Encantus. Alas de fuego (libro 3)

Capítulo 7: Mensaje

Capítulo 7:

Mensaje

 

La suspensión de las clases nos ha dado el tiempo para investigar, y lo primero que está en nuestra lista es ese símbolo que vimos en el bosque.

Shema lo ha dibujado, mi amigo tiene una memoria fotográfica. Lo ha recordado perfectamente, y yo apenas y tenía una idea de haber visto algo formado en el suelo. Estuvo unos veinte minutos tecleando frente al computador en busca de un significado, algo que podamos relacionar con la hermandad.

No encontramos mucho, el triángulo inscrito en un círculo representa el número tres, una tríada que varía dependiendo de las creencias. Para los cristianos es la representación de las tres personas, padre, hijo y espíritu santo. En Egipto hace alusión a un triángulo divido que representa a Isis, Osiris y Orus… en pocas palabras son el ayer, el hoy y el futuro. Se usa para representar el bien, todo lo contrario, a lo que hace la hermandad. Ellos tuvieron que darle algún otro significado, un uso poco acorde para lo que fue creado.

La hermandad lo está usando para adsorber la vida. No parece ser algo que se inventaran las hadas, esto de sacrificios parece ser más humano.

—¿Tienes alguna idea de cuando se fundó la hermandad? —pregunta Shema haciendo apuntes en su libreta.

Por ahora tenemos el símbolo y mi idea sobre la hermandad sacrificando hadas u otra criatura de Encantus que se encuentre aquí, entre los humanos. No es tan disparatada la idea, el pueblo ha tenido contacto con hadas desde hace muchos años. Las desapariciones de niños han sido una consecuencia de un pasado que desconocemos, y que seguramente es una cadena que sostiene la hermandad.

—No, con exactitud. Mi abuela mencionó que mi madre fue una de las hadas que formo la hermandad, pero no creo que haya sido en ese momento que nació la idea de obtener más poder. Tuvo que haber ocurrido antes, algunos años más atrás. Las hadas son criaturas de la naturaleza, cada una tiene sus responsabilidades con el mundo y los dones que le fueron otorgados, alguien externo tuvo que haber dado esa loca idea de manejar la magia de la corte oscura por todas las demás hadas —explico.

Él se da unos golpecitos en los labios con la goma del lápiz, pensativo.

—Buen punto, eso quiere decir que alguien ambicioso hizo contacto con las hadas y quería su magia, una bruja ¿quizás? —su sugerencia me parece algo tonto.

—¿Una bruja? —no creo que, en brujas, son solo historias antiguas…

—Tú eres un hada —me recuerda Shema, por un momento lo olvidé. Yo también pertenezco a los cuentos—, la idea de una bruja no es tan ilógica.

—Bien, la idea de una bruja detrás de todo esto no es tan mala. —Acepto, y tengo la impresión de que esto se complicara mucho más con una bruja sosteniendo los hilos de la hermandad, que son como marionetas. — ¿Y eso qué?, no tenemos un nombre, no tenemos una fecha de cuando comenzó… seguimos igual que al principio —digo exasperada. Esto no nos llevará a ningún lado.

—En cambio, yo creo que tenemos más información que hace unos días, solo que tu abuela se niega a dárnosla —da justo en el punto donde nos estancamos.

Mi abuela mantiene sus labios sellados, con todo y que el señor George ya le ha comentado lo que está sucediendo en el pueblo. Imagino que ella cree que si no nos involucramos la hermandad nos evitara. Ella fue un hada guerrera, ahora solo es una mujer de avanzada edad.

—Ya no sé qué hacer para que hable —admito.

En cualquier momento voy a perder la paciencia y, la abuela y yo tendremos una discusión. Una muy intensa discusión.

—Deberías insistir, no podemos esperar a que mueran más personas.

—¿Si volvemos a casa de Tony? Podríamos encontrar algo allí —sugiero.

No se me ocurre nada más que hacer, puedo intentar hablar con la abuela de nuevo, pero no estoy segura de que ceda.

—¡Claro! ¿Por qué no se nos ocurrió antes? —Da por finalizada nuestra búsqueda en internet—. Vamos de una vez. Antes de que mi padre y tu abuela regresen.

Mis hermanos no están en casa, sus clases están suspendidas y se han ido con la abuela a realizar compras. Así que, es el mejor momento para huir.

***

Ir a la casa de Tony no sirvió de mucho. Allí no quedaba nada que indicara que él y su abuela alguna vez ocuparon ese lugar. Ahora tenemos que regresar con las manos vacías. El señor George ha llamado para decir que encontraron a un muchacho en el bosque, en las mismas condiciones que los anteriores. Sus vecinos dicen que unas criaturas lo sacaron de su casa y lo arrastraron hacia el monte hasta que ya no pudieron escuchar sus gritos de auxilio, nadie se atrevió a ir por él. Todos están muy aterrados, y yo cada vez más angustiada.

La tensión que percibo de las defensas solo hace que mi angustia empeore, cada día luchan por resistir y al mismo tiempo se debilita más. Me pregunto, ¿cuánto tiempo falta para que se quiebren?, no creo que sea mucho, y eso me lleva a pensar en regresar a Encantus. Se tiene que detener a la hermandad, si quiero que mis hermanos estén a salvo, debo asegurarme que esas extrañas hadas no regresen a este mundo. Una cárcel en Encantus sería una muy buena idea para aislar a la hermandad.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.