5.3 Estrella de internet

La Gran Expo del Entretenimiento Moderno era un evento social anual destinado a promocionar las nuevas tecnologías del cine, televisión e internet, en esta ocasión, estaban anunciando la tecnología holográfica que entró al mercado ese 2030. 

Además del recorrido abierto a todo público a través de cómo fue evolucionando la forma en que la gente se entretiene, así como el impacto de los avances científicos y las nuevas tecnologías en la forma de producir el séptimo arte; la conferencia principal de la exposición iba a presentar un pequeño videoclip del nuevo sencillo de la Reina de la industria musical, el cual era protagonizado por el legendario actor que revolucionó la industria del cine al aparecer en la arriesgada grabación hecha en la primera metrópolis. 

Por eso, cuando la directora le había dado a la mamá de Zaid dos boletos y su papá se había ofrecido a acompañarlo a la exposición, Lewin insistió en ir junto a Lena. Aunque aún no estaba confirmada la asistencia de estas dos figuras, quería darle a su hermana la oportunidad de conocer a su ídolo. Lamentablemente, llevaban mucho tiempo en el lugar y esas figuras no habían hecho su aparición, lo que significaba que no llegaría. No obstante, los principales interesados no faltaron: los representantes de la empresa que desarrolló la tecnología holográfica.

Hace una década y media ya habían aparecido los lentes de realidad virtual, la cual ahora había sido perfeccionada al nivel de hiperrealismo con los cascos de realidad virtual, aunque todavía no se podía imitar la percepción del gusto, tacto u olfato. La desventaja de ellos era que podía resultar agobiante para las personas fotosensibles o incluso los claustrofóbicos, así que la tecnología holográfica planeaba ser un alternativa para eso; en lugar de sumergirse en las películas, las películas se desarrollarían a su alrededor.

Sabiendo que habría muchos directores de producciones pequeñas intentando obtener un lugar en el programa beta, Lewin dirigió su atención al grupo de la empresa Moonstone (MS). Aunque era poco probable que ninguno de ellos le prestara atención a un par de niños, no le hacía daño acercarse a escuchar.

—Señor Jones, si me da un lugar, le prometo que no se arrepentirá. El ranking de visualización de nuestro canal ha crecido mucho en el último periodo, confíe en mi palabra…

—Señor Jones, nuestro canal es el número uno en la hora pico de los jueves…

—Señor Jones…

Lewin escuchó el parloteo de aquí para allá, así que buscó con su mirada a alguien que no estuviera tan ansioso por obtener la prueba de la tecnología holográfica.

Bingo.

Había un hombre con un elegante traje azul marino sentado junto a un niño de unos diez años, lo alimentaba con cuidado, por la similitud de sus rasgos, debían ser padre e hijo.

—Recuerda Lena, solo sé tú misma, ¿de acuerdo?

—Sí…

Ambos caminaron hacia el par de pelirrojos deslumbrantes y sonrieron un poco. Los dos los ignoraron. Lewin se sintió impotente. Sus habilidades sociales no eran muy buenas, siempre dejaba que su amante se ocupara de estas cosas.

—Señor, disculpe —habló Lena al ver la incomodidad de su hermano.

Silencio.

—Señor… Mi hermano es muy inteligente, ¿sabe? Hace tres semanas solo estudiaba el cuarto grado de la escuela primaria y ahora está en sexto. La directora dijo que el próximo año podría empezar la educación secundaria.

Ignorados.

—Él es también un niño muy bueno, nunca causa problemas y es muy obediente… En toda su vida, lo único que ha pedido, es una oportunidad para actuar.

Esta vez el niño los miró un poco, luego siguió con lo suyo.

—Mi papá dijo… Dijo que aquí todos son gente importante que no debemos molestar. Pero mi her… No-nosotros queremos… Queremos…

De repente, cuando el hombre la miró directamente, Lena ya no pudo seguir hablando y se sintió cohibida.

—Queremos saber si usted podría darnos trabajo —Lewin tomó la palabra—. Mi hermana es muy buena cantando, sabe todas las canciones populares y tiene una voz afinada. Trabajaremos duro…

—Lo siento, niños. Yo no trabajo en la industria del entretenimiento, no puedo ayudarlos.

El hombre dijo esas palabras y se fue con su hijo. Los dos se quedaron de pie, demasiado avergonzados para volver a intentar entablar una conversación con gente desconocida. En medio de su mirada de tristeza, una persona se les acercó por detrás.

—Pequeños, escuché lo que dijeron —dijo un joven, no parecía llegar a los veinticinco.

Lewin se puso alerta, apretando la mano de Lena y adquiriendo una posición protectora.

—Tranquilo —dijo el joven mientras reía—. Me presento, soy James Felton, transmisor de oro de la plataforma White Dolphin. Estoy buscando algunos niños para nuestra próxima producción. Pueden comprobarlo.

El joven extendió una tarjeta dorada hacia ellos, la cual contenía algunas palabras en la parte delantera y un código QR detrás.

—No tenemos celular —dijo Lewin mientras negaba con la cabeza.

«2-2, comprueba su información.»