Entre dos corazones

Capitulo 3

Entramos a clase y el maestro llegó tras nosotras, y comenzó... 

—Toc, toc —se escuchó.

El maestro dijo que pasen y aparecieron en la puerta, tres chicas que no había visto. Una es morena con ojos azules, otra es de tez más clara que la primera; con el pelo suelto largo y ojos azules, y la tercera tiene el pelo corto; es rubia y tiene ojos verdes, pero las tres tienen un gran parecido. Al parecer, son hermanas o qué sé yo.

 

—Disculpe, profe, por la tardanza. Somos nuevas y no encontrábamos el aula. —dijo la morena.

 

—Está bien, jóvenes, pasen y digan sus nombres a sus compañeros. —dijo el maestro.

 

—Yo soy Claribel Araujo —anunció la morena.

 

—Mi nombre es Katherine Araujo —dijo la de tez más clara.

 

—Y yo soy Elba Martínez Araujo —dijo la rubia.

 

Al parecer, son buenas chicas.

Continuamos con la clase. Después, llegó el curso de historia, con el maestro más aburrido que pueda haber. Yo me quede dormida, como buena estudiante que soy.

 

— ¡Joven, joven, joven! —me despertó el maestro.

 

—Diga, profe, discúlpeme —le dije al maestro, ante lo que él me mira enojado.

 

—Sí, está bien. Váyase a recreo, ya sonó la campana. —me dijo finalmente.

Miré mi aula; sólo estábamos el maestro y yo. Empecé a recoger mis útiles, agradecí al maestro y fui a la cafetería. Fui a comprar algo que comer y vi a Pedro muy encaramelado con la chica más odiosa de todo el colegio.

 

Me sentí mal, no estoy segura de porqué. 

Continué hasta mi mesa con mi merienda y llegaron las chicas nuevas.

 

—Disculpa, ¿nos podemos sentar con ustedes? —dijo la rubia. Me parece que su nombre era Elba.

 

—Claro que sí, siéntense —les indicamos mi amiga y yo.

 

—Nosotras somos nuevas y no tenemos amigas aquí —informó la morena.

 

—Ok, bueno, pues de ahora en adelante tienen dos amigas en quienes confiar. Mi nombre es Adrielis y el de mi amiga es... —me interrumpió mi amiga. Tan linda ella, ¿verdad? 

 

—Yo soy Cindy Bernard, mucho gusto —exclamó ella.

 

—Igualmente, el gusto es nuestro— dijo la que me parece que se llama Claribel. — Nuestros nombres son…

 

—Sí, ya sabemos sus nombres; los escuchamos ahorita, en el aula —dijo Cindy.

 

Seguimos hablando; conociéndonos y esas cosas, y luego sonó el timbre, anunciando la última clase: español. A continuación, despacharon y cuando iba saliendo, choqué con un chico sin querer. Cuando levanté la vista, vi a ese chico de ojos verdes mirándome.

 

—Disculpa —me dijo él. 

 

—No es nada —afirmé y seguí caminando.

 

—Hey, Adrielis. Espérame, yo te llevo. —me propuso.

 

—No, gracias —le contesté enojada. No sé ni porqué le hablé así.

 

—¿Por qué? —me preguntó extrañado.

 

—Por nada, ya, adiós —le dije y seguí mi camino, sin mirar atrás. Sé que no debí enojarme con él.

 

Él no me ha hecho nada, pero sentí algo en mi interior al verlo con Yuleisi, la chica más odiosa del colegio. Ella me cae muy mal desde ahora.



#13055 en Joven Adulto

En el texto hay: accidente, pleitos, dos amores

Editado: 30.10.2020

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