Capítulo 9
El lunes llegó con una mezcla de nervios y emoción para Clara. Después de un fin de semana lleno de reflexiones y momentos con sus amigas, estaba lista para enfrentar la semana escolar. La clase de matemáticas con la profesora Cassandra había sido un desafío extremo para ella, pero Clara se sentía satisfecha al haberlo superado sin que la bruja de cabello blanco la tomara contra ella.
Al salir del aula se dirigió de inmediato hacia su casillero para recoger sus cosas de literatura y mientras giraba en la esquina del pasillo, notó a un chico que si mal no recordar se llamaba Rayan. Este era un chico de su clase que siempre había sido un poco atrevido con ella, pero la solución para no desesperarse era siempre ignorarlo.
Cuando Rayan se acercó a ella con una sonrisa que, aunque parecía encantadora hizo que Clara se sintiera un poco incómoda. Agarró su libros con fuerza pegándolos a su pecho, esperando cualquier cosa que pudiera venir de aquel personaje.
— ¡Hey, Clara! — dijo Rayan, deteniéndose frente a ella —.l ¿Tienes un momento para hablar? Me gustaría decirte unas cosas bastante importantes.
Clara se detuvo por inercia sintiendo que su corazón latía rápidamente debido a la nerviosa que estaba, ya que Rayan además era el chico popular y carismático de la escuela. El mismo que siempre parecía atractivo, pero que luchaba todo a perder en cuanto abría la boca. Es por eso que no estaba segura de cómo se sentía al respecto tras haber sido llamada por él, pero en todo momento se mantuvo alerta ante cualquier situación.
— Hola, Rayan ¿Qué necesitas? —preguntó tratando de mantener la calma.
— Estaba pensando que tal vez tú y yo podríamos juntarnos para estudiar juntos y así poder pasar el examen de literatura. He oído que eres muy buena en eso y me encantaría un poco de ayuda de tu parte — dijo él acercándose un poco más a mí, poniéndome incómoda de inmediato.
Clara sintió un ligero rubor en sus mejillas, pero eso no quitaba su incomodidad. La idea de estudiar con Rayan no le desagradaba, pero había algo en su tono de voz que la hacía sentir que había algo más detrás de su propuesta. Algo que no sabía si estaba dispuesta a averiguar y mejor prefirió responder de manera inteligente
— Claro, podría ayudarte con eso, pero siempre y cuando sea aquí en la escuela mientras este con mis amigas — respodió intentando sonar casual.
En ese momento el profesor Kevin, su adorado profesor de literatura salió de su aula y se dirigió hacia el pasillo de casualidad. Sin embargo, al ver a Clara conversando con Rayan de manera tal cercana, de inmediato sintió un nudo en el estómago. La sonrisa de Rayan y la cercanía entre ellos despertaron una sensación de celos que no había anticipado y se detuvo en seco observando la escena con atención.
Rayan notando la presencia de Kevin se volvió hacia él con una sonrisa despreocupada, ya que este ignoraba por completo el motivo de aquella mirada tan intensa y feroz. Este no sabía que su profesor solamente tenía ganas de estrangularlo con sus propias manos por acercarse a Clara en vez de ir a clases y decidió que tal vez sería divertido hacerse en chistoso con él.
— Hola, Sr. Martínez. Solo estaba hablando con Clara sobre el proyecto de literatura y le pedía amablemente que me ayudara a estudiar para poder aprobar sus exámenes – dijo Rayan con un tono que parecía desafiante.
Kevin sintió que su mandíbula se tensaba al escuchar aquel tono de voz, pero más lo molestaba el saber que ellos dos pasarían tiempo juntos con la excusa de estudiar. Aunque, sabía que no tenía derecho a sentirse así por ella, pero la idea de que Rayan pudiera tener intenciones románticas con Clara lo incomodaba. Es por eso que se acercó un poco más a ellos, tratando de mantener la compostura en todo momento.
— Clara ¿Tienes todo lo que necesitas para ir a clases? — preguntó Kevin con su voz sonando más firme de lo que pretendía.
– Así es – respondió nerviosa.
Clara se volvió hacia él sintiendo un alivio al verlo, todavía con sus ojos que la invitaba. La presencia de Kevin le daba una sensación de seguridad, y al mismo tiempo, la tensión en el aire era palpable. Era como si se pudiese cortar el aire con una tijera bien afilada.
— Solo estaba recogiendo mis cosas profesor, pero enseguida entro a clases — respondió Clara sintiendo que la situación se volvía un poco incómoda.
Rayan notando la dinámica entre ellos sonrió de manera arrogante, como si se hubiese dado cuenta de lo que pasaba realmente.
— Bueno, Clara, si quieres, podemos intercambiar números y planear ese estudio para luego. No me voy a rendir hasta que digas que si — dijo este guiñándole un ojo.
Clara sintió que su corazón se aceleraba. No estaba segura de como responder a las palabras de Rayan. La idea de estudiar con él no le parecía mala, pero la forma en que él se comportaba la incomodaba. Además, le había dejado bien claro que la única forma de aceptar lo que le pedia era si llevaba a sus amigas y él ni siquiera le había contestado.
— Clara, creo que deberías concentrarte solo en tus estudios —dijo Kevin de la nada con un tono que sonaba más autoritario de lo que había pretendido.
Rayan al escucharlo de inmediato levantó una ceja totalmente sorprendido por la intervención del profesor, sin embargo, no dudó en hablar seguido de eso para dejar su punto bien claro.
— Vamos, Sr. Martínez, solo estoy tratando de estudiar con Clara. No hay nada de malo en que los dos estudiemos juntos — dijo Ryan con una sonrisa desafiante.
Kevin sintió que la tensión aumentaba con cada seis, pero no quería parecer posesivo ante los ojos de su otro alumno. Sin embargo, la idea de que Rayan se acercara a Clara de esa manera tan sugerente lo molestaba y lo único que pasaba por su cabeza era el querer apartarlo de ella.
— Lo sé, sé que no tiene nada de mal, pero Clara tiene un gran potencial y no quiero que se distraiga de su obligaciones. Si lo que necesitas es estudiar para los exámenes con gusto yo estoy dispuesto a darte un par de clases extras, para eso soy tu profesor — respondió Kevin, sintiendo que su voz se tornaba más firme.
Editado: 07.09.2025