Entre el amor y el odio

Capitulo 44: Ella nos separo

Habíamos llegado a Chicago, hacía años sin venir desde que me separe de Gabriel, Miguel no había dejado de tomar mi mano y besarla me hacía sentir bien, abrió la puerta del helicóptero y me ayudó a bajar, y tomó nuestras maletas.  Bajamos por el Ascensor estábamos en el lugar donde fui feliz y aprendí tantas cosas llegamos a la planta baja no pude evitar mirar el lugar con nostalgia, y algo de tristeza por haberlo dejado pero gracias a ello tengo lo mejor que me ha pasado en la vida mi bebé, quizás si hubiese sido más valiente ahorita seguiría siendo esposa de Gabriel y tal vez mi hijo fuera suyo.

Miguel me sacó de mis pensamientos-Tantos Recuerdos? -asenti con una sonrisa había muchos empleados mirandonos algunos conocían a miguel.

Paula- Así es-sonrei y seguí observando había cambiado un poco - Aquí aprendí muchas cosas, conocí el amor así como también conoci la maldad -el me miro extrañado-Olvida lo que dije no merece que recuerde lo malo.

Miguel - Paula- alcance a escuchar su voz ronca parecía preocupado- Lo amaste mucho cierto? -yo asenti no podía mentirle, ví que entrecerro sus ojos Conteniendose de decir algo más.

Paula- Si lo ame pero fue un amor muy bonito y correspondido fui muy feliz, pero el destino quiso separarnos a veces Cuando se ama no es suficiente cuando hay algo que obstaculiza ese amor, aunque hayamos luchado por él-miguel Fruncio el ceño- Ahora siento un cariño y lo quiero como amigo , porque ahora mi corazón es de alguien más-el la miro esperando su confesión deseaba escucharlo de sus labios- Mi corazón es todo tuyo, estoy enamorada de ti desde la primera vez que te ví en aquel antro-confeso con el corazón latiendo desbocadamente por las emociones que estaba sintiendo.

Él esbozo una sonrisa de oreja a oreja la tomó de la cintura y la pegó a él- Pues Yo te confieso, que me atraiste aquella noche y desde entonces no pude sacarte de mi corazón aunque no te recordaba- ella lo miraba conmovida-Cuando te volví a ver me removiste muchas cosas, que no quería aceptar que sentía por eso me propuse hacer todo para que renunciaras y no seguir con esto que fue creciendo, lamento haberte hecho aquella propuesta de ser mi amante era solo un disfraz para tenerte escondiendo lo que siento, yo por años creí haber estado enamorado de Andrea mi mejor amiga-Trago saliva y prosiguió nunca se había abierto a una mujer y ahora lo estaba haciendo desde lo más profundo de su alma- Pero con tu llegada me di cuenta que no era amor, era cariño pero no amor estaba confundido y gracias a ti salí de ese gran error, odiaba verte con Fabián De solo pensar que te llegará a tocar me volvía loco- Ella sonrió con un nudo en la garganta- Ay Paula que me has hecho, yo jamás había sentido celos por una mujer y por dentro me dolía pensar que tu estuvieras con él como yo deseaba estar contigo, yo no soy un hombre romántico, ni mucho menos de flores y corazones, ahora soy capaz de convertirme en uno por ti-admitio con una sonrisa y vio como ella dejaba salir algunas lágrimas que había Estado conteniendo- Yo Jamás pensé en tener hijos-ella se estremeció- Pero desde el primer instante que conocí a Arturito sentí algo extraño dentro de mí, sentía ganas de protegerlo.

Paula- El llamado de la sangre-el asintió y con sus púlgares limpió algunas lágrimas de ella.

Miguel- En fin -Se removio su cabello nervioso- Gracias por hacerme padre, y por haber llegado a mi vida, te confieso desde el Fondo de mi corazón que estoy profundamente enamorado de ti-ella sonrió con lágrimas se sentía felíz-Te amo-la pego y unió sus labios con los de ella, estaban tan sumido en confesarse lo que sentían mutuamente que habían olvidado que había personas a su alrededor observandolos sintieron los aplausos en aquel ambiente.

En el hospital Ignacio había acudido a la empresa para encabezar la Junta para hablar de la salud de su hijo. Diana no había vuelto al hospital estaba en la mansión sentía remordimiento por que aún no aparecía aquella persona que tanto dolor de cabeza le provocaba.

Una llamada proveniente de su celular la hizo salir de sus pensamientos.

Diana- Diga-espero la voz de la otra línea, una sonrisa burlona se escuchó ya conocía esa voz- Ash eres tú Gael,  que quieres no estoy de humor,  más te vale que todo este bien con  la mercancía es importante que esos diamantes lleguen a manos de los rusos, la mafia rusa no perdona y lo sabes -Sentenció arrogante.

Soltó una risa por su tono, ya sabía el motivo de su mal- Tranquila mi querida señora Ferrer,  todo está bien con la mercancía por cierto lo siento sé lo que pasó con tu hijo Gabriel-trato de sonar Preocupado- Es una lastima tan joven.

Diana-Mas te vale y no tengas nada que ver con el accidente donde casi muere mi hijo porque te mató Gael no juegues conmigo y más cuando se trata de lo más sagrado mi hijo-Afirmo seria- Tu tienes a tu ex mujer-gael dibujo una sonrisa del otro lado de la línea.

Gael-Si la tengo no te lo niego,  pero no provoque ese accidente,  más bien me facilitó llevarme a mi rubia es una carnada, con ella atraere a dos pez más gordos-sonrio maliciosamente.




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