Prólogo

☀️La Profecía de la Luz y la sombra🌙

Antes de que las dos lunas iluminaran los cielos, antes de que los reinos fueran separados por portales invisibles, existió una sola tierra donde hombres y criaturas mágicas convivían bajo el mismo manto. Allí, los sabios escribieron un libro que contenía el poder de mantener el equilibrio entre los mundos: El Manuscrito de los Velos.

Pero como toda creación poderosa, no estaba destinado a permanecer oculto para siempre. Una disputa nació entre quienes querían protegerlo y quienes buscaban dominarlo. La guerra desató caos y sangre; las montañas ardieron, los océanos se alzaron, y los cielos se oscurecieron por siglos. Para detener la destrucción, los sabios dividieron la realidad en dos: el Mundo de la magia, donde los guardianes veleban por el manuscrito, y el Mundo de los humanos, donde el recuerdo de la magia se desvaneció, convirtiéndose en mito.

Sin embargo, los sabios dejaron un resquicio: una profecía grabada en las páginas más ocultas del manuscrito.

"Cuando la frontera tiemble, y la portadora de la luz despierte, dos mundos volverán a rozarse.

Su corazón será la llave.

Su amor, la condena o la salvación.

Y de su elección nacerá la aurora o la sombra eterna "

A lo largo de los siglos, los guardianes juraron proteger la profecía, temiendo que algún día se cumpliera. Entre ellos se encontraba Kael, un guerrero marcado por las estrellas, condenado a vigilar el portal entre los mundos sin poder elegir su destino. Su deber era claro: proteger a la portadora, guiarla, y si era necesario.... detenerla.

Muchos lo llamaron privilegio. Para él, era una cadena invisible.

Un juramento que lo apartó del resto, que lo mantuvo en soledad, contemplando noches infinitas bajo la doble luna.

A veces, cuando el silencio del reino se hacía insoportable, Kael se preguntaba si realmente existía esa portadora o su todo era un mito para mantenerlo atado. Nunca creyó en la promesa de un amor imposible escrito en las estrellas... hasta que la vio.

Cuando Elena cayó en aquel campo iluminado, cuando sus ojos se encontraron con los suyos por primera vez, Kael supo que la profecía había despertado. Y con ella, también lo hizo un sentimiento prohibido, tan peligroso como inevitable.

Porque aunque el destino la había marcado como la salvadora, en los susurros de los antiguos estaba escrito algo más:

"El amor será su fuerza, y también su ruina"