Catraoine
Los días se volvieron un torbellino de emociones y desafíos, pero estar trabajando para The Present Company es una oportunidad increíble para desarrollar mis sueños, tengo la oportunidad de escribir, redactar, reseñar y aprobar libros que saldrán bajo el sello de la empresa, también obtengo la oportunidad de impactar a la comunidad gracias a las charlas que lidero dirigidas a diferentes autoras, principiantes y niños que sueñan con dejar una marca literaria en este mundo. Hace poco era una de ellas, lo sigo siendo. Pero mi mentor me ha enseñado grandes cosas en el mundo empresarial, de la mano de Elián aprendo aún más del mundo literario. Y mi carrera me permite tener una posición mayor. Con el pago de la pasantía ya no sufro por llegar a fin de mes, puedo alimentarme muy bien, pagar la mensualidad de la renta y por fin me puedo permitir comprarme cosas.
Que decir de mi jefe, comencé a sentir grandes cosas por él, admiración y amor. Elián se convirtió en alguien demasiado importante en mi vida, siempre encontrábamos fuerza el uno en el otro. Y eso hizo que tuviéramos una conexión impresionante. Siento que transciende más allá de mi alma.
Mi horario en la universidad este semestre fue más flexible, veía mis clases durante la mañana y en la tarde hacia la pasantía en la empresa. A veces abarcaba mis fines de semana colapsada en trabajos y reuniones, pero poco a poco pude fusionar y organizar mis tiempos. Esa tarde mientras trabajaba, Elián me sorprendió con una visita inesperada. Me encontraba sumergida en la tarea cuando levanté la vista y allí estaba, mirándome desde no se hace cuánto tiempo.
-Le dedique una sonrisa- ¿Qué haces aquí? No esperaba verte hoy.
-creo que ama verme sonreír porque me la regresa de vuelta- Quería verte y sorprenderte. Además, necesitaba un descanso de las reuniones. Tengo muchos proyectos con los autores, llegaron propuestas de películas y demás ¿Te importa si me siento a tu lado?
-Palmeo a mi lado para que se siente y emocionada le respondo- Estoy feliz de verte siempre. Y más si me cuentas de esos proyectos, cuéntame ¿Cómo ha sido tu día hasta ahora?
-suspira algo cansado, lo noto en su voz a pesar de que intente ocultarlo- Hoy mi día ha sido bastante agitado moñitos, pero estar aquí contigo hace que todo valga la pena. –me acaricia la mejilla- quería contarte que la reseña que enviaste a la empresa tuvo un gran impacto, los editores y la autora te mandan felicitaciones, lograste darle la respuesta que buscaba para continuar la trama. Gracias a eso firmamos para una película y 2 libros más.
No podía creer lo que estaba escuchando, tenía una sonrisa de oreja a oreja y escuchar que lo que hacía estaba teniendo mucho valor era increíble, al fin comenzaba a sentir un poco que, si servía para algo, que creían en mí, lo más importante, que yo, estaba creyendo en mí.
Escucho atenta la voz de Elián quien me sumerge en una conversación animada compartiéndome sus experiencias del día. Me habla de los sueños que tiene por delante, de las nuevas metas que se trazó de las cuales quiere que sea parte. Decidimos ir al parque a ver el atardecer, nos recostamos en el pasto y el me entrelaza nuestras manos. El acto me pareció tan único, electrizante y mi mirada se conecta con sus ojos grises.
- Moñitos quiero decirte algo, no sé si tú lo recuerdes o no, pero, quiero se seas mía por completo. No quiero mentirte nunca. –frunzo un poco el ceño aun mirándolo, no entendía a donde iba la conversación- es así como el tema de su familia surgió en la conversación. Elián compartió algunas historias de su infancia, me contó una anécdota en la cual yo era parte- Y por eso nunca pude olvidarte, el momento que escuche por primera vez tu nombre en la fila del café, fui cada día esperando que yo fuera alguna vez una de esas personas con la cual tenías conversaciones casuales en la fila.
- Pero, ¿tú eras ese pequeño niño? –digo con la voz entrecortada y lágrimas rodando por mis mejillas- tampoco pude olvidar ese día por completo Elián –decido contarle lo que había pasado yo y la razón por la cual estaba en ese parque, su mirada se mezcló entre tristeza y admiración-
- Desde ese momento supe lo valiente que eras, pero hoy lo reconfirmo una vez más, se por lo que pasaste, por ti seguí mis sueños, cree mi empresa y forje mi carácter, fuiste esa luz constante en mi oscuridad que me recordaba que en algún lugar alguien creía en mí –da un beso en mi frente- Catraoine estoy jodidamente enamorado de ti, no solo por eso, sino por la mujer que eres, tu carisma, personalidad y esa manera única que tienes de ver el mundo. Voy a esperar por ti incluso después de la muerte.
- La confesión me dejo en shock, no sabía que responder, pero creo que mi silencio lo hizo, el comprendió que necesitaba tiempo, no importaba que yo lo amara de la misma manera, o más intenso, era que antes de amarlo a él por completo, tenía que aprender amarme a mí misma y a mis sueños primero. No puedo brindarle mi cien por ciento en este momento y él lo sabe.
- Yo daré mi cien por ciento, el porcentaje que tenga que dar mientras tú puedas darme todo de ti, seré tu fortaleza cada que me necesites. Y es momento de que sea luz en tu oscuridad. - la confianza se construyó entre nosotros. Aunque ambos habíamos experimentado momentos difíciles, encontramos consuelo en saber que no estábamos solos-
- Elián quiero que no te quede duda de que me hace bien saber que estás aquí conmigo. A veces, siento que nuestro pasado puede pesar demasiado en nuestro presente. Pero también sé que nuestro pasado no puede definirnos. Somos quienes somos por lo que hemos superado, y juntos podemos construir un futuro diferente.
Y mientras caía la noche, prometimos en silencio dejar atrás las cargas del pasado y enfrentar cada desafío con valentía y amor. Juntos, sabíamos que podíamos superar cualquier obstáculo que se interpusiera en nuestro camino.