Un mes después
No todo es color de rosa y precisamente hoy en la mañana había discutido con David, por lo que me encontraba con un humor de perros, estas semanas habíamos tratado de solucionar la situación con mi hermano pero simplemente él no cedía, sin embargo, no me rendiría.
─podrías cambiar de cara ─reclamo Sabrina y la mire enojada
─no tengo otra, así que no confórmate con esta ─respondí y Sabrina apretó los labios
─no te desquites con nosotras por favor ─dijo Leonela y asentí de mala gana
─no me encuentro de buen humor, perdón chicas
─ahora ¿por qué discutieron? ─pregunto Sabrina y las mire
─los benditos celos ─baje la mirada mientras ellas se rieron. Como si ellas no fueran celosas
─ ¿Adara celosa?, wao eso sí que es nuevo ─se burló Leonela y me largue a reír
─ Y ¿por qué los celos? ─preguntó Sabrina
─por Paulina, ya saben volvió a aparecerse en nuestras vidas ─hice una mueca
─eso es problema amiga ─dijo Leonela muy seria
─ ¿ahora qué pasó? ─pregunto Sabrina
─no lo sé, no le deje explicar a David, solo me dijo que volvió a hablar con paulina y apenas escuche eso le colgué ─me hice la víctima y me miraron con ganas de reírse
─habla con él ─alentó Sabrina
─y si él siente aún algo por Paulina ─dije con fastidio y ellas rieron
─cómo vas a estar insegura si te ha mostrado que te ama ─ Leonela defendiendo a David
─no crees que estas exagerando bastante, digo...ya que, como nunca ha hablado con tus padres y en parte con tu hermano, les ha dicho de su relación y tú ahí como tonta sintiendo celos de paulina que a este punto donde están ustedes ya no va ni al caso ─me regaño Sabrina y asentí entre dientes aceptando que mis celos habían sido absurdos─, Además solo le estas demostrando inseguridad y aquí va mi pregunta ¿Dónde está tu amor propio?
─Aquí esta, intacto ─respondí inmediatamente─ Pero…
─Pero nada Adara, si dices que esta tu amor propio intacto, no debes dudar de ti, no debes sentirte insegura al ver a otra chica ─dijo Sabrina y asentí
─Ok, reconozco que exagere ¿Contentas?
***************
Cuando llegue a casa mi hermano estaba con David por lo que los ignore y subí a mi habitación. Mi hermano seguía enojado conmigo, pero no con David. Esa era la extraña situación. ¿Por qué con él no y conmigo sí?.
Me acosté en mi cama a pensar en la inmortalidad del cangrejo y escuché que tocaron la puerta la cual estaba semi abierta
─ ¿Adara podemos hablar? ─ preguntó David y asentí, entro a mi habitación me senté en mi cama para que él también lo haga, tenía que solucionar esta situación y no ser exagerada como me habían dicho las chicas
─ya entraste, asi que hablemos
─Mi amor... yo sé que con mi actitud de hace meses ─miro sus manos y luego a mi─. Por lo que me gustaba Paulina, hace que te sientas incómoda al saber que me escribió de nuevo, pero quiero que sepas que te amo y que Paulina es una amiga más del montón, tú eres mi novia y que no debes dudar de la persona maravillosa que eres al compárate con otras chicas ─pronuncio mientras se acercaba y tomo mi mano
─David y ¿por qué te escribió? ─pregunte y se puso nervioso, o quizás solo sea mi imaginación
─me escribió porque... porque quiso preguntarme como estaba ─pronuncio y alce una ceja mientras apretaba mis labios
─ ¿solo eso? ─incite para que me diga la verdad, luego de un rato y asintió
─si ─trato de sonar seguro
─algo me da mala espina ─me sincere y el negó mientras acariciaba suavemente mi mejilla
─amor, no podemos estar enojados solo por ella ─me quedo mirando y con solo verlo a los ojos mi corazón empezaba a acelerarse, tomo mi mano y asentí comprendiéndolo.
Por un lado tenía razón, por Paulina no podía paralizar mi felicidad
─Sabes que te amo
─ ¿Me amas mucho? ─pregunte haciendo un puchero y asintió
─Claro que sí, te amo mucho mi niña hermosa ─respondió una vez más dejando un beso en mi frente y lo abrace
─Yo también te amo nunca lo olvides y nunca lo dudes ─Hable mientras seguía recostada en su pecho y acariciaba delicadamente su espalda
─Mírame ─ordeno y le hice caso
─Hasta que por fin te encontré ─murmuro y sonreí
Luego me recosté en el hombro de él cuando se sentó a mi lado y luego de unos minutos mi hermano entro a mi habitación, acción que a los dos nos sorprendió y me levante de un solo asustada por lo que podría estar pensando mi hermano, en mi casa no era bien visto que un chico que sea "mi enamorado" este en mi habitación porque era una falta de respeto
─ ¿saben? me cuesta verlos juntos ─Pronuncio de repente mi hermano mientras se sentó en un sillón que se encontraba frente a mi cama soltando una pequeña risa y nos miramos con David