Capítulo 16 Chantaje.

4 de Diciembre de 2018.

Abigail.

—Y bien, ¿ya me vas a decir qué está pasando con Mateo o tengo que volver a sacarlos de la casa?—le dije a mi copia cuando volvió de su pequeño paseo con Mateo.

Al parecer habían llegado más enojados que nunca y solo tuve que abrirles porque comenzó a llover y Lia me estaba gritando desde afuera, si no nunca hubiera dejado que entraran. Y sí, ahora Mateo estaba muriendo de gripe y me culpaba de ello.

Yo no tengo la culpa de que los dos sean tan idiotas como para hablar civilizadamente sobre sus sentimientos. Par de babosos.

—No hay nada que esté pasando, siempre nos hemos llevado mal solo que ahora se intensificó—mentía.

No eran mejores amigos pero al menos sí eran buenos amigos. Los tres habíamos estado juntos desde que íbamos en preescolar. No puede engañarme tan fácil.

—Aja... mira, ¿cómo te explico que Mateo y tú son como la misma persona?—me miró confundida sentándose a lado de mí. Solo así podía llamar su atención al parecer ya que ella odia esa comparación. Pero no soy la única que lo opina.

—¿A qué te refieres?—claro que ahora se hacía la cínica para desviar el tema. Casi tan inteligente como yo.

—¡Los dos son idénticos! En muchas cosas en serio lo son. Y cualquiera diría que por eso se llevan mal pero no habían tenido ni un solo problema desde que nos conocemos. Incluso Jorge me ha dicho que solían poder estar en un lugar sin matarse.

Jorge es mi primo, uno de los tres idiotas que vive con Lia.

—No lo somos, él es estúpido y yo, pues soy yo—dijo parándose frente a la ventana.

A veces me desespera que cuando quieres entablar una conversación seria con Lia ella tiene que desplazarse por cada rincón de la habitación y adivinen que: Mateo también lo hace. Me imagino sus discusiones tipo una maratón por todo el lugar donde están hablando.

Deberá de ser algo mareado verlos discutir cuando al fin decidan tener una relación, je je.

—¿En serio nunca me vas a decir lo que está pasando? digo, soy tu hermana y merezco apoyarte en estas cosas. Tú sabes todo lo de Daniel y nunca temí que me criticaras—esperaba que mi chantaje funcionara.

Soy buena chantajeando a mi copia, ayuda mucho que prácticamente tengamos la misma cara. Solo yo puedo convencerla de hacer cosas y viceversa, claro que a veces falla.

—No es el temor a la crítica, es solo que...—se quedó pensando que decir y luego volteó hacia mí. Bingo—. Las cosas cambiaron mucho cuando te fuiste.

—Cuéntame—ella suspiró y antes de comenzar abrió la puerta y vio que nadie estuviera por ahí. A Mateo le encantaba escuchar conversaciones privadas.

—Cuando te fuiste y yo me fui a vivir con mis tíos perdí mucho contacto con Mateo. Usualmente hablábamos pero no cómo antes, más a causa de su novia y que yo estaba más tiempo con los tres idiotas. Incluso él ya no estaba tanto tiempo con ellos.

»Luego su ex novia comenzó a salir con Ray, mi estúpido sexy ex novio favorito. Pero ella quería estar en una relación con los dos a lo que Mateo se negó y Ray no tenía idea.

Ray su ex novio no es mi persona favorita en el mundo pero hizo feliz a mi hermana en su tiempo así que no puedo quejarme cuando dice cosas de él como que es "sexy", lo cual pasa muy seguido. Por ejemplo cada que su nombre aparece en una oración.

—¿Y qué hay de malo en eso? Digo, no es normal una relación poli amorosa pero no estabas incluida en eso.

—No interrumpas—se acostó en el piso, tiene esa rara manía—entonces pensamos que sería buena idea inventarle una novia para que Ana dejara de molestarlo pero las cosas se complicaron y ella quería conocer a su "novia" así que en un acto desesperado fingimos que yo lo era. Comenzamos a fingir en la escuela.

»Y creo que comenzamos a confundirnos, comenzamos a pasar más tiempo juntos y era una costumbre que fuera a visitarme por las noches a mi cuarto. Claro sin que mis tíos se dieran cuenta.

No conozco a Ana personalmente pero siento que la conozco por todo lo que Mateo me platicó cuando le gustaba. Aún no decidía si me caía mal pero cuando me dijo que rompieron fue la excusa perfecta para decir que no es de mi agrado.

Ya saben, siempre protegiendo los corazones de los idiotas de mis amigos.

—Sigo esperando la parte en que todo sale mal—hasta ahora todo sonaba bien para mí.

—Empezaron a hacerse las cosas extrañas, se enojaba de que hablara con chicos, y eso que Mateo nunca ha sido celoso, pero de la nada pasó y comenzamos a pelear por todo. Primero pequeñas peleas que solo él provocaba, luego más grandes y yo le seguía hasta que decidimos "terminar" y aquí estamos ahora.

»Y cuando parecía que habíamos arreglado las cosas, de la nada se fue. Ya sabía que vendría aquí pero iniciando el siguiente año no literal a los dos días. A veces podemos convivir bien, pero luego todo va mal.

Obviamente mi hermana está ocultando unas partes si no, no habrían peleado por casi nada. Pero ya me soltó demasiado, no la voy a presionar, por hoy.

—¿Y esperaste venir hasta acá para decirme todo eso? podríamos partirle la cara por lo último, obviamente.

—Yo misma le hubiera partido la cara pero, hay un gran problema.

—¿Cuál?

—Me gusta desde que teníamos 12 años. No podría pegarle aunque quisiera hacerlo. Y vaya que quiero.

Oh vaya.

No es que no me lo esperara pero nunca creí que lo admitiera, mi copia es una experta en ocultar sus emociones y que le revele a alguien más eso tiene el significado de que sí es algo muy serio.

¿Por qué no grabé este momento?

—Bueno, eso cambia mucho las cosas.

Esperaba que Mateo fuera el primero en revelar sus sentimientos pero entonces supongo que está teniendo su etapa de chico idiota como para arriesgarse a tener algo con mi hermana.