Enamorada del mejor amigo de mi hermano

D I É S I S I E T E

Días después

Mis padres se habían ido a casa de mis abuelos y llegarían el lunes en la mañana por lo que me puse a hacer un pastel ya que había visto una receta super fácil, mientras buscaba y completaba todos los materiales que usaría le hice un vídeo llamada a Gabriel, mi mejor amigo, que se encontraba en Colombia por trabajo

─dime la verdad ¿estás enamorada de Alan? ─preguntó mi mejor amigo Gabriel

─no, es un buen amigo, pero no logro superar al imbécil de David o más dicho no quiero saber nada de amores por el momento, y créeme que he intentado sentir algo por Alan ─dije mientras ponía los ingredientes del pastel en la cacerola

─estas perdida sólo por ese imbécil Adara, estas dejando ir una gran oportunidad ─mascullo Gabriel

—lo sé Gabriel, pero entiende...

—¿Qué quieres que te diga? Tal vez ¿Qué no pasa nada? ¿Qué está bien que sigas ilusionada de alguien que no te quiere? Siempre has tenido a personas enamoradas de ti, sin embargo, sólo tienes los ojos para él —dijo y rodé los ojo

─vamos Gabriel, tú sabes que la superación es poco a poco ─ insistí y el negó

─entonces, lo único que te digo es que no ilusiones a Alan así como has ilusionado a otras personas ─sugirió Gabriel y asentí

─ Gabriel lo sé, no es necesario que me lo recuerdes, eso es pasado ─hable

─no lo digo solo por eso, si fueras más observadora te darías cuenta de muchas cosas ─Dijo y asentí

─ ¿Qué me estas tratando de decir?

─Algún dia lo sabrás, solo no sigas haciendo lo mismo que hizo David contigo ─pronuncio y asentí dudosa  

─Que me dirías si te digo que Alan vendrá ya mismo para ayudarme a terminar esto─ sonreí inocentemente

─ Ay Adara que hare contigo ¿Por lo menos te atrae? ─preguntó y asentí dudosa, entonces tocaron el timbre

─no me cuelgues ─lo señale y asintió

─ya me vas a cambiar ─bromeo y negué

─Imposible, tu eres único  ─grite antes de salir de la cocina hacia la puerta

─ ¿Ada como estas? ─saludo Alan entrando a casa y juntos fuimos a la cocina

─bien, ahora estoy hablando con mi mejor amigo ─dije señalando mi laptop y asintió

─ ¿Eres el mejor amigo de ella? ─pregunto Alan y el negó

─ni la conozco ─se hizo el que no me conocía y suspire pesadamente

─así vamos Gabriel ─sentencie señalándolo con un cuchillo y este rió

─mentira, la conozco desde que tiene dos años y yo seis ─me miro y me lanzo un beso y me guiño un ojo─. Pero me voy ahora así los dejo, estén tranquilos y hagan su pastel

─no te vayas ─dije mientras buscaba un mandil para Alan

─me quedo un ratito más si me lo pides, con carita de perrito regañado ─dijo

─quédate conmigo un ratito más ─grite mientras me dirigía hacia Alan y le ponía el mandil

─No me convence ─dijo y lo mire enojada

─ya bésense ─gritó Gabriel y cerro la llamada, así de tarado era

Fin de llamada

─ ¿Quién está en tu casa bonita? ─pregunto un poco incomodo por lo que acaba de decir el idiota de Gabriel

─Mis papas se han ido a casa de mis abuelos, por lo que solo estoy con mi hermano y David ─respondí y con el nombre de este último se sorprendió

─ ¿David duerme aquí en tu casa? ─Alan preguntó y asentí

─ Siempre ha sido así, últimamente pasa más en mi casa que en la de él y sí, ayer durmió aquí ─respondí restándole importancia

—Qué nivel de amistad, hermandad  y confianza —murmuró

─Bueno pero ya dejemos de hablar de ellos, mejor vamos preparando el pastel ─contesté y asentí

─prende el horno ─ordene y este fue a hacerlo

─Adara ayer no me atreví a preguntar, pero ¿te gusta David? ─ me quede estática

─un poco ─dije entre dientes

─ ¿Cómo es eso? ─se acercó─. Te pregunto porque ayer que llegué a mi casa me puse a reflexionar y aunque sé que algunas veces te he dicho que si quieres ser mi enamorada y todas esas veces me has rechazado, he sentido que solo quiero olvidar a mi ex de la que tanto te he contado, te pido una disculpa porque en fin he entendido que un clavo no saca otro clavo.

Esas palabras me sorprendieron mucho por lo que me acerque a él

— Alan gracias por decirme esto, me sentía algo mal porque siempre, no bueno, las dos veces que me habías preguntado eso yo te rechacé, pero siempre volviste a hablarme y seguir como si nada —dije y me abrazó

—Ahora si te vas a decidir a decirme si estas enamorada de David —suspire




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