Entre Cupido Y la Muerte

Capítulo 29: El Legado del Amor

El Despertar de un Nuevo Propósito

Con la Unión Sagrada consagrada y su amor eternamente sellado, Cupido y Thanatos sintieron una profunda necesidad de dejar un legado que trascendiera el tiempo y el espacio. Habían creado un dominio de equilibrio entre el amor y la muerte, pero ahora deseaban asegurarse de que su legado perdurara, inspirando a futuras generaciones de dioses y mortales.

Ambos dioses se reunieron en su nuevo hogar, el espléndido dominio que habían construido juntos, y comenzaron a discutir cómo podrían lograr su objetivo. Querían que su legado no solo fuera un símbolo de su amor, sino también una guía y una fuente de esperanza para aquellos que vinieran después.

La Creación del Jardín de las Almas

Decidieron que la mejor manera de dejar su legado era creando un lugar sagrado que simbolizara su unión y sirviera como un refugio para las almas. Este lugar sería conocido como el "Jardín de las Almas", un espacio que fusionaría la belleza del amor con la serenidad de la muerte, proporcionando consuelo y orientación a quienes lo necesitaban.

El Jardín de las Almas fue diseñado para ser un lugar de paz y reflexión. Cupido y Thanatos trabajaron juntos para crear paisajes que combinaban campos de flores luminosas con áreas de sombra tranquila. Las flores representaban la esperanza y el amor, mientras que las sombras simbolizaban la serenidad y la aceptación de la muerte.

Dentro del jardín, construyeron un templo central, dedicado a la unión de sus poderes. Este templo estaba adornado con símbolos de amor y muerte, y contenía un altar en el que las almas podían ofrecer sus pensamientos y deseos. El templo también tenía una fuente de agua cristalina, que representaba el flujo continuo de la vida y la muerte, y que proporcionaba paz a quienes se acercaban a ella.

La Biblioteca de los Sentimientos

Además del Jardín de las Almas, Cupido y Thanatos decidieron crear una "Biblioteca de los Sentimientos", un lugar en el que se recopilarían historias, sabidurías y enseñanzas sobre el amor y la muerte. Esta biblioteca sería un recurso valioso para los dioses y mortales que buscaban comprender mejor estos aspectos fundamentales de la existencia.

La biblioteca estaba llena de libros antiguos, manuscritos sagrados y pergaminos que contenían conocimientos sobre el amor, la pérdida y el equilibrio. Cupido y Thanatos invitaron a los sabios y guardianes del cosmos a contribuir con sus conocimientos, asegurando que la biblioteca se convirtiera en un compendio de sabiduría universal.

La Creación de los Guardianes del Legado

Para asegurar que el Jardín de las Almas y la Biblioteca de los Sentimientos fueran cuidados y mantenidos, Cupido y Thanatos crearon una serie de guardianes especiales, conocidos como los "Guardianes del Legado". Estos guardianes eran seres creados con la esencia de sus poderes y tenían la tarea de proteger y preservar el legado de los dioses.

Cada Guardián del Legado estaba imbuido con una parte de la energía de Cupido y Thanatos, y tenía la habilidad de guiar a las almas que visitaban el jardín y la biblioteca. Estos guardianes también eran responsables de mantener la armonía y el equilibrio en el lugar, asegurando que su propósito y su energía perduraran a lo largo del tiempo.

La Ceremonia de Entrega

Una vez que el Jardín de las Almas y la Biblioteca de los Sentimientos estaban completos, Cupido y Thanatos organizaron una ceremonia especial para entregar oficialmente su legado. Invitaron a todos los dioses, guardianes y seres importantes del cosmos para que fueran testigos de este evento significativo.

La ceremonia comenzó con una procesión hacia el Jardín de las Almas, donde Cupido y Thanatos, acompañados por los guardianes, ofrecieron palabras de gratitud y esperanza. Expresaron su deseo de que el jardín y la biblioteca sirvieran como faros de luz y guía para las almas y seres que vinieran después.

Orpheus, el sabio celestial, condujo la ceremonia, recitando encantamientos que infundieron al jardín y a la biblioteca con una energía eterna. Las palabras de Orpheus resonaron en todo el cosmos, sellando el legado de Cupido y Thanatos con una bendición cósmica que aseguraba su perpetuidad.

La Celebración de la Unión Eterna

Después de la ceremonia de entrega, se celebró una gran festividad en el dominio de Cupido y Thanatos. La celebración reunió a los dioses, guardianes y seres de diferentes reinos para conmemorar el legado que habían dejado.

La festividad incluyó música, danzas y rituales que celebraban el amor y la muerte. Se realizaron ceremonias especiales en el Jardín de las Almas y la Biblioteca de los Sentimientos, donde las almas y los dioses ofrecieron sus agradecimientos y deseos de bienestar.

La atmósfera estaba llena de alegría y gratitud, y la celebración se convirtió en un evento memorable que marcó el inicio de una nueva era en el cosmos. Cupido y Thanatos se sintieron profundamente satisfechos al ver que su legado había sido recibido con tanto aprecio y entusiasmo.

El Impacto del Legado

Con el paso del tiempo, el Jardín de las Almas y la Biblioteca de los Sentimientos se convirtieron en lugares sagrados y venerados por dioses y mortales por igual. El jardín se convirtió en un refugio para aquellos que buscaban consuelo y reflexión, mientras que la biblioteca se convirtió en un centro de conocimiento y sabiduría sobre el amor y la muerte.

Los Guardianes del Legado continuaron su tarea con dedicación y devoción, guiando a las almas y asegurando que el propósito de Cupido y Thanatos perdurara. Las historias y enseñanzas contenidas en la biblioteca fueron compartidas y apreciadas por generaciones de dioses y mortales, convirtiéndose en una fuente de inspiración y guía.

Un Futuro Brillante



#2755 en Fantasía
#7362 en Novela romántica

En el texto hay: separacion, reencuentro

Editado: 29.08.2024

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.