Después de nuestra sesión de besos, empezamos a comer el helado que se derretía lentamente sobre la mesa. El frío en la punta de la cuchara contrastaba con la calidez que sentía por dentro.
—Estoy enamorado de ti, Iris —dijo Reik, mientras yo me metí una cucharadita de helado en la boca.
Me atraganté al instante, tosiendo como si fuera a morirme ahí mismo. Me di palmadas en el pecho, buscando aire, hasta que logré dejar la cuchara y lo miré con los ojos abiertos de par en par.
—Reik… —apenas logré susurrar.
—Sé que estás con León —continuó, jugando con mis dedos, aunque su sonrisa era triste—. Pero ya no puedo seguir callando lo que siento. Me estoy ahogando. Estoy completamente enamorado de ti. Desde el primer momento que te vi, quedé idiotizado. Tú eres mi persona favorita.
Mi corazón empezó a golpear con tanta fuerza que casi podía escucharlo.
—Cuando te besé por primera vez… —respiró hondo—. Mentiría si dijera que no sentí algo increíble. Y cuando te dije que “ya no quiero que practiques con nadie más”, no fue solo una frase. Iris, estaba muriendo de celos. Cada vez que te veo con él siento una rabia que no puedo controlar. No soporto cómo él tiene tu sonrisa, tus risas, tus lágrimas, tus besos. Quiero ser egoísta. No quiero compartirte con nadie.
Su voz temblaba, pero sus ojos estaban firmes, clavados en mí.
—Cuando te encontré desmayada en la acera… casi me vuelvo loco. Las horas en el hospital esperando fueron las peores de mi vida. —Su voz se quebró—. No quiero un mundo donde tú no estés. Y no voy a decir la típica frase de “mientras seas feliz, no importa con quién”, porque sería mentira. Quiero que seas feliz… conmigo.
Sentí las manos frías, las piernas temblorosas, y un calor extraño recorriéndome las mejillas. Estaba muda, como si mi cerebro hubiera decidido apagar todas las funciones básicas.
Hola… ¿alguien? intenté llamarme por dentro, pero nada.
Reik dejó de jugar con mis dedos y acarició mis mejillas. Recién ahí noté que estaba llorando.
—Perdóname por lastimarte, Iris. No llores, por favor —murmuró.
Negué con la cabeza y aparté el rostro.
—Soy un monstruo… —escapó de mis labios sin pensarlo.
Reik tomó mis manos con suavidad.
—No lo eres. No me debes nada a mí ni a nadie. Te lo digo porque necesitaba ser honesto contigo… y conmigo.
Tragué saliva con dificultad. El nudo en mi garganta me estaba ahogando.
—Reik… tú me gustas. —Las palabras salieron atropelladas, pero era la verdad.
—No sé si estoy enamorada de ti. Todo este caos es nuevo para mí. Pasé tanto tiempo idealizando a León que cuando llegaste… fue diferente. Inesperado. Pero tú me gustas muchísimo. No dejo de pensarte. Extraño las noches de películas escondidos, los paseos desde la escuela, cómo mimas a Fifi, cómo me miras como si fuera lo más asombroso del mundo. Y Dios… cómo un solo roce de tus labios hace que mi corazón se desborde. Tú eres al único que deseo besar.
Reik se quedó en silencio, como si mis palabras lo hubieran dejado sin aire. Yo me cubrí la cara con las manos.
—Lo sé… soy lo peor —susurré—. ¿Cómo puedo decir todo esto si estoy con él? León nunca me ha hecho nada malo, siempre ha sido dulce. Pero no puedo sentir lo mismo que contigo. Si paso días sin verlo, está bien. Pero si paso un día sin ti… siento que me falta algo.
Mis dedos se aferraron a los suyos como un salvavidas.
—Intenté resistirme, de verdad lo intenté —continué, con voz temblorosa—. León merece que lo quiera. Pero no puedo. No lo logro.
Reik no contestó con palabras: sus labios encontraron los míos. Su beso era cálido, paciente, lleno de ternura y deseo.
—Iris, no eres un monstruo —susurró sobre mis labios —. No puedes obligarte a sentir lo que no sientes. Estar confundida no significa que seas mala persona. Solo significa que aún no tienes la respuesta.
Me aferré a él, temblando. Su voz y sus labios eran lo único capaz de ordenar mi caos. Por primera vez en mucho tiempo, todo encajaba… aunque en el fondo supiera que mi mentira no podría sostenerse por mucho más.
#1088 en Otros
#393 en Humor
#3195 en Novela romántica
humor, amistad amor ilusion tristeza dolor, humor aventura secretos y traciones
Editado: 27.09.2025