—Lo sé, por eso estoy aquí Dulce. Quiero dejar el pasado atrás, ayudarme, enséñame a ser mejor para ustedes — Exclama Christopher.
Dulce parpadea, y lo mira fijamente.
—Pues, vamos lento Christopher, suena bonito escuchar eso pero necesito hechos. No he dejado de quererte, ahora tengo que pensar en ella también —Exclama Dulce, Christopher asiente.
—Te entiendo Dulce, se que te he lastimado, no soy perfecto, quiero hacerlo de cero—Exclama Christopher, Dulce iba a responderle pero en eso se oye la voz de Clara y la tía Ana.
—Hemos llegado— Grita Clara, Dulce y Christopher salen al salón.
—Genial, ustedes son confabulan en mi contra —Exclama Dulce levantando las cejas, Christopher ríe, Dulce se gira enfadada— Dije algo gracioso— Exclama.
—Cariño teníamos que ir a la tienda por lo que falta para la habitación de Alana, y Christopher se ofreció a cuidarlas— Exclama Ana.
—Tengo que terminar un diseño, voy a mi habitación, antes que digan nada — Exclama Dulce y se va para su habitación. Christopher espera que entre para hablar.
—Quiero recuperar a Dulce, se que he cometido errores pero la vida es muy corta, me iré tengo cosas que hacer volveré por la noche, sería posible — Clara le. Interrumpe.
—Te daré un 50% de apoyo, pobre de ti y la vuelves a lastimar Christopher Pethersen, te haré trizas— La tía Ana niega co. La cabeza —Tía no me mires así. Querés el departamento para ustedes— Ana le interrumpe a Clara.
—No te preocupes por nosotras, iremos a la casa de mi hermana. Christopher no la lastimes, Dulce la pasado mal en estos meses —Exclama Ana, Christopher asiente se siente fatal porque es su culpa.
—Tranquilas lo que menos quiero es lastimarlas, la vida me esta dando una oportunidad una vez más y la voy a provechaar me voy, no le digan nada a Dulce —Exclama Christopher despidiéndose y se marcha.
—Buen día princesas— Saluda un sonriente Diego desde el otro lado de la pantalla. Dulce rie.
—Buen día Diego, te acabo de enviar la corrección— Dice Dulce.
—Si por eso te llamo, eres una genia. Que tal con la llegada de Christopher —Exclama Diego.
—No seas tonto somos un gran equipo. La verdad no espere volver a verle, no sé qué pasará Diego, sabes que mis sentimientos no han cambiado hacia él, pero ahora tengo una personita en quien pensar —Responde Dulce.
—Te entiendo Dulce, sabes que puedes contar conmigo, te quiero — Dice Diego y corta la video llamada.
Dulce suspira, y acaricia su vientre, pensando que las palabras de Christopher calan en ella, vio sinceridad en sus ojos, pero se pregunta si de verdad volvió a porque siente algo por ella o porque quiere remendar lo que sucedió en el pasado.
Luego del almuerzo Dulce se recuesta un rato mientras que Clara y la tía Ana, terminando con la decoración de la habitación de Alana.
—Belén dime—Contesta Christopher su móvil.
—Acabo de aterrizar, voy para tu departamento —Exclama Belén.
—Estoy en Londres Belén, te dejo tengo cosas que hacer— Christopher corta la llamada.
Christopher, tenía que hablar con Belén pero lo haría a su vuelta, no eran nada, ella sí se empeñaba en estar con él. Cosa que le incómodaba a Christopher y le molesta sobre manera que haya vendido la vida de Dulce, tenía que reconocer que gracias a eso supo que estaba embarazada pero hubiera preferido que se lo diga a él.
—Pasa, se está duchando —Exclama Clara Abriendo la puerta.
—Bien, gracias a ambas por dejarme — Dice Christopher.
—Cuidala, deje una tarta de queso en el microondas— Exclama Ana.
—Gracias, el chófer está abajo el las llevará —Exclama Christopher.
—Bien gracias. Recuerda que esta de siete meses no puede —Ana interrumpe a Clara.
—Clara, niña vamos. Nos vemos Christopher — Dice Ana y ambas abandonan el departamento de Dulce, Christopher cierra con llave, y se adentra hacia la habitación de Dulce y la oye llorar y abre de golpe la puerta del baño. Dulce levanta la cabeza y se asombra de ver a Christopher que le mira de pies a cabeza y siente una oleada de calor en su cuerpo.
—¿Estás bien, te paso algo la bebé? —Pregunta atropelladamente Christopher. Dulce niega con la cabeza.
—Soy un elefante y no puedo alsar la toalla que se me ha caído —Exclama Dulce triste. Christopher se acerca a ella y levanta la toalla del suelo. Y le cubre el cuerpo.
—Estás hermosa— Exclama Christopher. La mente de Dulce Grita peligro, pero su cuerpo Grita acción.
—Gracias, ¿qué haces aquí? —Pregunta Dulce.
—Vine a pasar la noche con ustedes y hablar contigo señora Pethersen —Exclama Christopher acercandose al rostro de Dulce, ella lo mira fijamente, siente nervios al sentir sus manos sobre su cintura densuda. El la besa y Dulce enrolla sus manos detrás de su nuca, Christopher la besa con deseo y calma, disfrutando del tacto de sus labios, la había extrañado, sentirla suya. Sus lenguas se entrelazan y Dulce no puede evitar gemir al sentir las yemas de los dedos de Christopher sobre su pezon erecto. Christopher rompe el beso.
—Dulce perdón yo— Exclama Christopher.
—No puedo, no pensaras dejarme así verdad —Exclama Dulce mitandole sería, Christopher sonríe.
—Por supuesto que no. Estas segura —Exclama Christopher, Dulce se muerde el labio y le vuelve a besar, Christopher rodea su cintura acariciando su espalda, deja sus labios y va bajando sus besos por su cuello, se detiene para deleitarse con sus pechos, Dulce siente una corriente eléctrica al sentir su boca sobre ellos, Christopher para, y le toma de la mano y va para la habitación.
La recuesta delicadamente, Dulce sonríe nerviosa sus hormonas están a mil y sus ganas el doble. Christopher depósita un beso a su vientre que emociona a Dulce, sus miradas se cruzan, pero Christopher baja a sus besos a su entrepierna, separando sus piernas y haciendola temblar de éxtasis al sentir su cálido aliento y sus caricias de arriba a abajo en sus labios vaginales. Dulce se agarra de las sábanas y llegan los primeros órgasmos, Christopher sonríe satisfecho, y se desnuda ante los ojos deboradores de Dulce.
Editado: 28.06.2021