Enamorado de una Ladrona

Capitulo I

{Elaia}

*Flashback

Miedo es lo único que sentí al ver a mi madre tirada en el suelo de la sala, Derek solo lloraba mientras Alaia intentaba calmarlo acunándolo en sus brazos en ese momento veo a mi padre mal herido entrando a nuestra habitación

-ELAIA, ALAIA- espeto el -Necesito que se vayan ahora- dijo asustado

-Papa no queremos dejarte- decía Alaia sollozando -podemos luchar, tu nos entrenaste muy bien podemos hacerlo, pero no nos obligues a dejarte- dije con lagrimas en mis ojos

-No niñas esto es muy peligroso, solo váyanse y cuiden de su hermanito, sé que ustedes estarán bien- dijo papa llorando, se acerco a nosotros nos beso la frente a los tres y….

*Fin del flashback

Me levante sobresaltada por el sueño siento como lagrimas salen de mis ojos y no hago ningún esfuerzo en hacerlas parar dejo que salgan, han pasado ya muchos años y todavía recuerdo ese día he intentado enterrar ese recuerdo en el rincón de mi mente pero, tendré que vivir con eso toda mi vida, Veo la hora son las 8:30 de la mañana me dispongo a levantarme de la cama admito que este departamento no es tan grande pero es perfecto para mí, me dirijo a la cocina y comienzo a prepararme el desayuno, abro la nevera, saco un par de huevos los pongo en el mostrador mientras enciendo la estufa coloco el sartén y me dispongo a romper los huevos cuando ya están listos apago la estufa coloco los huevos en un plato agarro un tenedor y camino hacia la sala me siento en los muebles y empiezo a comer mi desayuno, enciendo la televisión voy cambiando canales hasta que me detengo en un canal de noticias

-El señor Ricardo Smith fue hallado muerto el día de hoy en su despacho por varias heridas de balas, testigos dicen a ver visto a una mujer salir de su despacho asustada y ansiosa, la policía no ha dado mas declaraciones al respecto…-

Apague la televisión, odio ver este tipo de noticias porque me recuerdan de lo que le hice a ese tipo y se lo que piensas (¿acaso fuiste tu la que lo mato?)  mi respuesta es sí…fui yo. Escuche el timbre de la puerta, reviso quien es …No! Mierda!… es Trevor, al que menos quería ver el día de hoy, es a quien veo parado en el umbral de mi puerta, se que ustedes pensaran (¿porque no lo quieres ver?) pues es simple como se sentirían al saber que tu “única amiga” fue la responsable de la muerte de su padrastro, obviamente te sentirías como la mierda, por eso no quería verlo, pero a la mierda todo!

 -Hola Trevor- intento que se oiga lo más normal posible - ¿Qué pasa? – digo de forma interrogativa, Trevor entra sin contestarme el chico castaño que estaba frente a mi estaba molesto y a la vez deprimido se veía que la noticia de la muerte de su padrastro le ha afectado mucho -Eeeeh hola? ¿Tierra llamando a Trevor? ...- el me miro soltando una risita -Mmmm…veo que ni siquiera te has bañado eeh?- dijo con una sonora carcajada, le lanzo un cojín a la cabeza y me dirijo a mi habitación, abro mi armario opte por una blusa blanca de tirantes con un short negro y chaqueta del mismo color con unos tenis blancos deportivos, deje la ropa tendida en la cama y los tenis en el suelo mientras me dirijo al baño, abro la llave y dejo que el agua corra últimamente me he sentido estresada, la Orden de control de Wesen no han llamado ni para robos, ni para matar eso es completamente extraño nunca han tardado para solicitarme pero, así es mejor, así no me preocupo tanto, salgo de la ducha con  una toalla envuelta, me dirijo a la habitación me coloco la ropa que tengo sobre mi cama y los tenis, antes de que salga de la habitación veo mi reflejo en el espejo, admito que he cambiado en los últimos años que he estado viviendo en New York, antes tenía el pelo que me llegaba por la cintura, ahora lo tengo un poco por debajo de la nuca y esta algo ondulado, también admitiré que no soy fea me veo y me siento hermosa tengo la tez blanca por mi sangre alemana aunque siempre he tenido pecas en todo mi cuerpo y rostro desde pequeña algo que  comparto con mi madre, ojos grisáceos como los de mi padre, mis labios no son tan finos pero tampoco tan gruesos y una nariz fina en pocas palabras soy la típica chica de rostro lindo pero con un carácter del demonio.

Apago la luz de mi habitación y me dirijo a la sala donde me espera Trevor

-Hey! Idiota me debes una cena esta no…- no termino la frase porque al que veo parado en mi sala no es Trevor, es el maldito excandesco francés Jasper D’ la Rossé… Mierda que querrá ahora.

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Aqui les traigo el primer capitulo espero que les guste 

Si les va gustando la historia denle a la estrellita y agreguen en sus bibliotecas 

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