Llego a la preparatoria con mi madre acompañándome; nos dirigimos a la dirección para ver en que salón me toca estar. La secretaria del director me da mi horario y numero de salón: 501; por el último año de preparatoria.
— ¡Suerte hija— me desea mi madre una vez fuera de la dirección. Empiezo a caminar por los pasillos y veo a dos chicas, que a juzgar por el uniforme, también son de último año. Me acerco hacia ellas para pedirles información.
—Chicas— les digo cuando pasan a mi lado y veo que se detienen a mirarme — ¿Me podrían decir en donde está el salón 501? — les pregunto.
—Mira; la escuela se divide en edificios, el que está enfrente es el edificio "C" donde están los 300 y 400— dice la chica de piel un poco más oscura que la mía con el cabello largo y de color negro.
—Este— señala al piso la otra chica de cabello super rizado de color negro con lentes— es el edificio "A" donde está la dirección y el salón de cómputo y ese— seña el edificio continúo— es el edifico "B" donde se encuentran los 100 y 200 en la primera planta y los 500 y 600 en la tercera planta— me explica.
—Nosotras también somos del 501— dice la chica de pelo largo.
—Ven con nosotras— pide la de cabello rizado— por cierto mi nombre es Linda—se presenta.
—El mío es Guadalupe— dice la chica de cabello largo.
—Yo soy Camila— les digo y comenzamos a caminar hacia las escaleras. Ellas entran antes que yo y puedo ver como comienzan a hablar con otras chicas que están sentadas en los dos primeros lugares de las últimas tres filas que están pegadas a la puerta. Comienzo a caminar hacia ellas. — ¿Este lugar está ocupado? — pregunto señalando una butaca bacía detrás de una de las chicas con las que estaban hablando Linda y Guadalupe.
—No, te puedes sentar— responde gentilmente la chica de adelante; al mirarla bien es de piel morena, con cabello negro medio ondulado— Soy Isabel, por cierto— me dice la chica.
—Yo soy Cynthia— dice una chica de cabello negro muy largo y piel blanca con lentes, sentada en la primera butaca de la fila de a lado donde yo estoy.
—Y yo Montserrat—dice La chica sentada atrás de Cynthia— pero todos me dicen Montse, de cariño—es una chica de piel morena y cabello negro un poco largo.
—Y a nosotras ya nos conoces— dice Guadalupe y con Linda, toman lugar en las dos primeras butacas que están en la tercera fila.
—Un gusto conocerlas a todas, yo soy Camila— les digo sentándome en lugar. Vemos como los demás chicos empiezan a sentarse y el profesor aparece la entrada de la puerta. Al parecer es el Profe Mercado de Biología y así empieza la primera clase.
—Camila, ¿quieres venir con nosotras a almorzar? —pregunta Cynthia una des que suena la campana que anuncia el receso.
—Sí y gracias por invitarme— saco mi monedero de mi mochila y las sigo, nos dirigimos al edificio "C" y detrás de él está la "cafetería", cada una compra su almuerzo y nos sentamos en la de las mesas que tiene seis lugares exactamente. Al ir conociéndolas mejor me pude dar cuenta que Guadalupe, al principio parecía una niña tierna y buena pero ahora sé que es un desmadre de chava, muy loca y divertida. Linda, por lo contrario es muy amable y simpática pero también tiene su lado divertido. Montse es una chava de la que puedes hablar con ella por cualquier cosa pero también es toda una "Gurú" de la moda. Cynthia es un poco más reservada pero participa en la plática y también es divertida. Isabel es tierna y alegre pero sabe entrarle al desmadre como todas nosotras.
—Debo de ir al baño, ¿alguien viene? —pregunta Guadalupe, poniéndose de pie.
—Deberías ponerte un pañal antes de venir a la escuela— se burla Linda y es inevitable que ría junto con las demás.
—Vas al baño cada hora Guadalupe, vete al ver un médico— dice Cynthia ahora.
—Yo te acompaño Guadalupe— le digo poniéndome de pie. Comenzamos a caminar y para nuestra buena suerte, según Guadalupe, no hay fila en los baños; pasamos y después de hacer mis necesidades salgo de los baños y me dirijo hacia la jardinera ubicada enfrente de los baños. Miro a los lados en busca de Sebastián y al no encontrarlo pienso que ese chico me tomo el pelo.
— ¡Listo! — dice Guadalupe saliendo del baño. Volvemos con las chicas y ahora si empieza el verdadero interrogatorio. Ya que preguntas cosas como:
¿De qué escuela bienes?
¿Qué planeas estudiar?
¿De qué ciudad eras?
Y después de responderles todas sus dudas volvemos al salón de clases donde las siguientes cuatro horas fueron dos de economía, una de inglés y la ultima de matemáticas. A la hora de la salida Montse e Isabel se van hacia el centro para sus cursos de inglés, Cynthia con su novio Oscar, Guadalupe tiene que llevar su carro al servicio y solo quedamos Linda y yo.
—Cómo vivimos en la misma calle, ¿Por qué no nos vamos juntas? — le pregunto a Linda.
—Sí, pero que te parece si antes vamos a un café que está a unas calles de aquí— propone Linda y yo acepto. Comenzamos a caminar y no tardamos ni 15 minutos en entrar al local, tomamos una mesa junto a la ventana y pedimos dos Frappe de Oreo, que resultó ser el favorito de mi nueva amiga. Conversamos un rato y descubrí que le encanta leer y dibujar y cuando lo hace sus dibujos son preciosos y también arreglarse las uñas que me encanta como lo hace. Pagamos y nos fuimos a nuestras casas ya que el maestro de Economía nos dejó un resumen larguísimo. Llego y saludo a mi mamá.
— ¿Cómo e fue en tu primer día hija? — pregunta mi madre al verme entrar a la cosa mientras ella termina de lavar los platos.
—Me fue muy bien, con decirte que ya hasta hice amigas — le comienzo a platicar desde el momento en el que me dejo en la dirección hasta mi ida al café.
Mi celular suena y miro que es un mensaje de WhatsApp, para ser exactas del grupo donde me metieron las chicas.
Camila, ¿quieres que pase por ti maña? —pregunta Guadalupe.
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Editado: 04.01.2022