La Noticia que Cambiaría sus Vidas
Una mañana tranquila, Gaby se encontraba en la cocina preparando el desayuno. Sin embargo, llevaba días sintiendo cambios en su cuerpo: mareos, náuseas matutinas y una inexplicable sensación de cansancio. Algo en el fondo de su corazón le decía que su vida estaba a punto de cambiar.
Decidida a aclarar sus sospechas, Gaby fue al baño, donde había dejado una prueba de embarazo que compró el día anterior. Con nerviosismo y esperanza, realizó la prueba. Al cabo de unos minutos, el resultado apareció: positivo.
Horas más tarde, cuando Jungkook llegó a casa, Gaby lo esperaba en la sala con una mezcla de emoción y nervios. Él notó enseguida que algo era diferente.
Jungkook, con una sonrisa curiosa: ¿Qué pasa, amor? Tienes una cara que no puedo descifrar.
Gaby respiró hondo, sosteniendo la prueba en sus manos.
Gaby: Jungkook... Hay algo importante que debo decirte.
Jungkook se acercó, su expresión se volvió seria pero llena de atención.
Gaby, con los ojos brillantes y una leve sonrisa: Me hice una prueba de embarazo esta mañana... y salió positiva. Vamos a ser padres.
Por un momento, Jungkook se quedó en silencio, asimilando las palabras. Luego, su rostro se iluminó con una felicidad indescriptible. Sus ojos se llenaron de lágrimas mientras abrazaba a Gaby con fuerza.
Jungkook, emocionado: ¿De verdad? ¡Vamos a tener un bebé! Esto es... es lo mejor que podría pasar. Gaby, ¡no sabes lo feliz que me haces!
Gaby, entre risas y lágrimas, lo abrazó de vuelta.
Gaby: Estaba nerviosa, pero al verte tan feliz... siento que todo estará bien. Sé que serás un padre increíble.
Esa noche, mientras ambos estaban acostados, comenzaron a soñar juntos sobre el futuro.
Jungkook, acariciando suavemente el vientre de Gaby: ¿Te imaginas cómo será? ¿Si será niño o niña? No importa, ya lo amo tanto.
Gaby, sonriendo: Lo más importante es que crecerá en un hogar lleno de amor. No importa lo que venga, estaremos juntos en esto.
Jungkook tomó la mano de Gaby y la besó con ternura.
Jungkook: Gracias por darme este regalo tan maravilloso. Te amo más que nunca.
La noticia del embarazo no solo llenó sus corazones de felicidad, sino que también marcó el comienzo de una nueva etapa en sus vidas, una en la que enfrentarían cada desafío juntos, con amor y determinación.
Era una noche tranquila. Gaby y Jungkook estaban acurrucados en el sofá de su nueva casa, con las luces tenues y el sonido del viento susurrando fuera. Ambos disfrutaban del silencio, hasta que Gaby, con una mirada pensativa, rompió el confort de la calma.
Gaby, con voz suave: Jungkook... hay algo que quiero decirte. Aunque todo ha sido maravilloso, a veces, me encuentro luchando con un sentimiento que creí haber superado.
Jungkook se sentó más erguido, sus ojos buscando los de ella con preocupación y ternura.
Jungkook: ¿Qué sucede, amor? Puedes decirme lo que sea.
Gaby respiró hondo y continuó.
Gaby: Desde que éramos estudiantes, siempre me esforcé por encajar, por demostrar que podía estar a tu lado sin importar las diferencias. Pero, a veces, me invade la inseguridad. Me pregunto si realmente soy lo suficientemente buena para ti, para todo lo que hemos construido juntos.
Jungkook tomó sus manos con firmeza, entrelazando sus dedos. Su mirada era seria, pero cálida.
Jungkok: Gaby, sé que has pasado por mucho. Y déjame decirte algo: eres mucho más fuerte y valiosa de lo que crees. Cada vez que veo cómo enfrentas las adversidades con valentía, me inspiras. Pero también quiero que sepas que no tienes que ser fuerte todo el tiempo. Estoy aquí para compartir tus cargas, tus miedos, y tus dudas.
Gaby, con lágrimas en los ojos, sonrió débilmente.
Gaby: Gracias, Jungkook. Pero, ¿sabes? No solo soy yo la que tiene miedos. Sé que tú también tienes cosas que te preocupan.
Jungkook asintió lentamente, bajando la mirada por un momento antes de hablar.
Jungkook, con un susurro: Tienes razón. A veces, me pregunto si seré capaz de protegerte, de mantener este hogar que hemos construido. Temo fallarte, que mis esfuerzos no sean suficientes para hacerte feliz.
Gaby, tomando su rostro entre sus manos, lo miró con una mezcla de amor y determinación.
Gaby: Jungkook, siempre me has hecho sentir amada y protegida. Pero no se trata solo de que me cuides; estamos juntos en esto. Ambos seremos fuertes por el otro, y cuando uno de nosotros se sienta débil, el otro estará ahí para sostenerlo.
Jungkook asintió, su corazón aliviado por sus palabras.
Jungkook: Tienes razón, Gaby. Siempre seremos un equipo.
Más tarde, salieron al pequeño jardín de su casa. Las estrellas brillaban en el cielo nocturno mientras se abrazaban en silencio. Jungkook levantó la mirada y luego susurró:
Jungkook: Prometo que, sin importar lo que venga, siempre enfrentaré todo contigo. No dejaré que los miedos nos detengan.
Gaby, apoyando su cabeza en su hombro: Y yo prometo que siempre confiaremos el uno en el otro. Nuestra fuerza está en cómo nos complementamos.
Ese momento marcó un nuevo capítulo en su relación, una etapa donde la vulnerabilidad no era un signo de debilidad, sino de un amor profundo y auténtico.
El tiempo había pasado rápidamente para Gaby y Jungkook, y ese día en particular era especial. La casa que compartían ya no era solo un hogar; era el reflejo de todo lo que habían construido juntos: risas, desafíos, sueños cumplidos y algunos aún por cumplir. Pero hoy, el amor que los unía se sentía aún más fuerte.
Era una noche clara y fresca. La brisa ligera acariciaba sus rostros mientras caminaban por el jardín. Habían decidido celebrar su aniversario de una manera especial, como cada año. Jungkook había planeado algo que Gaby no podría haber anticipado, algo que, en su corazón, sabía que tenía un profundo significado para ambos.