29.
Siara y Marcela estaban aterrorizadas, Camila disparo el arma mientras le apuntaba a Marcela, Siara salto y se puso al frente y recibió el disparo
- Si serás idiota niña – dijo Camila al darse cuenta que la que había recibido el disparo fue Siara, Marcela se acercó apresurada a la chica herida y la llamaba insistentemente
- No te preocupes Marcela – Trato de tranquilizarla – Estoy bien
- Como vas a estar bien por Dios, estas herida – le dijo entre lagrimas, Camila se acercó a ellas
- Enserio no tienes nada Siara ¿Necesitas otro disparo para morirte maldita? – le apunto con el arma- Tu le salvaste la vida a Marcela, pero ahora se van a morir las dos – Intento disparar nuevamente pero Marcela se le abalanzó encima y forcejeo con ella, tratando de quitarle el arma, la tomo de las manos pero Camila la esquivaba muy bien, en la lucha ambas rodaron y llegaron a la orilla del barranco, Camila se soltó del agarre de Marcela y la abofeteo, la joven perdió el equilibrio se agarro como pudo de la blusa que Marcela llevaba puesta cayendo ambas por el barranco.
En la cabaña Daniel caminaba de un lado a otro desesperada, Marcela no daba señales de vida, su celular aun estaba apagado, Cristóbal y Arturo no aparecían con Siara, el pueblo no era muy grande, no tendrían grandes problemas en encontrarla, sin embargo aun no llegaban con ella, cuando miro su reloj por millonésima vez llego su primo con Arturo, se acerco a ellos
- Que paso?
- Siara salió del hotel con otra mujer, que por la descripción que nos dan, es Camila – Les informo Cristóbal
- No puede ser – Exclamo Jimena entre lagrimas
- También fuimos al terminal – dijo Arturo - nos dijeron que Marcela compro el tiquete, pero que el autobús tuvo un problema mecánico y se retrasaron las salidas
- Pero alcanzo a salir?- Pregunto Angela angustiada
- El dependiente que recibe los tiquetes nos dijo que Marcela no subió- siguió Cristóbal - Lo peor es que el guarda de seguridad que esta en una de las salidas nos dijo que habían salido tres mujeres que coinciden con las descripciones de Camila, Siara y Marcela
- Dios mío, están juntas – Intervino Angela
- Debemos avisarle a la policía – por fin dijo Santiago - Mi hermana puede hacerle algún daño a Marcela, o a Siara, o a ambas
Todos asintieron, cuando se disponían a salir Cristóbal miro a Daniel que no se movió de su posición
- No vienes?
- No
- Yo voy a buscarlas
- Dónde?
- Por ahí. No le veo caso que todos vayamos a la policía
- Daniel tiene razón – apoyo Arturo - es mejor que hagamos como hicimos Cristóbal y yo, dividámonos y busquémoslas por separado
- Yo no pienso quedarme aquí sin hacer nada – expreso Angela
- Alguien debe quedarse aquí, por si aparecen, por lo tanto yo me quedare, pero con una condición – dijo Jimena - En dos horas todos deben estar aquí, si no ha dado resultado la búsqueda, debemos replantearnos el plan
- Me parece bien – Dijo Daniel - Angela, te vas conmigo
- Ya que nos hemos puesto de acuerdo dividámonos – dispuso Cristóbal - Arturo y yo iremos a la policía y buscaremos en el centro del pueblo, Santiago buscara por el sur, y Daniel y Angela por el norte ¿Entendido?
Todos agarraron sus cosas y salieron, Cristóbal se acercó a Jimena y le dio un beso en la mejilla
- Me alegra que hayas madurado
- No es el momento de estar bromeando Cristóbal
- Es enserio. Has tomado esto con mucha madurez, estoy orgulloso de ti – le dio otro beso en la mejilla
- No es el momento de estar armando berrinches
- Me alegro que lo hayas comprendido
- Espero que esto acabe pronto, tienes que explicarme muchas cosas
- Como por ejemplo…?
- Lo de Siara
- Creo que te has dado cuenta más o menos como fueron las cosas
- Quiero que tú me lo expliques
- No es el momento, cuando todo esto termine te explicare todo lo que quieras
- Eso espero
- Te lo prometo – Intento irse
- Cristóbal – el la miro
- Suerte – Cristóbal le sonrió y salió.
Santiago iba en su auto sin saber que pensar, tal vez los Mendoza pensaran que estaba exagerando, que se estaba ahogando en un vaso de agua, pero el sabia de los alcances de su hermana y lo mejor era tomar precauciones, cuando Camila estaba de por medio nunca estaban de mas, no quería aceptarlo definitivamente pero en realidad ella estaba loca, rogaba al cielo que realmente no le hubiera pasado nada a esas chicas, pero estaba preparado esperando cualquier cosa, su hermana estaba obsesionada con Daniel Mendoza y podía hacer cualquier locura con tal de separarlo de Marcela, pro que eso que Camila sentía por Daniel no era amor, era obsesión, el amor no daba para tanto, ya lo había comprobado en carne propia con Jimena; sonrió al recordarla, su Jimena, lo había perdonado y lo mejor había aceptado casarse con el, en medio de toda esta locura era lo mejor que le había pasado, iba a dedicar su vida entera a hacerla feliz, sacudió su cabeza y se concentro en mirar por las ventanas a ver si localizaba a Camila.