¿Qué es lo normal? Ya han pasado 2 décadas desde que los demonios y los corruptores se presentaron al mundo. La humanidad que alguna vez gobernó el mundo, es ahora un vil recuerdo.
Luchamos una guerra, que no podemos ganar. Lo normal sería rendirnos, pero entonces porque hemos luchado.
El mundo ha cambiado y los malvados ya no se esconderán más.
Los descendidos protegen nuestras ciudades, mientras nosotros nos escondemos en la ignorancia. Vivimos aislados en nuestras casas. Disfrutando de un mundo ficticio. La tecnología se volvió normal.
Nuestra cultura desaparecida se volvió normal.
El cielo siempre gris se volvió normal.
Y el miedo a salir se volvió normal.
Lo normal se volvió las Arcas
Pero aún no estamos acabados, aún hay una resistencia. La humanidad se revelará una vez más, y les mostraremos a los malvados lo que nuestras frías armas pueden ser.
Linternas es lo anormal.
Linternas es lo correcto.
…
¡Criatura siniestra! Al fin nos encontramos. Soy Hellet Tri-Arcoi - dijo la silueta demoniaca que se sostenía en el aire.
Hellet… Hellet… Hoy caerás- dijo una voz en susurro que parecía provenir de todos lados.
¡Solo puede haber un solo conquistador! Tu existencia es un desafía a mi poder
Empezó una batalla entre dos fuerzas oscuras. Los ataques del demonio eran penetrantes y capaces de envenenar la tierra, sin embargo, la coraza y la piel de la criatura vil eran muy resistentes y no bastarían con unos cuantos golpes para ceder.
Aquella escena fue demasiado tétrica, el rey demonio atacando con sus garras y magia, mientras que el corruptor con sus miles de manos trataba de atravesar el cuerpo de su enemigo, todo esto mientras la tierra de su alrededor se moría.
La pelea duró más de los que se esperaba, durante tres días y tres noches estos enemigos de la humanidad, siguieron luchando. En algún momento de la batalla, el rey demonio se colocó una armadura negra y convocó a una espada maldita. Mientras que el corruptor extendía su corrupción por el aire, y convocaba miles de bestias corruptas.
Solo la palabra INFIERNO podría describir la escena momentos antes del roce final.
Poniendo todo su poder restante en la hoja maldita de su espada, el rey demonio Hellet, se abalanzó sobre el corruptor. Sin embargo, el corruptor hizo un movimiento impensable, este se dejó atravesar.
Cuando el rey demonio atravesó la cabeza de la gigantesca bestia, se dio cuento de la trampa que le habían planteado. Regenerándose casi al inmediato, el rey demonio Hellet quedó atrapado dentro del cuerpo del gigante corrupto. En un intento por salir de su prisión de carne, el rey demonio liberó su poder demoniaco por cada fibra de su cuerpo dañando enormemente la esencia del corruptor, y a su vez su propio cuerpo, liberándose así de su prisión.
Las dos fuerzas heridas gravemente, se refugiaron en sus dominios. El rey demonio en el castillo Obnix y el corruptor dentro de la montaña corrupta.
La humanidad suspiró aliviada ese invierno, ni el ejército demoniaco ni las bestias corruptas se dejaron ver.
Editado: 18.12.2020