Un mes después
18 de diciembre 00:01
Había pasado un mes y a esta hora precisamente me encontraba en casa de David, ya que me había escapado en pocas palabras de mi casa, para ser la primera en desearle un feliz cumpleaños
─ ¿Amor qué haces aquí? ─pregunto David saliendo de su casa confundido
─quería darte una sorpresa, feliz cumpleaños, que sigas cumpliendo muchos pero muchos años más y espero que sean a mi lado, te deseo lo mejor del mundo y que cumplas todos tus sueños, deseos y metas que te has propuesto ─lo abracé y rio.
David me acerco más a él y como siempre los besos no tardaron
─y que así sea, que vengan muchos más cumpleaños y que sean a tu lado mi amor ─dijo esbozando una sonrisa, se oía tan bonito su manera de decirme «mi amor»
─te amo ─murmure y tomo mi mano
─yo también te amo─ dijo y dejo un beso en mi mano─, ¿Quieres pasar? estamos con unos amigos a excepción de tu hermano, pero mis amigos son de la U entonces no hay riesgo de que alguien le avisé a Eithan ─pronuncio y negué
─ No me habías mencionado que estarían tus amigos, pero bueno me encantaría quedarme pero tengo que regresar a casa ─hable y asintió
─ ¿Segura? Porque por ellos no hay problema ─dijo y asentí
─ Tranquilo yo ya me voy, después de todo no quiero que piensen que solo te quiero tener conmigo, eres libre y yo no puedo quitarte tu libertad, puedes hacer lo que quieras siempre y cuando me des mi lugar
─Como vas a decir eso Ady, como te dije los chicos vinieron de improviso ─ dijo un poco nervioso y negué divertida─. Pero bueno ve a casa tranquila que es una reunión que no llegara a extremos y ten presente que tengo claro de que no quiero defraudarte ni a ti, ni a tu hermano y tampoco a mí, que me prometí no hacerte daño y eso está en pie
─está bien amor, vaya y siga disfrutando yo solo vine a traerte esto y desearte un feliz cumpleaños... ya sabes todo personal, aún tengo unas tareas para antes de que sean fechas navideñas ─pronuncié y extendí una funda de regalo─. Espero y te guste
─Gracias amor no te hubieras molestado, ¿te parece si mañana paso por ti para ir a desayunar juntos? ─propuso y asentí
─esa es una gran idea entonces te veo mañana o más dicho más luego, te amo ─le di un sonoro beso
─Si preciosa nos vemos mañana y que quede claro que yo te amo muchísimo más ─dijo y le dedique una sonrisa
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24 de diciembre
El día del cumpleaños de David prácticamente pase con él todo el dia tanto en el desayuno, el almuerzo y hasta en la noche ya que mi familia y yo habíamos ido a casa de David a cenar, también acordamos en que teníamos que decirle a mi hermano sobre la relación lo más antes posible ya que ambos queríamos andar de manera más libre sin temor a que alguien cercano nos viera.
Hoy era 24 de diciembre y habíamos quedado con las chicas desde hace una semana antes que por ser una fecha especial desayunaríamos juntas, por lo que debido a que lo habíamos planificado hace una semana se me había olvidado por completo de que ese día iba a desayunar con las chicas, por lo que me disculpe con David con el cual también tenía planes, pero mis amigas estaban primero.
─muévete, Adara ─me apuro Roberta desde la puerta con un grito
─ya voy ─salí apresuradamente detrás de ella
─ se te ha hecho costumbre de que te pasemos viendo ─murmuro Julieta
─son mis choferes personales, para que contratar chofer o aprender a manejar si las tengo ─se rieron.
Hablamos de cosas triviales, universidad y regalos que habíamos comprado hasta que llegamos a la cafetería
─ ¿Ya pensaste cuándo le dirás a tu madre por lo menos sobre la relación que tienes con David? ─pregunto Roberta y negué bostezando, había madrugado en épocas de vacaciones
─ David ya quiere decirles, incluso hemos hablamos ya con sus padres, pero yo no estoy preparada para decirle a mi familia después de que todos hablan mal de él ─dije y ellas negaron
─ Tienes que decirle pronto, eso sería lo más recomendable ─aconsejo Julieta y asentí
─ Ya será, pero les quiero comentar algo que me dijeron en la universidad ─ambas centraron su mirada en mí
─ No me digas reprobaste una materia por malas calificaciones, o estas... ─ Julieta y Roberta me miraron señalando mi abdomen
─Ustedes están locas les dije universidad, nada de lo que piensan ─rodé los ojos─. Pero en fin, lo que les tengo que decir es que tengo una beca de estudio en el extranjero, se hace valido en el tercer semestre y esa es mi gran oportunidad, ¿se acuerdan cuáles eran mi metas desde el colegio? ─pronuncie y ellas asintieron
─ Sí, que buscarías una oportunidad para estudiar en el extranjero y te quedarías a vivir en el extranjero ─respondió Julieta
─ ¿David lo sabe? ─preguntó Roberta y negué,