Esa tarde, cuando Jungkook y Gaby salían de la universidad juntos, el cielo empezó a nublarse. No habían caminado mucho cuando comenzó a caer una ligera llovizna, que pronto se transformó en una lluvia fuerte. Ambos corrieron a refugiarse bajo un árbol grande, riéndose mientras intentaban secarse. Gaby, sin embargo, pronto se dio cuenta de que estaban atrapados, y la lluvia no parecía amainar.
Gaby: Parece que tendremos que esperar un rato, dijo sacudiendo un poco su chaqueta mojada.
Jungkook la miraba, como si estuviera contemplando algo más allá de la situación. La observó en silencio y, de repente, le extendió su chaqueta para cubrirla mejor.
Jungkook: No quiero q te enfermes Gaby. Aqui, toma esto.
Gaby: ¿Y tu? No tienes que hacerlo, estas igual de empapado que yo, protesto con una sonrisa agradecida pero dudosa.
Jungkook: No importa, respondio mirandola con intensidad. No importa si me mojo mientras tu estes bien.
Ella sintió que algo cambiaba entre los dos, que el simple ruido de la lluvia a su alrededor parecía enfatizar el silencio que llenaba el espacio entre ellos. Alzó la vista y encontró los ojos de Jungkook, que la miraban con tanta ternura que no pudo evitar sonrojarse.
Gaby: Gracias..........siempre estas cuidando de mi, susurro conmovida
Él sonrió suavemente, y al mirarla, todo su valor acumulado durante los últimos días parecía encontrar la manera de expresarse. La lluvia seguía cayendo, pero ahora ninguno de los dos parecía notarla, completamente inmersos en el momento. Sin pensarlo mucho, Jungkook se inclinó un poco, y sus manos se encontraron en un abrazo protector, dejando que la conexión entre ellos hablara por sí sola.
Este momento bajo la lluvia sería una pausa perfecta en la historia, un espacio donde ambos sienten la cercanía emocional sin necesidad de palabras. Es un instante en el que Jungkook y Gaby exploran su vínculo, y los sentimientos entre ellos se intensifican de forma sutil pero hermosa.