todo era una locura, mi paciencia había llegado a su límite y me zafe de su agarre lastimandome por accidente- mi mirada cae hacia abajo cuando siento un dolor punzante en el brazo.
Editado: 10.12.2025