Entra en mi vida

7.

Daniel y Marcela estaban en la piscina besándose, Daniel sentía estar tocando el cielo con las manos, los labios de Marcela eran tan suaves, su piel era como la seda, su aroma lo tenia embriagado, hacia tanto tiempo que no sentía algo tan agradable que quería que eso durara eternamente, pero Marcela se separo de el nerviosa

  • Daniel … yo – le dijo bajando la mirada, Daniel la tomo por la barbilla y la obligo a mirarlo
  • No digas nada. Es evidente que ambos sentimos algo, algo muy especial
  • Lo se, pero tengo miedo
  • A que chiquita?
  • A tu novia – Daniel rio
  • A Camila? – le pregunto
  • No – Marcela lo miro a los ojos A Martha Cecilia
  • Ella esta muerta mi vida, te aseguro que no tienes nada que temer, quiero que me quieras, que seas parte de mi, que siempre estés a mi lado, que entres en mi vida – la beso nuevamente, esta vez Marcela se dejo llevar, Daniel la abrazo y ambos se metieron en un mundo en el que existían solo ellos, ella tembló
  • Estas temblando – le dijo Daniel abrazándola mas fuerte y frotando sus brazos
  • Si – tembló – tengo frio
  • Esto de la enseñanza de natación en la noche y con ropa no fue buena idea – le dijo el ángel sonriendo, Marcela le devolvió la sonrisa
  • No, no lo fue
  • Ven – Daniel se fue a la orilla de la piscina, llevándosela con el

 

Salieron de la piscina entre chistes y risas, el no sabía que le estaba pasando, pero se sentía tan feliz con Marcela, y lo único que deseaba era verla sonreír, por lo que se encontraba diciendo bobadas a todo momento solo por ver su reacción, salieron del club y la dejo en su casa, luego se fue a la suya con la misma sonrisa idiota en su cara y tarareando canciones como un tonto enamorado… perdón? Enamorado? No podía creer lo que estaba pasando por su cabeza, decidió no pensar mas.

 

Al llegar a su casa encontró a sus primos en la sala jugando cartas, ambos se extrañaron al verlo con la ropa mojada

  • Que te paso? – le pregunto Cristóbal bastante intrigado
  • Sentí mucho calor y decidí tomar un baño – Cristóbal rio, Jimena exclamo
  • Con todo y ropa?
  • Aja, voy a cambiarme – Dijo Daniel y se fue a su habitación
  • Qué le pasaría? – le pregunto la joven a su hermano
  • Creo saberlo. Te voy a contar, pero júrame que no vas a comentar nada
  • Cristóbal ¿Tengo cara de red comunicativa?
  • Promételo – le insistió
  • Esta bien, lo prometo
  • Estaba con Marcela
  • Marcela, ¿tu amiga? – Cristóbal asintió con la cabeza Cómo así?
  • Recuerdas que ellos antes del cumpleaños de Santiago ya se habían visto, pues, después del cumpleaños lo siguieron haciendo
  • Lo sabía. Ese día se notaba algo especial en ellos – Se levanto de su silla Voy a preguntarle

Cristóbal la tomo por el brazo y la detuvo

  • Te dije que sin comentarios
  • Yo no me quedo con esto – Y salio para la habitación de Daniel, Cristóbal negó con la cabeza, el y su bocota.

 

Jimena entro a la habitación de su primo, este estaba en bermuda secándose el cabello

  • Bueno primo, no piensas decirme donde estabas?
  • No te puedes quedar con la inquietud verdad?
  • Sabes que no
  • Estaba con mi novia
  • Ay no primo, con Camila? – le dijo claramente decepcionada
  • Pues no, estaba con mi novia, Marcela
  • No lo puedo creer! – Chillo Jimena Y eso que te enojaste tanto cuando yo te insinué que te gustaba – Daniel sonríe
  • Ya, perdóname
  • Pero eso no justifica la empapada que tienes
  • Es que le estaba enseñando a nadar
  • Con la ropa puesta? – Daniel asiente Daniel, ¿Estás perdiendo el sentido de la cordura?
  • Con ella me siento diferente, tu eres de las personas que mas me conoces y sabes que todo lo que hago lo hago planeado, rutinario, y con ella las cosas me salen natural
  • Nunca ta había visto tan entusiasmado, ni siquiera cuando empezaste con Martha Cecilia
  • Martha Cecilia es cosa del pasado prima, Marcela es mi presente y es diferente.

 

Jimena suspiro, deseaba de todo corazón que en realidad fuera así, su primo había sufrido tanto por la perdida de su novia que había dudado que volviera a enamorarse, solo esperaba que ninguno de los dos saliera lastimado, pues Marcela se veía como una buena chica.

 

Al día siguiente los tres primos se disponían ir a la universidad, iban llegando al auto de Daniel pues ese día le tocaba transportarlos, tenían una regla, cada día le tocaba el transporte a uno de ellos, Cristóbal tuvo que devolverse pues se le había quedado un libro, Daniel y Jimena iban burlándose de Cristóbal, siempre se le olvidaba algo, en esas estaban cuando se les acerco Camila

  • Hola chicos – les dijo tímidamente, estaba ojerosa y sin maquillaje, le dijeron un simple hola – Daniel yo… Daniel la interrumpió
  • No tengo nada que hablar contigo Camila – Y dicho esto se subió al auto
  • Jimena ayuda – Rogo con lagrimas en los ojos, a Jimena le dio mucho pesar esto, pero hizo de tripas el corazón y se negó, deseaba con toda su alma que su primo fuera feliz y sabía perfectamente que esto no iba a suceder con su cuñada
  • Olvídate de mi primo Camila, el ya tiene novia – Camila la miro sorprendida
  • Como que tiene novia? A que horas? En que momento? Si hace solo unos días era mi novio
  • Si, se que es un poco apresurado pero al parecer las cosas van bien
  • Quien es? – pregunto la rubia enojada
  • Marcela, la amiga de Cristóbal – le dijo inocentemente Jimena, en ese instante llego Cristóbal y saludo a Camila
  • Nos vamos? – le pregunto a su hermana subiéndose al auto, Jimena lo imito sin decirle nada mas a Camila la cual quedo hirviendo de la rabia craneando su próxima jugada.



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En el texto hay: amistad, amor, envidia

Editado: 08.07.2019

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