La situación se torna aún más tensa y dolorosa cuando Jungkook y Gaby solo se cruzan en los pasillos de la universidad. Cada vez que él la ve, siente una necesidad urgente de acercarse, de explicarle todo lo que lleva en su corazón, de buscar la oportunidad de sanar las heridas que él mismo causó. Sin embargo, Gaby no está dispuesta a darle esa oportunidad. Aunque su corazón aún siente el peso de la preocupación y el amor por él, su orgullo y el dolor la hacen evadirlo completamente.
Un día, mientras Jungkook caminaba hacia su aula, ve a lo lejos a Gaby. Ella está conversando con algunas amigas, pero el simple hecho de verla provoca que su pecho se apriete. Decide acercarse, sin importarle la gente a su alrededor, con la esperanza de que, al menos, puedan hablar, aclarar las cosas. Pero, al acercarse, Gaby lo nota y, de inmediato, cambia su rumbo, evitando que él la alcance.
Jungkook se detiene, herido, pero no se rinde. La sigue con la mirada mientras ella se aleja rápidamente. "Gaby..." murmura en voz baja, pero ella ya ha dado vuelta en la esquina.
Él se queda allí, parado, sintiendo cómo el peso de la situación lo consume. "¿Por qué me sigue evitando?," piensa. "¿Qué más puedo hacer?" La pregunta lo atormenta, ya que siente que ha hecho todo lo posible, pero nada parece ser suficiente para que ella lo mire o lo escuche.
Cada vez que la ve, su corazón late más rápido, pero también se siente impotente. Las veces que ha intentado hablarle, Gaby lo ha esquivado con una excusa o simplemente lo ha ignorado por completo. Los amigos de ambos lo notan, y aunque tratan de ser comprensivos, no pueden evitar ver el sufrimiento de Jungkook.
Por su parte, Gaby está igualmente sumida en su propio conflicto emocional. Aunque sus sentimientos hacia Jungkook siguen intactos, no puede quitarse de la cabeza lo que vio entre él y Seoyoon, y cómo se sintió despreciada y vulnerable. "No puedo seguir así," se repite, "No puedo seguir dejándome arrastrar por él sin pensar en lo que me hizo sentir." El dolor de ver a Jungkook con Seoyoon la marcó más de lo que ella quisiera admitir.
Ella sabe que aún lo ama, pero el miedo a ser herida de nuevo la hace construir una barrera emocional. "Tal vez si lo evito, tal vez si no le doy ni un segundo de mi tiempo, entonces el dolor disminuirá," piensa, tratando de convencerse de que el distanciamiento es la única forma de protegerse. Pero, en su interior, sabe que cada vez que se aleja de él, también se aleja de lo que más quiere.
Una tarde, después de otro de estos encuentros fugaces y dolorosos, Jungkook finalmente decide ir a buscarla, dispuesto a enfrentar el silencio que ella le impone. La encuentra en el jardín de la universidad, sola, sentada en una banca, mirando al horizonte.
Jungkook: Gaby, dice con voz suave pero llena de sinceridad, mientras se aproxima a ella. Se que me has estado evitando, y quiero que sepas que lo siento........lo siento mucho por lo que paso.
Gaby no lo mira. Ella sabe que tiene que responder, que debe ser firme en sus decisiones, pero el dolor es tan fuerte que sus palabras no salen con claridad.
Gaby: No me busques, Jungkook. Su voz es más fría de lo que ella quisiera.Ya te dije todo lo que tenia que decir. Ya no se ni que esperar de ti.
Jungkook se detiene, sorprendido por la dureza de sus palabras. Su corazón se hunde al ver que ni siquiera le da la oportunidad de explicar lo que siente.
Jungkook: Gaby, por favor......intenta insistir, pero ella lo interrumpe
Gaby: No, Jungkook. dice ella, levantándose lentamente. Ya no quiero escuchar mas promesas vacias. Ya no quiero que me busques si no eres capaz de entender lo que hice por ti.....lo que tu me hiciste sentir.
El dolor en su voz es claro, y eso golpea a Jungkook como un puño en el pecho. Él no puede responder. No hay palabras suficientes para arreglar lo que ha roto, pero siente cómo se le quiebra el alma al ver que no tiene ni siquiera la oportunidad de luchar por lo que quiere. "Lo siento tanto," murmura, pero Gaby ya se ha alejado, dejándolo allí, solo en el jardín.
Gaby sigue caminando con rapidez, evitando que sus lágrimas se derramen. Dentro de ella, una batalla feroz se libra entre el amor que aún siente por él y la necesidad de protegerse, de evitar sufrir nuevamente. "No quiero que me vuelva a herir," piensa, pero a medida que se aleja, el vacío que siente también crece. Ella sabe que este dolor, aunque necesario para sanar, no se irá fácilmente.
Jungkook, por su parte, se queda parado allí, sintiendo cómo la tristeza lo consume. Sabe que, por mucho que lo intente, ahora solo puede esperar, porque lo único que puede hacer por ella es darle el espacio que necesita.
Ambos se alejan, pero no pueden dejar de pensar en el otro. La distancia emocional se va haciendo más grande, pero también es la única manera de que ambos puedan encontrar, con el tiempo, la forma de sanar.
Han pasado días llenos de silencio y distanciamiento, tanto para Jungkook como para Gaby. La ansiedad y la tristeza se han instalado en los corazones de ambos, pero el orgullo y el dolor parecen hacerles más difícil el reencuentro. Jungkook ya no sabe qué más hacer; se siente agotado, como si su esfuerzo por acercarse y demostrar lo que siente fuera en vano. El amor y la angustia lo devoran por dentro.
Un día, después de tanto tiempo sin hablarse, Jungkook decide que ya no puede seguir así, sin hacer nada. Sabe que está corriendo el riesgo de perderla, pero si no hace algo, su relación quedará en el aire para siempre. Le envía un mensaje a Gaby, pidiéndole que se vean en el lugar donde todo comenzó, en el jardín de la universidad, el mismo lugar donde compartieron momentos importantes.
Gaby, aún con su corazón lleno de dudas y heridas, acepta, aunque no sabe qué esperar. Aún siente miedo de enfrentarse a la situación, pero sabe que no puede seguir evadiéndolo por más tiempo.