°°Italia°°
Para Severus había sido una semana muy entretenida y divertida. Aunque Mulciber no volvió a mencionar el tema de su familia, siendo algo que Severus agradecía, porque no se sentía nada cómodo o feliz hablando de lo que sucede en su hogar.
"Cariño, te ha llagado una carta" la voz de la madre de Mulciber hace que Severus salga de sus pensamientos prestándole atención.
"Muchas gracias" dice Severus cuando la señora Mulciber extiende su mano para entregarle la carta.
Severus mira la letra y reconoce la letra de su madre, no había problemas con que se quedara otra semana fuera de casa, es más bien, su madre lo alentaba, y que se portara bien.
Severus quería a su madre, pero que ella esté con ese monstruo...
"¿Todo bien querido?" Severus sin notar quién le había hablado asiente con la cabeza, doblando con cuidado la carta y la guarda en su bolsillo.
"Posiblemente, es una carta de su madre, es normal que la extrañe, madre" Habla Mulciber quien tomaba con tranquilidad él Te.
"No te preocupes cariño, muy pronto la verás, no te sientas mal" habla con un tono suave la señora quien le acaricia la cabeza. Si supiera
"Gracias por sus palabras, Señora Mulciber" Severus le dedica una pequeña sonrisa.
"Ay, cariño, no me digas así, dime Madam Aurora" Habla nuevamente la señora Mulciber extendiéndole otra carta. Severus toma la carta abriéndola.
"Es de Edmund" dice Severus leyendo las primeras líneas. "No me digas, no le dieron permiso" habla Mulciber con una risa.
"Dice que, si le dieron permiso, ya hasta tiene listo todo el plan de la semana" responde Severus que sigue leyendo la carta. "También dice que está en Italia, y viene con la dirección"
"Maldita Ave con patas" Dice Mulciber entre dientes, tomando de un solo trago el resto del té.
Severus y la señora Mulciber se ríen por el comentario.
"Entonces querido, te daré un baúl más grande, dudo que el que tienes pueda entrar toda la ropa que tienes" habla nuevamente la madre de Mulciber terminando su desayuno y empezar a caminar a la puerta del comedor.
"Que no sea nada caro..." murmura Severus esperando que al menos usen el dinero sabiamente.
"Pero lo que te hemos comprado es barato, ¿Quién dijo que es caro?" Dice con burla Mulciber haciendo que Severus reviro los ojos. Cierto.
Para los ricos nada es caro
"¿Tienes todo listo?" Pregunto la Mulciber abrazándolo antes de que Severus tome la Red flu hacia donde la mansión de verano de Avery
"Cuídate, y no olvides ponerte en protector solar, el sol en estas fechas suele estar un poco fuerte en Italia." Dice la madre de Mulciber abrazándolo.
"Muchas gracias Madam" Severus sonríe para tomar un poco de polvos flu de la bolsita de la señora Mulciber y acercarse a la chimenea.
"Nos vemos en el tren Severus" Dice Mulciber quien se despide con la mano
"Nos vemos Bruce"
Aterrizaje perfecto. Por supuesto, sería una vergüenza total que él, siendo un adulto, caiga después de una llegada en Red Flu.
Apenas Severus salió de la chimenea, Avery se le tiró encima abrazándolo y haciendo que Severus se golpeara la espalada cuando Severus cayó de espaldas.
"Severus qué alegría de que hayas venido, tengo tantos planes, y lugares que te quiero enseñar, primero iremos por El coliseo, por los canales de Venecia, la Torre de Pisa, a la Fuente Fontana di Trevi. Y también iremos a la playa" Severus apenas puede escuchar correctamente todo lo que está diciendo Avery.
"Eso, suena interesante..." dice Severus confundido. Aunque lo último sí suena interesante, la playa no suena mal.
"Edmund, deja que por lo menos tu amigo se instale en su habitación, ¿no lo crees?" Habla una voz Femenina.
Severus mira a la quién puede ser la madre de Avery, sus ojos son parecidos así que lo más seguro es que Avery se parezca a su padre.
"Tienes razón madre, vamos rápido Sevi, te va a encantar, aparte de que hoy iremos por muchos lugares, mi madre nos va a ayudar a aparecer a diferentes, lugares." Desde cuando Avery habla tanto, en el colegio suele ser callado. Bueno, no todo el tiempo, pero está tranquilo.
"Por hoy, querido, es mejor que lo dejes descansar el día de mañana podremos salir sin problema. Sin decir que tenemos toda la semana para hacer todo lo que has dicho" dice la Señora, que se acerca y ayuda a ponerlos a ambos de pie.
"Vamos Severus" Severus ni le dio tiempo a responder cuando fue jalado de golpe cuando Avery empezó a correr.
Este idiota, si no es uno es otro, a este paso me terminarán arrancando el brazo.
"¡Taran! Que te parece, además, que está al frente de la mía" Habla Avery con una gran sonrisa.
"Es muy bonita, gracias" dice Severus viendo la habitación, no hay que dar tantas descripciones cuando tienes lujos rodeados por todas partes; En fin, ricos.