Capitulo 88

Los pasos lentos y cansados marcaron el andar silencioso de Evie mientras caminaba entre los cuerpos llenos de sangre completamente sola, Walter había intentado llamarla un par de veces, obteniendo como respuesta la mirada vaciá de la mujer quien solo pregunto dónde estaban el resto habitantes. Ahora caminaba entre cuerpos desmembrados.

La sangre no hacía que la tierra se distinguiera, haciendo parecer el lugar como una pequeña laguna roja. A cada paso que se acercaba, plumas negras se mezclaban en el agua roja haciendo que para todos los presentes que miraban a la mujer marchar a paso desigual se hiciera más clara la profecía.

Una exhalación de sorpresa salió de sus labios al reconocer el rostro de una de las cabezas degolladas entre la tierra y el agua.

—Dy-Dylan… —susurro dejándose caer con pesadez de rodillas tocando con timidez el rostro del pequeño al cual apenas había conocido. Luciendo aún más pálido que cuando llego la primera vez al valle.

Su respiración se ralentizó haciéndola mover la cabeza desorientada.

—Evie… —a pesar de escuchar la voz en su mente sus lágrimas salieron apresuradas teniendo frente a ella el mas de cuerpos, vísceras y sangre por toda la zona.

El grito desgarrador que emitió le helo la sangre a más de uno, el sonido viajo mucho más allá de lo que muchos pensaron. Llevo una mano a su vientre y la otra a su pecho apretando con fuerza la tela mojada.

Las cálidas manos de Walter por fin la sostuvieron con cuidado mientras la escuchaba llorar y gritar por igual. Los lobos que habían cometido los crímenes estaban bajo la afilada mirada de los cuervos, así como los inconscientes brujos del bando enemigo.

Todos bajaron la mirada en respeto, habían pasado varias horas del ataque y era claro que iban a perder, las bajas fueron numerosas entre cuervos, humanos, lobos y un vampiro.

Evie comenzó a respirar de manera irregular alertando a Walter al instante tomándola en brazos corriendo hacia la salida del valle, en el preciso momento que los enviados del consejo venían llegando; Walter los ignoro, pero solo uno de ellos se fue hacia el abriéndole la puerta de la camioneta, el resto de los heridos comenzaron a aparecer haciendo que todos miraran asombrados como la mitad de pueblo había sido masacrada y los que seguían en pie eran menos de cincuenta personas, entre ellos lobos.

Todos fueron trasladados al hospital y los brujos enemigos fueron apresados aun en estado inconsciente. Las cuentas de los muertos quedo bajo el cargo de los cuervos, Isabel y Henry quien se había sanado con rapidez.

Cuando cayó la noche apenas las farolas iluminaban el lugar, el olor a sangre y muerte seguían presente; los niños y mujeres del bunker no bajaron al pueblo hasta que les llego la noticia y el listado de los fallecidos.

El caos económico y social inundo las prensas durante las siguientes semanas en toda la ciudad y el mundo sobrenatural; la principal familia aristocrática matriarcal había caído no por asuntos externos sino por avaricia y poder de los hombres dentro de la misma familia.

El consejo del valle había sido demolido y sometido a escrutinio del gran parlamento sobrenatural, dejando a muchas empresas de la ciudad completamente paradas y sometidas a escaneo para dar con los agresores de más de quince años.

Los brujos que fueron detenidos, sumado a los que arrestaron mucho antes les fueron despojados de un juicio, volviéndose así solo una sentencia en la cual se les prohibía el uso de magia, arrancándoselas desde lo más interior de su ser; muchos enloquecieron en el proceso doloroso de desprendimiento de magia, mientras que a los lobos les fue arrebatado el poder transformarse en uno, volviéndolos simples humanos.

—en cuanto a los cargos de Henry Bremoux —el anciano se quedó en silencio, mirando los papeles que sostenía y luego levantando la mirada hacia el pelirojo quien se mantenía firme en el podio. —aunque la señorita Lovelace le dio su anillo solar de buena fe y en completa confianza —volvió a hacer otra pausa. —además de su cooperación con los arrestos, deberá seguir cumpliendo con el deber de capturar incluso a los suyos, bajo las leyes de este consejo. —el juez hizo un estruendo con su mazo dando así por culminada la sentencia.

Henry Bremoux, debía pasar al menos cien años ayudando a ese consejo e incluso a nuevo que pudiera venir.

Levi Rothlow fue encontrado semanas después de su huida del valle con ayuda de Henry y Walter.

…cinco años mas tarde…