CAPITULO 15

P.O.V Sofía.

Cierro los ojos, mientras espero el final, estoy en el piso, mientras miro unos mechones rubios, delante de mí estaba Victoria, mientras Lord White mantenía su vista en Ethan, este sostenía su espada firmemente mientras ambos se miraban a los ojos. Victoria me ayuda a levantarme mientras me alejo, no quería su ayuda, me pongo de pie, tomando la espada para apuntar a los soldados que no dudarán en atacarnos.

—Márchense — Dice Victoria en voz alta, mientras ellos resisten firmes no tenían intenciones de retroceder —. Es una orden.

—No seguimos las órdenes de la emperatriz Victoria, nosotros respetamos — No lo dejo terminar porque lo empujo causándole una herida. En cambio, Lord White se gira, para atacarme, pero Ethan lo somete.

—Déjalo, esto es un ajuste de cuentas — Digo mientras él me mira.

—Esto no te va a llenar — Me dice Victoria, mientras me río.

—Tú que sabes — Se levanta el Lord mientras, les pido que avancen, los soldados habían dejado de someter a mis amigos, ellos me miran un segundo, mientras le sostengo la cara con la espada, él había sido parte en la muerte de mi padre, como el duque de York, ya había muchos en la lista a los que debía de vengarme —. ¿Te arrepientes?

—Nunca — Eso era suficiente, para empuñar mi espada, pero no era lo suficiente capaz para matarlo, así que lo encajo en su espalda encajando la espada al piso, causando un gran grito, haciendo que Hiro y Caleb volteen.

—Ese será tu castigo, sufrir… — No era capaz, volteo a ver a Victoria, mientras ella tiene náuseas, extiendo mi paño mientras Ethan la jala, me mira jalándome hacia él, para abrazarme.

 —Siento lo de tu papá — El que dijeran que lo sentía era mucho para mí.

—Íbamos a ir a buscarte ¿Sabías? — Le digo, Caleb me mira asintiendo, él se iba a encargar del lord, pues comenzaba a gritar, no me dolía por sus esposas, ellas estarían mejor sin él, los gritos se callan el trabajo ya estaba hecho —. Tienes que volver…

—Lo sé, y lo haré — Encontramos a Sebastián a unos cuantos metros, sus ojos cambian de emociones rápidamente, mientras me mira a mí.

—¿Qué haces aquí? — Pregunta en voz baja, sus manos querían disimular que estaba emocionado, pero molesto.

—Tuve que huir, mi abuela fue la que mató a tu padre, ella y el Duque de York. Tengo pruebas que rescate antes de quemar toda la biblioteca, puedo jurar que mi abuela piensa que lo que me así que es mi prueba — Le dijo mientras me mira, no sabía que quería que le dijera.

—Es verdad — Ethan me sostiene la mano —. Ella huyó por un buen propósito, pero no es seguro hablar aquí. 

Caminamos unas cuantas horas, hacia el norte, que ahora era el sur, era donde teníamos que ir, era el único lugar donde la abuela de Victoria no tenía poder, pues la princesa era la única heredera, no había nadie más. Caleb se puso a mi lado, mientras que su mano se miraba mejor. Me da una cantimplora con licor, era licor de arroz, estaba frío demasiado helado, se lo regreso, mientras nos reímos. Victoria me mira, mientras le sostengo la mirada, ella tenía algo que decirme.

—Lo siento — Eso me tomó de sorpresa, trata de ocultar la marca de sus castigos en su brazo, ella la pasaba mal —. Pude haber hecho más, pero estaba asustada… 

—Lo que no me explico es ¿Por qué? Según tengo entendido, que conspiraste en contra de mí, y no solo de eso de Sebastián ¿Y ahora vuelves? — Le digo mientras todos se detienen escuchando, Ethan me mira como que pare, pero aún tenía mucho que decir —. ¿Que nos hace pensar que no volverás a hacer lo mismo?

—Entiendo, pero tengo una razón — Dice, pero no era suficiente —. Estoy embarazada de Sebastián.

Me río pensando que era mentira, pero la cara de él era de asombro, me mira a los ojos, no tenía la suficiente educación para saber cómo se hacen, pero sí que no debía hacer antes del matrimonio, caigo de rodillas, mis piernas me habían fallado, Alexander corre a sostenerme.

—Tengo que proteger a este bebé, pues si mi familia se entera podrán lastimarlo o usarlo en mi contra — Ella tenía un motivo válido, me pongo de pie con ayuda —. Lo siento.

—No es el momento — Reitera Ethan, haciendo que avancemos, Sebastián se queda quieto entre ambas, Victoria miraba como él me miraba, él no estaba enamorado de mí, solo preocupado.

Camino a la par de Victoria, mientras le quitó las cosas, estaba cargando pesado, y se las arrojó a Sebastián.

—Ayuda a la madre de tu bebé — Aún me gustaba Sebastián, aún lo amaba, me pongo un poco por delante para ir con Hiro, todos estaban teniendo hijos, esposa, y yo me estaba quedando atrás, no tenía nada de lo que mi madre había dicho, nada de lo que me fue inculcado, no era nadie.

Siento una mano cálida, era de Caleb.

"Te miras molesta" Me dice en un susurro.

"Lo estoy, y además cansada" Le suelto la mano, pero algo se aproxima a nosotros, del lado de Sebastián, era un lobo, lo raro era que era solo uno siempre vienen en manada, tomo mi espada, pero en cambio Victoria es quien lo hiere, para Alexander acabar con el. Ella también era hábil con la espada, caminamos un poco más para encontrarnos en una choza, esa tenía 2 camas y el piso de madera.